Mi primer y único amor un amor prohibido 💕
Capítulo 40
Saludé, seguí mi camino y ella tras de mi.
—Juliana: ¿Pensé que éramos amigas?, como hermanas— lo dijo molesta.
—Diana: ¿Acaso que te hice yo?— la miré.
—Juliana: ¿Por qué no me contaste que ustedes tenían una relación?, yo diciendo todas esas cosas de él, que estúpida— frunció el ceño—, imagino como se burlaron de mí, yo te cuento todo y tú no puedes confiar en mi, que tristeza, ¿por qué cuando te decía esas cosas no me dijiste nada?— parecía muy molesta.
—Diana: No lo tomes personal Juliana— si supieran que ya se la clase de persona que eres—,si tu quieres que un secreto permanezca oculto entre menos personas lo sepan mucho mejor, además era algo que nos correspondía solo a nosotros, en algo te equivocas nunca nos burlamos de ti.
—Juliana: Me puso muy triste que no me contaras, era con él que hablabas, por eso no dejabas que escuchara, les deseo de corazón que todo les salga bien pero veo muy difícil que acepten la relación, mi papá está muy ofendido contigo también, porque lo defraudaste.
—Diana: Gracias por tus lindos deseos— Sonreí hipócritamente—,mira prima con todo respetó yo quiero mucho a tu papá, él es como un segundo padre para mi, pero me importa un culo, lo que piensen los demás de mi, de esta relación, que opinen lo que quieran yo nunca les pregunte si están de acuerdo o no, me vale— lo dije molesta, abrió sus ojos como platos.
—Juliana: ¿Tanto lo quieres? para enfrentar de esa manera a todos, no te importa lo que piensen de ti.
—Diana: Si, lo amo, estoy dispuesta a todo por él.
—Juliana: Dime algo, ¿tú ya te acostaste con él?
—Diana: ¡Tú que crees!— Sonreí con sarcasmo.
—Juliana: No creo, tal vez.
—Diana: No, yo no tengo que meterme en su cama para conquistar un hombre— lo dije con doble sentido, ella solo bajó la mirada.
—Juliana: El día que lo hagas me contarás ¡verdad! mira que somos las mejores amigas.
—Diana: Por supuesto— mis palabras tenían cierto veneno—,cuando estemos juntos yo te cuento todo con lujo de detalles, al fin eres como mi hermana, mi mejor amiga, tú nunca harías nada para dañarme ni perjudicarme, tu cariño es sincero y único, nunca me fallarías.
Bajó la mirada, continuamos nuestro camino, desde ese día la relación de nosotras cambió, no solo de mi parte por lo que ya sabía, también de la suya, pues en el fondo ella no superó que Santiago se fijara en mí y no en ella, no volvimos hablar como antes, a veces nos encontramos para llevar desayuno o trabajamos juntas en el cafetal, hablamos pero cosas fuera de lo común, lo mas normal.
Juan me reclamó que como podía fijarme en ese bobo, se molestó porque le negué cuando él me preguntó, hasta el estúpido de Luis llamó a reclamarme, según que él era un idiota, triste porque me lastimó y yo feliz con ese imbécil, que el celoso del otro cuando yo estaba enamorada era de él, lo mandé a comer mierda por decirlo así, eso que me cogió de buen genio.
Empezó a decir que Santiago era un bobo, que no entendía que le había visto yo, que qué tenía Santiago que no tuviese él, sentí tanta rabia que le dije que él lo tenía más grande y no una miseria como la de él, creo que se puso furioso yo solo colgué.
Toda la familia se enteró ya, como siempre pusieron el grito en el cielo, el papá de Paola llamó a mi padre le dijo que eso era una estupidez, que era capricho y rebeldía, la tía Luz también me dijo que se me cerró el mundo, yo con ella nunca he tenido una relación cercana para mi es como cualquier desconocida, le dije que su opinión me la pasaba por… Eso porque mi madre me tapó la boca, abrió los ojos como platos, le dije que ella no era la mas indicada para criticar ya que tenía tres hijos de diferente padre, esa señora casi se le salen los ojos, mi mamá me dijo que era muy grosera, le dije que no dejaría que nadie se metiera en mi vida.
Una semana entera en la que mi padre no me habló para nada, ni me miró, el domingo mi madre no estaba, yo preparé el almuerzo lo serví y lo dejé en la mesa le dije a mi hermano que le avisara a mi papá que estaba servido, juro que trataba de no llorar, pero me dolía mucho su indiferencia, entró en silencio y empezó a comer, yo seguí organizando cocina que momento más incómodo hasta que escuché.
—Papa: ¿Cuándo viene Santiago? — lo dijo serio pero al fin después de 8 días habló, sentí un nudo en la garganta.
—Diana: Si Dios lo permite el miércoles— pasé saliva.
