6. solo... tu

Me encuentro con sus ojos a pesar de todo el gentío que hay en el lugar.

Por fin se digna a mirarme después de un mes de no hablarme. Si, un mes. Ni siquiera fue al verme al hospital, ni una jodida vez.
Y lo odio, a él, a mi ex y a mi.

Todo esto es una mierda.
 

Él es el primero en quitarla y yo estoy a punto de echarme a llorar otra vez. No debí venir. Hoy es el cumpleaños de una amiga en común y no pensé verlo, es más no quería.

  Recorro el pasillo de la casa y encuentro el patio, enciendo un cigarrillo y me siento sobre el césped recién cortado.  

Aspiro profundo y otra vez las lágrimas se amontonan en mis ojos, no debería estar así, ni en este lugar ni con el corazón roto y peor, sin Daniel.

— No sabia que fumabas —su voz me llega a los oídos, alzo la mirada y Daniel me mira desde arriba con las manos en los bolsillos.

— es chistoso por que yo sé todo de ti — río triste — y no me conoces — termino el cigarrillo y me levanto , tengo que salir de aquí.

— Mel...— me toma del brazo y me atrae hacia él — lo siento— me retuerzo— lo siento, si. Mel  lo siento — empiezo a llorar.

— un mes Daniel, sabes lo que pase ese mes. Estuve en el hospital y nunca apareciste— intento alejarlo —Desapareciste y ni siquiera esperaste a que te explicara— lo alejo de mi bruscamente.
 

— ¿ En el hospital?...como... Yo... No sabía.... Mel estas bien...— intenta acercarse sus ojos ahora tiene lágrimas, no lo dejo .

Me río y las lágrimas siguen callendo— es mejor dejarlo así...— no termino.

Los labios de Daniel están sobre los mios. No correspondo, lo miro, el tiene los ojos cerrados.
— por favor Mel besame— me besa de nuevo, mis ojos se cierran y mis barreras caen. Soy una tonta 

Mi corazón salta en mi pecho, las mariposas regresan y el odio se apacigua. Sus manos toman mi rostro y me besa lento, lo sigo.  Mis mano agarran su camisa y lo atraigo mas a mi..
 

Aun lo quiero, después de todo aun lo amo. Deja de besarme y me abraza, yo hago lo mismo.
 

— te eh echado de menos Mel, enserio, lo siento.Soy un idiota, lo se, pero no supe como actuar. Me asuste, no se por que, pero me asusto. Eh estado andando de aquí para allá pensando en ti, debí hablarte desde mucho antes, debí buscarte hace mucho — me mira y limpia mis lágrimas— por favor Mel perdoname — me besa otra vez.

— te perdono— lo abrazo.

 

Nos quedamos así por un buen rato —y como un cliché— , casi como si fuera un momento infinito.