CAPITULO 14 - Ser o No Ser: Recuerdos Y Visiones De Mi Vida Pasada

CAPITULO 14 - Ser o No Ser: Recuerdos Y Visiones De Mi Vida Pasada

TANYA

            No sentía mi cuerpo, solo me sentía flotando y alegándome del ruido.  De pronto me veo como en mis sueños, vestida como Camila; ahora sabía que no era una visión de mí, era Lady Camila Robinson.  Tampoco podía creer el parecido, éramos como dos gotas de agua.  Solo éramos diferentes en el color del cabello y los ojos por lo demás éramos iguales.

            En estas visiones o recuerdos que no sé cómo decirles, veo a Camila con Juan.  Que para colmo es el clon de Jerry… Veía a Camila y Juan, veía su vida juntos, lo felices que eran. Esa felicidad la sentía mía, sentía la excitación cuando ella sentía sus besos, sentía su deseo, las ansias, la adoración, ese amor tan intenso y puro que yo no  había sentido esta que conocí a Jerry.  Vi como pintaba los cuadros Pradera y Otoño, puede apreciar como mía la pasión y las emociones que tuvo Camila al plasmarlo en los cuadros.  ¿Por qué me sentía ella, porque sentía todo lo que ella sintió en carne propia? 

            También vi y sentí su tristeza profunda y enorme al ver a Juan partir. Todo el dolor que sintió en su separación, la alegría de verlo otra vez después de casi un año de separación. La entrega, el placer, la certeza que una muerte segura; una alegría tan grande y abrumadora por su boda. Y de pronto todo negro, un dolor intenso, la agonía de una muerte lenta y dolorosa.  Todo paso ante mi mentó como si fuera una película de la vida juntos de Lady Camila Robinson y Juan Smith…

JERRY

            No podía creer que Anya Salome hiciera esto.  Yo había visto el cuadro antes pero no sabía cómo decírselo a Tanya.  Ella nunca había visto un retrato de Lady Camila y yo tenía miedo que ella pensaría del parecido que tenía con ella.  También era consciente de que le habían rumores en la Universidad de mi obsesión por Lady Camila y esa fue la principal razón que yo no quería decirle a Tanya del parecido entre ellas.  No quería que pensara que yo estoy con ella por el parecido y no porque la amo a ella.  Para ser sincero yo si al principio la observaba por su parecido con la mujer que me obsesión en mis sueños desde que tengo uso de razón, pero después cuando la fui conociendo; me enamore de ella.  Por su celebro, por su astucia, su dedicación en el trabajo, por su corazón que es tan hermoso; por su sencillez y su hermosura.

            Al conocer a  Anya Salome en la facultad ella, me quedo mirando como asombrada.  Pero al conocerme ella me dijo que tenía que ensenarme algo.  Y fuimos a su casa y me mostro dos cosas; la primera fue el retrato pintado por su tatarabuela de su tatarabuela y las cartas que había encontrado entre las cosa de la joven pareja.  Anya Salome me conto la historia del cuadro.  Según ella para el 1792 su Tatarabuela Anya era una gitana tenía el poder de la clarividencia y vio que una pareja la necesitaba.  Ella con su hermana fueron a buscar la pareja y a darle refugio y ayuda, Anya sabía que esta pareja moriría en pocas horas y así que los dibujo en el lienzo antes de hacer que su hermana se fuera con el retrato y las pocas pertenencia que tenia la pareja y les dijo que las guardaran hasta que llegara el momento de entregárselas a sus descendientes.  Anya me dijo que yo era el alma reencarnada de Juan y que el alma de Camila me buscaría, por eso era que yo tenía esos sueños, esos recuerdos de nuestro amor hasta que ella me encontrara. Y así paso, yo no creía mucho en su historia hasta que conocí a Tanya en ese museo y me dijo Juan.  Al principio pensé que era su novio, pero después con el tiempo recordé la historia de Anya y esa joven pareja que ayudo.  ¿Será posible que las almas reencarnaran?  ¿Será posible que dos personas, dos almas que se amaron en el pasado se pueda encontrar en el futuro?

            Desvié mi mirada del cuadro que Anya Salome había destapado y mire a Tanya, ella esta desmayada en el suelo en los brazos de Brad.  Yo salir corriendo a su lado y sentí a Anya detrás de mí.  Al llegar a su lado la vi pálida y sentí que mi corazón se mi iba al piso.

            - Esta bien, solo esta desmayada. – dijo Brad al verme llegar a su lado.

            - Ayúdame a llevarla a tu oficina – le dije a Brad tomándola en mis brazos, mientras el abría camino hasta su oficina.  Sentí que Anya está detrás de mí y la mire por encima de mi hombro – Espero que estés contenta – le dije en Latín Antiguo… - Si le pasa algo. – la amenace