CAPITULO 15: NO PUEDO RESPIRAR.

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Salió.

Salía de nuevo.

La sangre seguía saliendo.

«Coff».

¿No moriría por una pérdida excesiva de sangre?

“¡H-Humano! Choi Han-ah, si vomita sangre así y muere, ¡destruiré el mundo! ¡Destruiré las Llanuras Centrales!”

Oyó la voz de Raon.

«O-Oh, Dios mío-… Q-Qué tipo de ser es él-…»

También podía escuchar la voz temblorosa del Anciano Ho.

“¡Cale-nim, Cale-nim!”

Con la voz nerviosa de Choi Han, Cale finalmente no tuvo más remedio que hacer un sonido nuevamente.

«¡Coff!»

Salió sangre de nuevo.

Lo estaba volviendo loco.

Su cuerpo se tambaleó y se inclinó hacia adelante. El cuerpo que había estado sentado ahora estaba cayendo hacia adelante como si se estuviera inclinando.

Intentó estirar los brazos y tocar el suelo, pero su cuerpo no pudo responder rápidamente.

Sin embargo, su cuerpo no cayó hacia adelante.

«No te desmayes».

Cale asintió mientras Sui Khan lo apoyaba.

«Respira adecuadamente.»

Cale simplemente cerró los ojos en lugar de responder.

Se estaba volviendo loco por la sangre.

¿Está bien sangrar así? Si los humanos sangran así, ¿no mueren?

‘…Es refrescante.’

Se sentía cada vez más cómodo, y también tenía una sensación refrescante como si hubiera inhalado aire fresco.

Además, su mente se aclaró y se sintió cálido como si la sangre circulara por su cuerpo.

-¡E-Es difícil!

Se escuchó la voz llorosa del viejo llorón, pero Cale la ignoró.

Él lo sintió. Que su cuerpo se estaba recuperando a un ritmo más rápido que nunca.

‘Me siento mejor ahora.’

Bang, bang. Cuando sintió que su corazón latía a su propio ritmo, no salió más sangre.

«Algo para limpiar».

Las palabras se pronunciaron correctamente ahora.

Cale abrió las palmas de las manos. Las yemas de sus dedos no temblaban ya que estaba bien.

«Sí.»

Choi Han respondió claramente ‘Sí’.

‘¿Eh?’

Pero nada fue puesto en manos de Cale. En cambio, Choi Han y Raon limpiaron la boca, la cara y el cuello de Cale con toallas grandes que no sabía de dónde venían. Choi Han se limpió lo que había en su ropa.

«Humano, ¿estás bien ahora?»

«Si, estoy bien».

Cale respondió, francamente.

“Estoy en la mejor condición en este momento de los últimos días”.

“…¡Cale-nim!”

«¿Eh?»

Cale se detuvo ante la llamada que sonaba apremiante.

‘¿Que está mal con él? ¿Es porque se olvidó de llamarme joven maestro Kim desde antes?’

La expresión daba miedo.

‘!’

Pero vio algo más aterrador que eso.

Ron fue visto de pie sobre el hombro de Choi Han.

La persona que originalmente habría sido la primera en limpiar la sangre de Cale estaba parada allí, mirando a Cale.

Sin una sonrisa a la vista.

‘¿Qué?’

Aterrador, realmente aterrador.

La expresión fría hizo que Cale mirara hacia otro lado sin darse cuenta.

«¡Hah!» En ese momento, escuchó a Ron dejar escapar un suspiro de exasperación.

Los hombros de Cale se estremecieron. Sui Khan sonrió solo ante esa vista, pero nadie se dio cuenta.

Fue por las palabras de Cale que siguieron.

«Apártese del camino.»

Sus ojos se movieron a un lugar.

«Verifique la condición de Namgung Taewi».

Cale se incorporó.

‘Ya estoy mucho mejor.’

A diferencia de cuando colapsó antes, ahora podía levantarse muy fácilmente.

Se escapó del apoyo de Sui Khan y se acercó a Namgung Taewi, que estaba detrás de Sui Khan.

«… Joven Maestro Kim». Los ojos del Santo de la Espada estaban temblando. Cale lo miró y miró primero a Taewi.

Taewi yacía en el suelo de la casa abandonada.

Cale se acuclilló a su lado y miró el corazón.

El lugar donde sobresalía el espantoso corazón negro.

El corazón negro ya no se veía.

Esto no significaba que había brotado carne nueva en su lugar.

‘¿Qué es eso?’

Una membrana roja cubría el lugar.

Un film rojo que se parecía al color del Fuego de la Destrucción que usó Cale.