#14

Caos...

Todos los seres humanos amamos distinto, cada uno conoce sus límites y sé que cada persona da lo que puede e intenta hacer feliz a los demás.

Quizás ese sea el error de muchos: el querer hacer completamente feliz a otros...

Nuestra felicidad está primero, nosotros somos los únicos que podemos hacernos felices. Las personas lo arruinan, se van, fallecen o simplemente deciden que ya no quieren que pertenezcamos a su vida... ¿No les parece un poco estúpido que nuestra felicidad dependa de tantas personas?

Cada quien ama como puede, algunos con afecto físico, otros no; puede que la gran mayoría ame negando y la otra gran parte simplemente ama odiando.

Todos estamos en una montaña de emociones en la que pretendemos que no nos importan las personas, la vida, la existencia de un ser superior, pero para ser sinceros ¿quién no lloró por amor? ¿Quién no sufrió por una pérdida? y sobre todo ¿quién no pidió al cielo que todo se detenga y vuelva a comenzar?

Yo puedo decir que estoy consciente de lo que es perder a alguien y también de llorar por amor... Pero todo el mundo se cree único y comienza a preguntarse ¿por qué si yo no lloré los demás tienen que llorar? ¿Por qué a todos les duele más que a mí? Y comienza un trance único en el que la persona no sabe cómo ayudar a un desahuciado...

Las palabras de una chica de 19 años no sirven para explicar todo, pero quizás una nota antes de morir sí. ¿Por qué todos esperan lo peor? ¿Por qué le quitan la gravedad a las cosas? ¿Por qué, por ser menor, no tiene problemas? ¿Por qué, por ser menor, no puede sufrir? ¿O acaso, porque es menor, no puede morir? Las culpas vienen luego, pero ¿por qué no se encargan de preguntarle cómo se siente sin recriminarle por su edad?

Como dije... cada quien tiene su manera de sentir, de amar, de odiar, y no puede ser cambiado porque a alguien no le gusta o no se siente conforme. La depresión es real, la ansiedad es real y, cada día, hay personas adultas menos responsables y más juzgadoras. Hay una sociedad más crítica, a la que no se puede complacer con un simple "No estoy bien".