—Papá: ¿Por qué el miércoles?
—Diana: Porque como yo estudio los sábados y él empezó a trabajar los fines de semana en un supermercado y en semana le ayuda al papá— no me atreví a mirarlo, seguía de espaldas lavando los trastes.
—Papá: ¿Cómo fue que se enamoraron? ¿Cuándo? ¿En que momento?—me quedé fría, no pensé que me preguntara—,si el que te hablaba mucho era Juan.
—Diana: Nosotros tratamos de evitar esto desde hace mucho tiempo— me giré y lo miré a los ojos, estaba muy serio, a mi me temblaba todo—, porque sabíamos que estaba mal, al principio pensamos que era una tontería un capricho, luego en el matrimonio de Mariana todos esos sentimientos salieron otra vez, y en el cumpleaños de Yesenia entendimos que no podíamos evitarlo más.
—Papá: ¿Cuales son las intenciones de Santiago contigo?
—Diana: Nosotros estamos enamorados y queremos empezar una relación, por eso queremos tener su aprobación.
—Papá: ¿Seguros que es amor?—suspiró—,no será un capricho de ustedes.
—Diana: Estamos seguros que es amor, de lo contraria no estaríamos enfrentando todo esto, por eso Santiago, viene hablar contigo para pedir tu permiso como debe ser.
—Papá: ¡No entiendo por qué no hablaron entonces!
—Diana: Nos dejamos llenar de miedo, ese fue nuestro único error.
—Papá: Bueno al menos está dispuesto a dar la cara, esperemos que pasa.
Salío de la cocina, agradeció por el almuerzo, solté todo el aire acumulado, al menos era un avance, me sentía feliz por eso. Los nervios se apoderaron nuevamente de nosotros pues se acercaba el miércoles, veremos como nos va, Santi también estaba nervioso aunque no lo demostrara, por otro lado la alegría de verlo otra vez, solo fueron 15 días pero para mi siempre es una eternidad, me avisó cuando salió de su casa, sus papás no estaban muy de acuerdo pero aún así no les quedó opción, me organicé dejé mi cabello suelto utilicé un tono de maquillaje sencillo, eran casi las dos de la tarde cuando sentí que mi corazón se aceleró y mi piel se enchino, era la señal perfecta para saber que estaba a punto de llegar, esa cosquillas en el estómago, una alegría que no se puede explicar, justo en ese momento apareció al frente de mi casa, sin pensarlo corrí a saludarlo lo abracé tan fuerte como si hubiesen pasando años, dejé un pequeño beso en sus labios.
—Santi: Princesa mía—me besó—,te extrañé montones, como lo prometí aquí estoy.
—Diana: Mi vida, yo sabía que tú venías, eso jamás lo dudé.
Mi mamá solo nos observaba, entró a la casa, la saludó, ella correspondió muy amable con una sonrisa le dijo.
—Mamá: Me has dejado sin palabras— arqueó a una ceja.
—Santi: ¿Por qué?
—Mamá: Te seré honesta, no pensé que ibas a venir.
—Santi: Lo que yo siento por esta belleza— tomó mi mano la beso—es real, estoy listo para enfrentar al suegro.
Soltamos una risita, le preparé un jugo, luego de su bolso sacó una bolsa llena de frutas, yogures, entre otras cosas para mi, luego me entregó otra pequeña bolsa, me sonroje al recibirla, era un osito de peluche divino, tenía una pequeña almohada el osito tenía los ojitos cerrados, con el una pequeña tarjeta.
“ Ya hace algunos días cumplimos tres hermosos meses de relación pasamos lo más difícil ahora se que todos nuestros sueños se cumplirán, te amo mi chatica hermosa, princesa hermosa de mi corazón, estoy seguro que todo lo que anhélanos se cumplirá, te amo nunca lo olvides, yo siempre luchare por tú amor. ”
—Diana: Gracias por el detalle, está hermoso, no debiste molestarte.
—Santi: Para mi no es molestia hermosa, créeme que te llenaré de detalles y no solo materiales, para mi princesa siempre lo mejor.
Juliana no se apareció, eso si es extraño en ella, bueno para mi mucho mejor, mi mamá le preguntó si iría a saludar a la tía Gladis, él dijo que no era una visita para la familia, que si el estaba aquí era para hablar con la familia de la novia, él me dijo que las visitas serán para mi, que entre más lejos de ellas mejor, pasamos la tarde juntos viendo televisión o platicando, me contó que le esta llenado muy bien en su nuevo trabajo, también me dijo que dependiendo de lo que diga mi papá las visitas serán cada 15 días, ya que estamos lejos y estar llendo y viniendo le sale muy costoso, le dije que yo entendía la situación, incluso pueden haber días que nos toque esperar 20 días o el mes.