6. En el infierno

Grace llevaba un mes esperando encontrarse con su familia. Se suponía que cuando mueres te reencuentras con tus seres queridos. Tal vez solo son mitos, tal vez ese no era el cielo sino el infierno, uno en el que ella no podía volver a ver a su hermano, a su madre o a su padre.

La chica no sabía qué momento del día era, no tenía ni reloj ni móvil. Nada que le ayudase a ubicarse. Solo sabía que los días ahí eran iguales, agradables, pero iguales. Ella quería irse pero no podía, la playa era infinita de derecha a izquierda y no había nada alrededor. Se sentó en la arena y por primera vez deseó salir de ahí, lo deseó con muchas fuerzas. 

-... no sé ni por qué pero te echo de menos-la voz de Aiden llego a los oídos de Grace, se le hacía conocida pero ella no estaba segura de quién era-. Necesito que vuelvas Grace, te necesito. 

Ese nombre, Grace, ella era Grace Martin. Entonces su cuerpo se sintió pesado de repente y cayó al suelo. Los recuerdos de su familia hudiéndose en aquel agujero llegaron a su mente azotándola con fuerza y un grito salió de su boca, desgarrando su garganta. Las lágrimas empezaron a caer por sus mejillas y lloró desconsoladamente, pataleó con fuerza hasta que volvió a escuchar esa voz tan agradable.

-Ella es Alexandra. Sé que no la puedes ver pero ha venido a visitarte, es su primer día.

Grace se preguntaba quién era Alexandra y quién era el chico, el cual su mente se esforzaba por recordar.

Ella intentó volver a moverse pero sentía que pesaba toneladas. No podía levantar ni un solo dedo. Empezó a respirar con fuerza, su cabeza le dolía, los huesos le dolían y lo único que pudo hacer fue gritar.