Empatía

La escena que contemplaron Leila y Eilen no desaparecio, el recuerdo de como era su aspecto al perder su razón, en su rostro se dibujaba el miedo.
Mientras la escena de carnicería hecha por Murat seguía arrasando las vidas frente a el, una voz en el mar distrajo a las espectadoras y se dirigieron a la orilla del barco y vieron un bote acercándose.

- ¡Señoritas están bien! - Dijo un soldado en un bote que padecía por estar flotando por las violetas olas - ¡El capitán está preocupado porque no estan con los demás tripulantes!

El ambiente se transformó porque ya estaban los últimos piratas despedazados, sus ataques estaban siendo más violentos y Mourat se veía perdido por la sangre que derramó a su alrededor.

Eilen y Leila se apresuraron a estar lejos de la escena cubierta roja, avanzaron hasta llegar a la playa y los medicos estaban tratando de curar las heridas de sufridas por los piratas.

Eilen dio instrucciones para que atiendan a Leila y fue a hablar con Zolek en su tienda improvisada por el momento.

- ¿Capitán estás bien? - Pregunto preocupada a su lado.

- Niña todavia tengo hombres que están perdidos sin mi - Dijo riendo mientras mirando a los soldados que o lo rodeaban preocupados.

El ambiente se tranquilizó de poco a poco ya que los soldados daban algunas palabras de recuperación para que se anime aunque es un poco durante el tratamiento.

- Capitán Zolek en su barco se encuentra dos seres que tienen aspecto hombre pero cuando luchan no se parecen a ninguna de las razas que conozco.

Entonces a Eilen le llegaron recuerdos de las historias de cantos y libros elficos sobre la leyenda tiempo atras, como narraban los antiguos y su coneccion con la que fue la naturaleza del pueblo desterrado, de un pueblo sin su hogar trasformado por la tentación de un ser oscuro, arrancado de las raíces de las tierras que les ofreció el dios que los creo. Una tribu que era temida por su apariencia y lo que originaba al tenerlos como enemigos.

- Sabes lo que recuerdo al ver a el, recuerdo una canción de los libros de los elfos, pero esa letra también está relacionada con la 'Cait Coille ard' ( Las batallas de los altos bosques ) - Dijo Eilen sorprendida.

De pronto llegó Leila vendada, estaba presionando su herida, se acercó y se apoyó en unas rocas de la playa. Eilen al verla corrió a apoyarla y juntas llegaron al lado del capitán.

- Zolek ella es mi amiga Leila una elfa de la casa Tiare de los puertos Nezhenm ella podría saber la canción olvidada - Dijo Eilen.

- Lo siento pero no recuerdo muchas de las canciones de mi pueblo - Respondió Leila.

- Dichas canciones pueden esperar un poco - Dijo Gerar viendo a los barcos hundidos.

Un fuerte estruendo surgió de las llamas de la flota pirata, de pronto varias armas fueron arrojadas y cayeron a la playa cerca de ellos.

De pronto aparecieron dos sobrevivientes de los piratas, ellos se desplomaron unos momentos después que las armas hecha de Damazko llegarán a la arena. Estaban inconcientes y llenos de heridas.

Gerar se acercó junto a algunos soldados, verifico que estaban vivos y dio la orden de apretarlos.
Las naves ardían en el horizonte y mientras más se acercaba la noche los sobrevivientes se recuperaban lentamente.

Al llegar la noche Mourat ya había recuperado la cordura y al ver a Gabriel inconsciente y grabemente herido se llenó de emociones que no tenía hace tiempo. Las palabras que hace tiempo lo encadenaban se le vino a la cabeza.

- Ningún sacrificio es demasiado alto, ninguna masacre está fuera de mi alcance, haré todo por...

Una imagen volvió y se quedó plasmado en sus ojos. Una caricia la siento en su piel, eso lo calmo un poco. Levantó y llevo a Gabriel a la playa, al llegar paso por todos los soldados pero no vio a nadie, al llegar a la entrada de la espesa selva se detuvo y despues de un momento dijo en voz alta y enojada.

- ¡ Humanos tienen un día, creo que es mucho pero es mi palabra !

Dicho eso desaparecio en la oscura selva.

Así pasaron la noche apoyándose entre ellos, con los primeros rayos del sol y ya descansados se alistaron para regresar a su reino pero los problemas no tardaron en surgir. Mucho de los tripulantes no podían viajar por sus heridas y los botes no alcanzaban a partir todos.

Mourat paso toda la noche tratando las heridas de Gabriel en la mañana fue a la montaña para recoger las frutas. Al estar recolectando sintió que lo estaban vigilando de pronto escucho a lo lejos y vio a Leila que estaba en la tienda que servía como comedor.

Olfateo a u alrededor y se dio cuenta que era una elfa, también se dio cuenta de que había sangre en el aire. Supuso que habían casado, se enfureció y se dirigió al lugar de descanso de Zolek y dijo.

- Aquí no está permitido cazar a los tuyos, pueden recoger frutos y Vegeta pero no derramen la sangre de los hijos de Melea.

Zolek que estaba descansando dijo.

- Perdoname, no sabía que tenían un apego a las criaturas de la naturaleza.

- Diles a los humanos a tu cargo que no hay segunda advertencia, si derraman sangre yo derramaré la suya - Respondió amenazadora

De pronto Eilen levantó la voz y dijo.

- Necesitamos esa carne para que ellos se recuperen - Dijo - Son solo animales.

Mourat al oírla volteo a verla de reojo y le respondió.

- Acaso yo voy a tu ciudad y saqueó tu oro - Respondió con voz amenazante.

Eilen se enojo y le dijo.

- ¡Insensible! Lo necesitamos todos, que no vez.

El ambiente entre los dos se transformó por completo. Zolek comenzó a reír escandalosamente al verlos pelear.

- Jajaja,El miedo que provoca de una mujer es igual de grande que un Vastar.

Mourat se dispuso a regresar con Gabriel pero antes de partir oyó a un soldado decir que los piratas encontrados estaban todavía vivos.

- ¿Sabes que los piratas tenían armas forjadas por los elfos del norte?