Capítulo 3

Al llegar a mi casa. Recostada en la cama pensaba en ¿cómo podía ser posible? seguro todo era una gran confusión.  No creía que Zoe fuera tremendo monstruo. No podía creerlo. Su voz era tan distinta además ¿por qué trataría de esa manera a su novio? no era para nada justo.

Al día siguiente. Llegué a la escuela, me senté. Pero ahora le tenía demasiado miedo a Zoe. ¿De qué más podría ser capaz? era un verdadero monstruo. Pero aún pensaba en que todo eso había sido una confusión.

En ese momento lo vi entrar. Él vino hacia mi.

–Estuviste ahí. ¿Viste lo que me hizo Zoe?

–No sé de qué hablas–Suspire–.Tengo que estudiar un poco.

Él me mira desconcertado pero no insiste. Lo miro irse a su asiento y no deja de mirarme. Voy a fingir que no sé nada. Pero después de todo, ¿Zoe es un monstruo? La miro entrar al salón y ahora me invade el temor, esta chica de verdad que es capaz de muchas cosas.  Por suerte esta vez me ha ignorado, de hecho creo que la mayoría del tiempo siempre me ignora. Si me mira es solo porque quiere provocarme.

No sé en qué me acabo de meter. Definitivamente enamorarse en el bus que viene hacia la universidad no fue una buena idea. A la hora de descanso veo a Zoe, tan feliz tomando del brazo a su novio. Tan amorosa como una novia cualquiera ¿tendrá algún trastorno mental? ¿O es que solo se siente superior con él? sea cual sea el caso no es de mi incumbencia.

Al llegar a casa. Me encuentro con mi mamá preparando comida.

–Hola, mamá–La saludo y le doy un beso en la mejilla.

–Hoy vendrán tus tíos, tu prima y su prometido.

–¿Prometido?–La miro confundida.

–Tu prima Cassandra, se va a casar. Vienen a contarnos y a pedir ayuda para la boda supongo.

–Vaya que sorpresa–Mencionó con sarcasmo–.Cassie, siempre soño con casarse. Y mira lo logró.

–Hija, cada quien tiene sus propios sueños, no la juzgues.

–Entonces, si llegan a mencionar algo con respecto a mi vida amorosa. Diles eso. Que mis sueños son diferentes y que no me juzguen. No necesito un "príncipe azul"–Mamá niega con la cabeza–.¿Cómo esta Cali?

–Por ahora está dormida. Pero sabes que ella te adora y por supuesto te extraña demasiado.

–Lo sé. Yo también desearía quedarme todo el día con ella, pero debo estudiar para tener una mejor vida.

–Si hija. Bueno deberías ir a prepararte tus tíos y tu prima vendrán dentro de 3 horas.

–¿No necesitas ayuda?–Le sugiero.

–Para nada. Tu encárgate de verte linda esta tarde.

–Gracias mamá.

Me esmeró por verme linda. Me pongo un vestido y tacones algo que no estoy muy acostumbrada a usar. Pero supongo que me veo linda, debo mostrarles a mis tíos que no necesito un novio para ser feliz. Estoy arreglando mi cabello cuando escuchó ruido abajo, y han llegado. Al terminar, salgo de mi habitación y bajo las escaleras con cuidado. Todos me miran.

–Tíos–Los saludó con la mano.

–Hola, Chiara–Responde ellos.

–Prima, te ves espectacular–Menciona   Cassandra.

–Gracias tu igual.

Veo a su prometido. Es bastante apuesto y joven. Me agrada, se ve un chico muy agradable. Comienzan a hablar.

–Sophia está a punto de terminar su carrera, seguro que cuando salga no tardará mucho para estar comprometida igual que nuestra Cassandra–Alardea mi tía–.Mis hijas son muy bellas.

–Seguro que tu hija también se casa–Le menciona mi tío a mi papá.

–No estoy seguro–Suspira y pone su mano sobre mi mano–. Pero haga lo que haga yo la apoyaré.

–Deberias salir con alguien, tu prima Sophia tiene un novio y es un buen muchacho. No sabes son todos tan encantadores, deberías conocer alguno Chiara–Mi tía me mira.

–No, la verdad es que no. No me interesa salir con alguien por el momento.

Después de un rato aprovecho para salir un rato a caminar. Necesito despejarme de todo lo que mis tíos me han dicho. De verdad que no entiendo. Salir con alguien, no es lo que buscó. No quiero salir con nadie más y que me vuelvan a engañar.

He llegado al parque. Encuentro una banca vacía, los niños están jugando. A veces desearía volver a ser una niña pequeña, aquella que pensaba que todo era como en un sueño. Pero la realidad es que el amor es terrible. Recuerdo cada detalle de ese día. La sonrisa triunfal de Sasha. La mirada de Mason. Los recuerdos vienen a detalle y no puedo evitar a soltarme a llorar. Pero aunque lloro no me siento bien del todo. Lloró y lloró, dicen que llorar te ayuda a liberarte de todo. Pero en realidad yo sigo queriendo llorar por siempre,me preguntó cuando será la última vez que llorare por esos amargos recuerdos. En ese momento alguien se sienta a mi lado.

No me atrevo a mirar. Me pone un pañuelo en la mano.

–¿Por qué estás aquí sola?

Al levantar la mirada para comprobar que es él. Lo confirmo. Es él.

Quizá las casualidades de la vida nos hacen encontrarnos de las maneras más inesperadas.

–Lo siento, no debería estar aquí.

Me levantó rápidamente de la banca. Y lo escuchó.

–¿Viste lo que hizo Zoe?  sé que lo viste. Por favor no digas nada.

–No te preocupes. No es mi asunto.

Comienzo a caminar rápido. Es por eso que no debo enamorarme de nuevo. No quiero sufrir de nuevo. No quiero llorar todo el tiempo por alguien que ni siquiera lo merece. Camino de vuelta a casa sin dejar de llorar. Este sufrimiento me acompañará toda la vida y es por eso que no quiero enamorarme porque no quiero sufrir más de lo que ya sufro.

Al llegar a mi casa. Parece que todos se han ido. La mesa está vacía y mamá supongo que ha salido con ellos. Comienzo a limpiar la mesa. Recojo toda la basura mientras pienso en todo que lo que me ha sucedido. Realmente me siento muy triste. Quisiera deshacerme de toda esa tristeza pero no encuentro la manera.

Al día siguiente. Camino hacia la escuela, llevo un paraguas pues han dicho que probablemente lloverá y el cielo realmente está bastante gris. Más vale prevenirme.