PARTE VI: VIEJOS PROBLEMAS NUEVAS SOLUCIONES (II)

Isthar

Tuve que respirar hondo para poder tranquilizarme, y dar inicio a la vista. Además tenía la obligación de anunciar que la Emperatriz, al tener conocimiento de las desgracias que acarreaba el sorteo de las esclavas, había decidido, como primer paso para su eliminación, darles un sueldo desde que dejasen el servicio obligatorio, y extender éste hacia el género masculino, aunque ellos se dirigirían hacia la milicia, y con el pago de la paga después de haber servido al Imperio.

Isthar: "Se inicia la Vista con la declaración del Querellante, por favor... inicie su exposición.", será cerdo.

Artemio: "Con la anuencia de su Ilustrísima Alteza..."

Isthar: "Le recuerdo que yo NO soy la Emperatriz, solamente su representante o si lo prefiere su voz en este asunto, así que no vuelva a llamarme Alteza, o la próxima vez recibirá algún que otro azote."

Artemio: "Disculpe mi señora..."

Isthar: "Eso está mejor. ¡PROSIGA!"

Artemio: "Desde hace algunos años, el señor Rodero y yo teníamos un acuerdo por el cual yo le dejaba cultivar una parte de mi finca, en concreto la zona próxima a su vivienda. Y ya lleva, con éste, tres años, que no me paga la renta estipulada. Ahora dice que el terreno le fue cedido por el Imperio, al igual que a mí, para lo cual entrego una copia del documento que se me entregó cuando actualicé mis datos."

Isthar: "Ahora le cedo el turno de la palabra al Querellado, por favor inicie su exposición."

L. Rodero: "Todo lo que ha dicho el Sr. Artemio es falso. Nunca he tenido ningún acuerdo de arrendamiento de tierras con él, las tierras, que dice que se las he arrendado, siempre han sido cultivadas por mis antepasados hasta llegar a mí, el problema es que hace un par de días, alguien entró en mi casa robando varios objetos de valor y algunos documentos, entre ellos la actualización de datos para seguir con la explotación...", interrumpí a mi padre.

Isthar: "Capitán, ¿es cierto que ha habido robos selectivos en esta zona?"

Capitán: "La verdad, mi Señora es que sí, pero no tenemos ni idea de quién está detrás de estos robos..."

Isthar: "Sr. Rodero, entregue a la Capitana de mi guardia personal su Número Imperial. ¡Capitana!"

Capitana: "A su servicio, Favorita Isthar."

Isthar: "Con los datos que he recabado, vaya al Centro Imperial de Documentación, y dígale al responsable máximo que para esta tarde requiero todos los documentos y expedientes de los datos que ha recibido."

Artemio: "Con permiso mi señora, con la documentación que yo he aporta...", me incorporé evitando que alguna de la escolta fuese a golpear a esa sabandija.

Isthar: "A todos se les olvida que la Favorita Imperial, es una humana exiliada, al igual que vosotros, y que yo me tengo que guiar por la Documentación Imperial, no por un papel que me entrega una de las partes en conflicto. La Vista se reanudará a media tarde, cuando se hayan recuperado del descanso de mediodía y la luz sea algo más oscura que ahora. Por favor siguiente asunto."

El Capitán indicó que ya era la hora de hacer público el nuevo Decreto Imperial. Entonces hizo que subieran a su estrado a una anciana para que la situasen en un lugar de privilegio.

Isthar: "Señoras y Señores, estamos aquí reunidos para dar a conocer la magnanimidad de la Emperatriz Helanka, cuya luz nos guía en estos momentos de incertidumbre. Ha conocido de primera mano, las dificultades y los abusos a los que habéis sido sometidas, y también de las penalidades que, por desgracia, algunas habéis tenido que pasar cuando terminó vuestra servidumbre. Para que podáis ir sobrellevando la situación la Emperatriz me ha encargado personalmente que os haga varios anuncios:

El primero consiste, en que todas las mujeres vivas, que hayan sido seleccionadas para servir al Imperio, recibirán una paga mensual. Por ello haré entrega a la persona de más edad que haya servido al Imperio un cheque por valor de 450.000 Queros. Durante todos los meses se hará un ingreso de ese importe en la cuenta de su banco. Según el tiempo que haya transcurrido desde que cesaron en su servicio al Imperio sea menor ese importe irá disminuyendo. Asimismo os quiero anunciar que solamente en el caso de que el importe retribuido sea evidentemente inferior a la prestación del servicio al Imperio sus deudos más allegados recibirán en una sola paga el importe total que le hubiese correspondido, sin embargo esta paga, una vez se haya cubierto su periodo de servicio al Imperio, se mantendrá de forma vitalicia hasta el óbito de la interesada.