CAPITULO 18: PARTE DE ELLOS

CAPITULO 18: PARTE DE ELLOS

Me encuentro en mi habitación, preparándome con una vestimenta especial, han recogido mis rubios cabellos con una sencilla trenza que rodea  mi cabeza, llevo puesta una túnica blanca hasta mis pies, con mangas anchas y abiertas desde los codos alas muñecas. Sobre ella un manto igual de claro y con capucha. No puedo portar ni ningún objeto metálico sobre mí . Toc toc toc!! Alguien llama a mi puerta. –Ya es hora Rowena –hablo una mujer desde el otro lado.

Me vi por última vez frente a un espejo, el blanco no era uno de mis colores preferidos pero esto ameritaba que así fuese. Mi pecho se inflo  y lentamente libere el aire de mis pulmones, gire y Salí por la puerta.

En el corredor de la planta baja, esperaban seis individuos vestidos de igual manera. Me quede junto a ellos y esperamos escasos minutos en total silencio. Las puertas del gran salón  se abrieron de par en par, ordenadamente ingresamos con la vista enfrente.

Dentro del gran salón se encontraban todos vestidos de azul marino con sus rostros cubiertos por capuchas. Los iniciados travesamos el salón, hasta llegar frente a una mesa rectangular que estaba cubierta con un paño azul brillante, se encontraba en un piso mas elevado que el nuestro, pero se alcanzaban a ver bultos bajo esta.

A la izquierda de esta había una pequeña fragua de azulina con  su resplandeciente llama azul  del otro lado aguardaban miembros del consejo y  el director que esperaba para dar inicio a la ceremonia.

H:nos reunimos una vez más bajo el cielo estrellado de media noche, para dar un grato recibimiento a vuestros nuevos guardianes de la orden. Habiendo ingresado bajo su propio consentimiento y terminada la etapa inicial de entrenamiento, hoy darán un paso muy importante en sus vidas.- acto seguido saco un viejo papiro y recito las normas de los guardianes:

-Desde hoy su compromiso no solo será con la orden, sino con el medio que los rodea, siendo su única prioridad el de sembrar la luz  y erradicar la oscuridad.

-Defenderán los principios  de la orden y todo que esta representa. Los asuntos de la orden, son de la orden.

 -Sus  filos se mantendrán alejados de los inocentes, serán discretos e incluso actuaran desde la sombra.

-somos justos y luchamos por lo que anhelamos, un mundo mejor .cueste lo que cueste hasta la muerte.

Acto seguido de que el directo terminara la última frase del manuscrito por completo, los guardianes alzaron su puño derecho hacia su pecho izquierdo en señal de respeto a la orden.

El sr Hugo camino hacia nosotros con sus manos atrás y en silencio nos observó con detenimiento uno por uno. Luego alzo la mirada a uno de los guardianes del salón  que se encontraba a nuestras espaldas y lo insto  a acercarse a la fragua que estaba encendida, a medida que él también se acercaba.

Mi rostro denotaba seriedad, pero mi cuerpo tiritaba por dentro de los nervios, podía sentir mis palmas algo húmedas y un tanto frias .si alguien me hubiese dicho hace un tiempo atrás que mi destino sería el de perseguir bestias y seres oscuros, formando parte de una orden secreta. Pues me hubiese reído incrédulamente en su cara.

Viscent, me había preparado para la ceremonia pero vivirlo era algo completamente distinto.

De rabillo vi pasar a un hombre y llegar a la fragua. Ya de frente y con una completa visión del panorama, era Viscent el de enfrente.

El directo invito a uno de los del consejo a asistirle en lo que seguía. Basto una sola mirada para que Leinard dejara su ubicación y se posicionara al lado de este.

H: Ritania sheren, acércate- la primera dama de la hilera.

Rita mi compañera, era aquella que me dio la bienvenida esa vez en el comedor, pues era una morena de cabellos negros ondulados cortos ,ojos cafés , de baja estatura que no infundía miedo alguno, pero era letal con las dagas a distancia y muy habilidosa con el arco.

Con gran disposición y muy segura del paso que estaba por dar, paso al frente y se paró frente a la fragua.

Debíamos permanecer en total silencio y con la vista al frente, pero la curiosidad podía más. ella extendió su mano izquierda  hacia el director, el consejero le recogió los puños de su túnica dejando su brazo al descubierto.

H: juras proteger a la orden y cumplir con su propósito? -

R: si juro!!- con énfasis.

Acto seguido Viscent saco un sello de hierro de la fragua, con un azul intenso, con determinación este la apoyo sobre la piel de Rita escasos segundos, a lo que ella no puedo evitar ceñir sus ojos de dolor.

 Giro hacia el salón, alzo su puño hacia su pecho derecho saludando al resto y volvió a su lugar.

H: Rowena bags – era yo la que seguía.

Vi de reojos a Rita que ya se encontraba a mi lado, esta sonrió guiñando el ojo e impartiéndome seguridad. No parecía sufrir por su nueva marca, o lo disimulaba bastante bien.

Di un paso al frente y Camine con la vista en el suelo hasta estar frente al sr Hugo, alce mi mirada lentamente a los ojos de este, que me observaba con detenimiento y seriedad. Detrás de él se encontraba Viscent, con una visible mueca de lado, me observaba como un maestro orgulloso de su discípula.

Levante mi mano derecha y la deje suspendida en el aire, el sr Leinard alzo los puños de mi túnica, Hugo formulo la pregunta, a lo que conteste –si juro! –que retumbo en todo el salón.

Viscent se aproximaba, sus ojos azules no salían de los míos, traía el sello recién sacado de la fragua y lo poso con fuerza sobre mi antebrazo derecho y lo retiro.

 Un dolor gélido se apodero de mi brazo, era un ardor soportable. Observe mi brazo por unos segundos, la marca de los guardianes había quedado grabada sobre mi piel, una figura romboidal con un ojo dentro. De frio paso a caliente en cuestión de segundos. Gire y viendo al resto Salude como una guardiana honorable y volví a mi lugar.