10. EL CUARTO SECRETO

Afortunadamente toda esa tensión que hubo con mis amigos a cierto tiempo se fue desvaneciendo poco a poco, Dennis y yo nos pedimos disculpas por lo sucedido, Ulises ya no mencionó absolutamente nada sobre esos halagos de Oscar, mientras que él... Seguimos trabajando juntos, no hizo nada para sospechar o fuera de mi desagrado, al contrario me fue conociendo e hizo mejor el trabajo, hubo ocasiones que le invitaba algo en la hora del almuerzo por su esfuerzo, lo merecía. 
Llegó la fecha de presentar todo lo que tanto esfuerzo nos costó, de hecho fuimos unas de los mejores en el grupo, fue inevitable no sentir nervios al momento que nos mencionaron, sin embargo me tranquilice y mostré mayor seguridad en mí hasta que finalizaron las presentaciones hasta que mencionó el profesor el mejor proyecto. 
– "La pareja que hizo el mejor trabajo es... Damaris y Oscar, presentaron más de lo que yo les había solicitado, merecen un aplauso por favor muchachos,denle un aplauso chicos. Esto no estaba incluido en evaluación pero su explicación ¡TODO! Quedó más que perfecto, pasan con 10 directo la materia, a partir de este momento con mi materia tienen tiempo libre muchachos, felicidades. – Nos mencionó el profesor emocionado. 

 – Fue inevitable no soltar las lágrimas de felicidad recorriendo mis mejillas aunque me limpie discretamente creo que dos o tres personas lo notaron entre ellos Oscar, fui a mi lugar felizmente, mostrando una gran sonrisa a cualquiera. 

De lejos Ulises y Dennis nos vieron fijamente con una sonrisa, supongo que les transmití mí felicidad a ellos. Parece que todo el salón por fin valoró algo que hice aunque escuchaba unos susurros cerca pero lejos de mí. – " Cuando son novios cualquiera puede hacer un tonto proyecto, entre estúpidos se entienden perfectamente así que... Ellos son el dúo perfecto" "cuando eres la mascota del profesor cualquiera puede pasar una materia, matemáticas les conviene más así no utilizan tanto el cerebro".

– Sentí vergüenza aunque sé perfectamente todo el esfuerzo que Oscar y yo pusimos en este trabajo, varias horas dedicadas y piensan eso, hasta que sentí la mano de Oscar en mi hombro dándome a entender que escuchó las palabras de los que dijeron ello, nuestra situación me amargó el día pero no quería quedarme callada ante ello así que con brusquedad me levanté de mi silla. 

– ¿Sucede algo Damaris? ¿Tienes alguna duda o por qué te paras así en plena explicación? – Dijo mi profesor confundido. Las miradas de mis compañeros fueron muy pesadas pero no me importaba en aquel momento. 

Damaris: Lamento muchísimo interrumpir su clase profesor pero no me pude contener ante ello. 

– La mirada de mi profesor decía todo– ¿De qué hablas Damaris? Sinceramente no entiendo y eso soy el que estoy enseñando. 

Damaris: Estas idiotas – Señale a mi derecha– Están diciendo estupideces de mí e incluso de usted, solo porque hablo con usted no significa que tenga la calificación comprada o ganada, al contrario es para esforzarme cada día, que no tengan cerebro no es mi culpa. 

– ¡OYE TÚ, CUIDA TUS PALABRAS PORQUE NO SABES CON QUIEN TE METES! – Gritó la culpable. 

Damaris: ¿Ya ve? Ni siquiera negó lo que dije, podemos observar a una... Perra ladrando a mi derecha. 

– ¡CÁLLATE ESTÚPIDA! – En eso veo que se va en contra mia. 

– ¡YA NO SIGAN! – Dijo mi profesor mientras nos separaban – Ambas las llevaré a dirección para que se hagan cargo de ustedes dos. 

– Profesor, ella fue la que inició el pleito, yo ni dije nada. 

Damaris: ¿Y por qué no lo negaste? Al contrario, te fuiste como animal conmigo pero no te preocupes, el moreton se puede cubrir con maquillaje. – Dije entre risas. 

– Un momento Damaris, ¿de verdad la golpeaste? – Dijo mi profesor sorprendido. 

Damaris: Sí, ¿por? Nadie me iba a golpear tan fácil, ¿o eso quería? 

– ¿Si sabes lo que me estás diciendo Damaris? Pudo pasar algo de gravedad con tu compañera o incluso contigo. 

– Ay profe, me duele mucho mi cara, ella me golpeó muy feo. – En ello se pone a llorar. 

Damaris: Pero no decías nada que te dolía las palabras que dijiste de mí, del profe e incluso de Oscar, ¿verdad? 

– Eres una... 

– ¡YA POR FAVOR! Sea la situación, ambas en este momento se Irán a la dirección, tú Damaris me sorprendes porque siendo una de las mejores actúas así. – Me dijo el maestro enojado. 

Damaris: Como sea, no importa. 

– ¡VAYAN YA A LA OFICINA! – Gritó el profesor muy enojado señalando hacia la puerta. – Me fui como dijo el profesor mientras que alguien más estaba haciendo un gran escándalo por un pequeño golpe aunque ella se golpeó por accidente. 

– Una vez ya estando en la Oficina nos pidió a ambas narrar la historia de lo sucedido, claro no faltaban las exageraciones de ella, me sorprendí cuando llegaron testigos a confirmar su historia, ¿quién me iba apoyar? Solo pensaba hasta que llegó Oscar. 

Oscar: Hola director buenas tardes, sé que no me llamó pero vengo a decir todo, ese grupito de amigas solo están exagerando de lo sucedido. Tienen razón en algo, la acción de Damaris fue muy... Inesperada para una chica tan bonita e inteligente como ella pero lamentablemente sus emociones la dominaron esta vez pero tiene una razón aparente y es que ellas estaban diciendo falacias de Damaris hasta del profesor y no tuvieron el valor para decirlo en su cara. 

Director: Es... Lindo que un compañero como tú defienda a alguien como... Ella, pero es mejor ser franco chico, dile que te gusta y por eso la estas defendiendo en esta situación. 

Oscar: ¿Qué? ¿Es enserio? 

– ¡JAJA! Hasta el director sabe tus sentimientos por ella, la diferencia es que no lo quieres admitir por pena, niñito. 

Director: ¡SILENCIO! Independientemente de tus sentimientos por ella, es lindo que la defiendas pero no tienen evidencia de quien le dijo que a quien, ¿o si? Solo hay testigos de la confrontación.