Luciérnagas

Todos soñamos con un romance adolescente, incluso después de los veinte.
El problema es que hay muchos más problemas a esta edad, más responsabilidades, más crisis y más dudas.

Basta un segundo para conocer a alguien que será parte de tu vida para siempre – y el padre de Aria tenía razón.

— ¿Tú tienes miedo? – preguntó Deva.

— ¡Por supuesto que si! Todo el mundo tiene miedo, nadie puede escaparle, pero si decidir qué hacer con él — contestó Luciana al ver a su prima incapaz de dar un paso más allá.