Cuando todo te harta "No debes perderte"

Joel ya estaba despierto cuando la alarma sonó. Un sonido tan melódico que parecía llenar la habitación con pequeños destellos; destellos de una promesa, la misma que se hacia todas las mañanas de todos los días del año, durante los últimos dieciséis años.
"Un día más y será el último".
Joel creía que dar su mejor esfuerzo le traería muy buenas recompensas, pero realmente así era. Tenía un puesto en una empresa ambientalista, una que procuraba el cuidado y protección de zonas naturales y de otras que corrían el riesgo de perderse. Lo cierto era que Joel tenía un trabajo normal, en una empresa normal, tenía una vida normal, bueno, eso creyó desde que tenía uso de razón pero algo ha cambiado tras sólo ver esas luces centelleantes al anochecer.