Capítulo Siete.

Capítulo Siete: Amistades y secretos. (I parte)

Kim TaeHyung

—¡Es una locura! —La voz de Jimin me sobresalta—. ¡¿Cómo rayos pudiste hacer eso?! —me lanza el cojín de su sofá a la cara—. ¡Tardaste en decirmelo!

Bueno acabo de relatarle lo que pasó con Katherine hace dos dias atrás en su pequeño y diminuto departamento, lo cuál me tiene realmente mareado de tanto pensar en como rayos la besé y en lo mucho que me gustó. La manera en la que su atrayente y delirante gemido hizo un descontrol en mí, y eso hizo que estuviera a punto de tirar todo y follarla en ese sillón hasta que ella se alejó, y ahí caí en cuenta de la situación.

Ella pidió que me fuera y lo hice, a pesar de no querer hacerlo, pero la entendí. Estaba abrumada y yo descontrolado, muy descontrolado por dentro.

Esa mañana me dí cuenta también que nuestra pelea fue tan natural, cosa que me gustó y es raro, porque cuando alguien me grita yo suelo mandar a la mierda a esa persona, pero con Katherine sucedió lo contrario, quise callarla con mi boca en la suya. Puede que su timidez al comienzo me hizo gracia hasta que después fue todo un revuelo.

Luego pasó lo del hijo de puta de Bryan, y ahí entendí muchas cosas y observé como sin importar que Katherine sea de su familia, la agredia. Solo cerré mis ojos cuando lo vi sostenerla contra la pared, me tranquilicé para no pensar que ese imbécil haya podido abusar más de la cuenta de ella. La vi indefensa y con miedo al no saber que hacer o que excusa dar. La otra vez fue valiente, pero el miedo inyectado en sus ojos que vi por primera vez fue de cansancio y solo pensé en que: Katherine Hudson está cansada de la vida que está llevando a causa de Bryan, su primo, que no es más que una mierda andante que salta hacia ella cuando puede.

No hemos hablado de lo sucedido, le di su espacio y me di el mío. Estoy confundido, porque al comienzo hice esa mierda de necesitar una tutora y sabía que el profesor la elegiría a ella, solo para tenerla cerca, tal y como NamJoon me lo pidió. Ahora solo tenerla cerca me está costando mucha confusión, la observo más de lo debido, pero ahi viene la confusión, si el deseo sea por tenerla vigilada o porque me siento atraido hacia ella. No voy a mentirme ni a negar que Katherine es una mujer hermosa, pero su manera al expresarse cuando expuso su trabajo ese mismo día que la llevé, me hizo querer caer por ella, habló con tanta pasión sobre sus fotografías que por un momento me sentí cálido y enamorado, sentimiento que solo produce cuando tengo y observo deslumbrado las fotografías de kth, la misma sensación comienzo a tenerlo con ella.

—Lo vi venir —dice Jungkook sin dejar de mirar su móvil, echado en el sofá del frente—. Por eso has estado al pendiente de ella.

—Recuerda que NamJoon se lo pidió —Jimin se deja caer en el sofá individual de su departamento—, pero eso no justifica que estabas a nada de querer empotrarla, TaeHyung.

—Que fino eres, Jimin—JungKook suelta una carcajada—. Volviendo al tema de la casi follada con la chica Hudson.

—Estoy a instantes de enloquecer, en verdad lo estoy —me agarro del cabello—. No sé en que momento pasó todo.

—Supongo que ahora podrás olvidar a la inolvidable fotógrafa de la que tanto suspiras o no —sonríe JungKook y Jimin frunce el ceño sin entender. Pongo los ojos en blanco —. Por si no recuerdas Jimin, TaeHyung nombró hace diez segundos que su kth es una mujer y no un hombre, y eso lo tiene tranquilo y emocionado por lo que veo.

—¿Eso habías dicho hace segundos? —pregunta.

—Gracias amigo por prestar atención a ese detalle. —Digo y esta vez el pone los ojos en blanco.

—Bueno, yo solo me quedé en la casi follada que estuviste a punto de hacer —dice Jimin, lo hace parecer lo más obvio—. No me culpes de lo demás.

Esto me va acostar muchas cosas y eso lo comienzo a presentir. Cierro mis ojos recostándome en el sofá.

NamJoon se entera y me mata, bueno no me mataría, se enojaría, y más por comenzar a querer darle prioridad a lo que sea que estoy sintiendo por Katherine, en vez de proseguir con el trabajo. ¿Pero estamos claros que eso no me importa, verdad?

Sacudo mi cabeza y recuerdo justo hace días antes lo que pasó con JungKook y eso es lo primero que pregunto.

—¿Quién era la castaña, JungKook? —lo observo y el se endereza en su lugar.

Si se pone tenso o nervioso, nunca lo hace notar. Así que es difícil saber lo que ocurre con él.

—¿De cuál castaña? —funce el ceño y es Jimin quien se levanta y lo observa más de cerca, solo para molestarlo—. ¿Qué?

—Hace días atrás observé tú comportamiento en la facultad.

—Ah, eso. Jiely estaba ahí y no sé porque — se encoje de hombros—. Así que no sé de que castaña me hablas.

Mi amigo se acerca más a Jungkook quien le pone mala cara, hasta que le sostiene su rostro cerca al suyo y eso parace hacerlo cabrear.

—¡¿Qué coño haces?! —se aleja y la carcajada de Jimin suena en todo su departamento.

—Tranquilo, solo quería comprobar que no estes mintiendo —se encoje de hombros—, pero es imposible saberlo. Espero que no te estés liando con alguien.

—Que gracioso.

—Aunque, necesito drama en mi vida —suspira y voltear a ver a Jungkook—. Quien sea la castaña de la que habla TaeHyung, dame drama. —voltea a mí— Tú sigue en lo que estabas, que de esta boca mia tan hermosa y sabrosa no saldrá ni una sola palabra.

JungKook y yo lo observamos sosprendidos e incrédulos. Si hay alguien de los siete al que nosotros dos podemos contarle y confiar nuestras cosas, ese es Jimin, está ahí siempre con nosotros. Si nos peleamos, luego lo arreglamos, pero siempre somos los tres.

Solía hablar con YoonGi hasta hace un año atrás desde que pasó un accidente de la cual por tres meses pasó culpándome. Perdió a una persona importante en su vida y si quizá yo tuve parte de la culpa, después me dijo que solo era un accidente y que no debería culparme. Solo que desde ese momento dejamos de hablarnos de nuestras cosas y todo desde la muerte de Kyo. YoonGi no a vuelto ser él mismo.