11- Rosé trabajará con nosotros

Entregué los documentos a Jungkook, no pude contenerme de preguntarle sobre la “visita” de rosé.

JK: Ah ella… -Rascó su cabeza- ella quería entrar a trabajar aquí… pero le dije que no- Me lanzó una sonrisa.

T/N: Déjala, que entre a trabajar aquí-sonreí-

Jungkook me observó bastante confundido, no estaba preparado para lo que yo le decía, aclaro, yo tampoco, aprovecho de que yo estoy aquí, quiero tener a Rosé lo más cerca posible, para saber qué es lo que quiere hacer, si la mantengo lejos, podría intentar algo que no esperamos, prefiero conocer a los enemigos… ya conocen el dicho: “mantén a tus amigos cerca, y a tus enemigos aún más cerca”

T/N: Kookie, ¿No crees que es mejor que la mantengamos cerca? –Me acerqué a él- Ella no me va a hacer nada, no permitiré que lo haga y mucho menos a que te haga daño a ti –Levanté mi mano derecha- Lo prometo.

Él me tomó por la cintura y asintió, lentamente se acercó a mí y besó mi mejilla –Ésta noche vamos a cenar- Me susurró, respondí con una sonrisa.

JK: ¿A dónde quieres ir a cenar? –él estaba aún muy cerca de mí y hablaba próximo a mi oído, yo lo pensé un poco, luego respondí: “Al restaurante de Jin” Kookie me miró serio directo a los ojos a lo que yo traté de explicarme –Él nos había invitado a cenar ahí, no te lo había dicho. Cariño… no seas celoso, nos invitó a cenar con su esposa- Yo solté una risilla al final, lo había ocultado por un buen tiempo. Jungkook tomó mi mejilla y la pellizcó mientras decía: -¿Cuándo pensabas decírmelo? ¿Por qué me lo ocultabas? ¿Eh?

Yo intenté zafarme, como mi fuerza no era suficiente para conseguirlo, decidí optar por hacerle cosquillas, lo cual funcionó perfectamente, él comenzó a reírse haciendo que ambos cayéramos al sofá, me miraba fijamente, cada vez estaba más cerca, sus ojos viajaban de los míos a mis labios. Mi corazón se estaba acelerando, cuando él estaba a milímetros de mis labios, alguien abrió la puerta.

TH: L-lo siento –Salió y cerró la puerta, Jungkook y yo nos sentamos rápidamente y entre risillas tímidas cada uno siguió con su trabajo.

En la noche…

JK: ¡T/N! –Me llamó mi esposo, pues yo estaba terminando de organizarme, estaba tardando un poco, lo admito, pero fue porque tenía que atar muchas cintas al costado de mi vestido. Claro está que quería verme lo mejor posible. Jungkook y yo no habíamos salido como una pareja normal antes de casarnos.

Terminé con los últimos detalles y salí del baño, mi esposo estaba sentado en el sofá con el celular entre las manos, me paré delante de él -¿Nos vamos ya? Jin ha de estar esperándonos-  él levantó la cabeza y al verme dejó caer el celular de entre sus manos, solté una carcajada, lo tomé del brazo y lo halé hacia la entrada.

JK: T/N… ¿Cómo se llama la esposa de Jin? –Yo negué con la cabeza, había olvidado ése detalle, él continuó su camino hasta el auto. Minutos después llegamos al restaurante, Jin y su esposa estaban esperándonos.

T/N: ¿Cómo están? –Hicimos una reverencia y Jungkook  corrió el asiento para que me sentara-

JN: Me alegra verlos, déjenme presentarles formalmente a mi esposa, SunHee

Ella y yo intercambiamos miradas, ella me parecía muy familiar. La cena transcurrió tranquilamente, me alegró mucho de que mi esposo y mi mejor amigo que estuvieran llevando bien.

SH: T/N, -Yo dirigí mi mirada a ella- sé que puede sonar extraño, pero hay algo que me inquieta de ti, siento que te he visto en alguna otra ocasión, ¿Nos hemos visto antes?- yo desvié mi mirada, tratando de recordar algo, volví mi mirada a ella y negué con la cabeza.

JK: Cariño, ¿Recuerdas la primera vez que vi a Jin?-Asentí- realmente pensé que estaba interesado en ti- Jin lo interrumpió: “pero sí estoy interesado en ella”- SunHee lo miró y le dio un leve golpecito en broma, Jungkook lo fulminó con la mirada –Me refiero a que es mi mejor amiga, es mi hermanita, por supuesto que debo interesarme en que esté bien… ¿No lo crees T/N?

T/N: ¡Claro que sí Jinnie! Debemos cuidarnos de nuestras parejas, si alguno de ellos nos hace daño el otro debe cobrar venganza- después de decir esto, ambos nos miraron seriamente, Jin y yo solo comenzamos a reír. Pero  dejamos en claro que lo que estábamos diciendo era cierto.