Antologia de cuentos del Druida Simarius Threll

Kyu y Sanki

En la felicidad de un hogar se encontraba una familia muy amorosa en la cual vivian madre, padre y tres hijos, dos varones y una niña. Debido a la agresividad con la que los niños jugaban, la niña decidio no volver a jugar los juegos de sus hermanos, entonces decidio adoptar una mascota; le dijo a su padre que queria ir a algun lugar donde vendieran animalitos y asi poder escoger alguno que se adaptara a la personalidad de ella.

En una Veterinaria paso por una gran fila de animalitos; vio perros, periquitos, hamsters, ratas, serpientes pero el unico que le gusto fue un gato, el gato era el que se adaptaba mas a ella y sintio una gran atraccion por los gatitos, los gatos tenian cinco meses de nacido y eran toda una ternura para la niña. -Papi mira que lindo ese gatito!- replico con emocion mientras daba brincos de alegria. La niña posando sus ojos en un gato color marron, el color se asemejaba al anaranjado o al color ladrillo, entonces decidieron conseguir aquel lindo animal.

 

Al pasar el tiempo el gato aprendio a cazar, se aprendio el horario de la comida y era muy educado, siempre que hiba a hacer sus necesidades hiba a una caja de arena  que le habia puesto su "madre", la pequeña niña. Su dueña siempre se reia del gato a grandes carcajadas, por que decia que su gato estaba "programado" para hacer las necesidades siempre en el mismo lugar tocandole a su dueña o "madre" cambiarle de arena cada ves que el gato la ensuciaba.

 

Pasaron los años y el gatito jugueton que se movia por cualquier movimiento impulsivo que le fuera provocado, fue cambiando de caracter, a un caracter mas orgulloso, pedante y pasivo, pero nunca le falto el respeto a su madre.

Todos en la casa querian al gato, lo alimentaban, lo acariciaban y algunos hasta se peleaban por quien era el dueño de la linda mascota, la joven siempre le decia cuando niña al gato, -como es que eres tan lindo sin hacer esfuerzo!?, te admiro gatito cazador!, te he entrenado como si fueras un guerrero, siempre batallaste contra mi y nunca me ganaste pero eres fuerte como para sobrevivir en las noches fuera de casa-, A lo que la joven ahora se referia es que cuando pequeña le gustaba jugar contra las garras del gatito y realizaba movimientos que llamaban la atencion del gato y este de manera juguetona le seguia y ella terminaba dandole vueltas, y este gato siempre arañaba y mordia las manos de la pequeña.

 

El gato siempre mostraba cariño hacia su madre y cuando esta hiba caminando se le avalanzaba en las piernas sin aruñarlas, ella al sentir la pansita de su gato sabia que el gato le devolvia los miles de abrazos que ella le daba y se sentia orgullosa, maravillada y encantada con la muestra de afecto de aquel gato.

 

Ahora el gato ya no jugaba mucho pero siempre demostraba su afecto hacia todos los miembros de la familia, se sentaba cerca de ellos, dormia en us piernas, mordia y arañaba las manos de los que el creia los "miembros de su camada'' como diciendo te atrape y no te dejare escapar; lo que los miembros de la camada del gato hacian eran marañas  para poder soltarse por que les dolian las manos cuando el gato jugaba.

 

El Gato luego de haber pasado la mayor parte de su vida en casa de los Threll decide abandonarla, el ya sentia que el amor de la familia era algo que nunca hiba a perder y fuera cuando fuera siempre hiba a ser bienvenido. El gato llamado Kyu desde pequeño, llamado asi por la lider de la camada crecio junto a ella al compas del tiempo y al compas de la edad, creciendo y fortaleciendose en diversas facetas de su vida pero la mayor practica la recibio cazando ratones serpientes, aves, mariposas en el jardin de la casa y una que otra salamandra de las que aparecen en las paredes de las casas rurales.

 

El gato decide abandonar la casa sin dejar rastro, huellas y sin ver hacia atras, no se puso a pensar en la tristeza de la lider de la camada y en la tristeza que pronto a su partida, inundaria la casa.

 

Kyu se sumerge en un bosque ahora convirtiendose en un gato montes que obedesia las reglas del bosque, protegiendose del frio del invierno, huyendo de la soledad y de todo tipo de amenazas.

Un gran encuentro que tuvo fue contra  un zorro, el pelaje de este se asemejaba al suyo y ambos disputaron una persecusion ha un conejo el cual les ayudaria a subsistir por un par de dias mas, ambos corrieron a toda prisa para poder atrapar al conejo pero en ese instante se vio la agilidad de cada uno al perseguir el conejo.

 

En la persecusion y corriendo a toda velocidad por las hierbas del bosque, esquivando y evitando tropezar con las ramas de los arboles uno de los dos fue el que logro atrapar al conejo, un sabor muy inesperado y delicioso sintio el gato Kyu, el gato no comia mucho asi que decidio compartir con el zorro, ambos comiendo y deleitandose con el rico sabor de la carne del conejo. Poco les importo ser vistos por pajaros carroñeros quienes esperaban con grandes ansias las sobras de aquella apreciada captura.

 

Muy rapido Kyu y el zorro se hicieron amigos, uno contaba las experiencias del bosque y los trucos para sobrevivir y el otro comentaba las comodidades y las risas que vivio con los miembros de su camada.

Fueron pasando los dias y ambos se convirtieron en grandes cazadores, el uno aprendia del otro. Kyu aprendio la habilidad para cazar de Sanky y Sanky aprendio la mansedumbre, la paz y la quietud de Kyu.

 

Ambos animales aprendieron mucho y en las grandes platicas de las  que siempre habian intentando descifrar el por que de haber nacido en un lugar diferente el uno del otro; el por que algunos nacen en diferente posicion que la de otros y el por que eran seres instintivos y siempre estaban a la defensiva. Kyu pensaba que eran asi por proteccion y Sanky pensaba que era por que no les gustaba que los molestaran.



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En el texto hay: fantasia, relatos breves

Editado: 30.06.2019

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