Cumpleaños de Jack

Me asomé a la escalera y vi a todos sentados en el sofá escuchando música clásica, con una copa de vino en la mano, reían y actuaban con la mayor naturalidad, Melisa ya estaba con ellos, entonces comencé a bajar los escalones y todos me miraron, Jack se levantó de su asiento en cuanto me vio, se puso al pie de la escalera y me ofreció la mano para ayudarme a bajar, me detuve por un momento, lo odio tanto, pero entonces recordé que tengo que actuar como si no sucediera nada y acepté su caballerosidad dándole la mano
447 Te ves hermosa – dijo – 
448 Gracias – ambos nos sentamos en los sofás con Julia, José, Michael y Melisa – 
449 ¿Quieres un poco de vino? – preguntó – 
450 Me encantaría – Se levantó y fue a la cocina – 
451 Entonces querida ¿cómo te has sentido estos días que has pasado con nosotros? – preguntó José – 
452 Me he sentido algo triste por la muerte de mis padres, no puedo mentirles, pero valoro mucho el esfuerzo que han hecho por nosotras y por darnos el hogar que perdimos, he llegado a sentir un inmenso cariño por ustedes – sonreí y me quedé sorprendida por mis habilidades de actuación – 
453 Nosotros también hemos llegado a sentir un inmenso cariño por ustedes, sobre todo por la pequeña Ana que ha robado el corazón de todos en esta casa – Dijo Julia con una amplia sonrisa, entonces Jack llegó con dos copas de vino en sus manos – 
454 Gracias – tomé una de ellas – 
455 Hagamos un brindis – propuso Jack – 
456 Claro – dijo Julia poniéndose de pie – 
457 Porque todos los planes que tengamos en el futuro salgan a la perfección – Dijo Jack mirándome y con una sonrisa en la que se notaba la ironía, le sonreí de vuelta – 
458 Salud – fui la primera en decirlo, alcé mi copa y tomé un sorbo, miré a Michael y se veía distante – 
459 Salud – dijo Julia, ella y José se miraron con complicidad – 
460 Solo hemos hablado de cómo se siente Megan y Melisa no nos ha dicho nada – Dijo José – 
461 Yo no me siento bien del todo, extraño muchísimo a mis padres, pero gracias a dios que tengo a Megan y a Ana, por eso no me siento sola del todo – respondió Melisa – 
462 Supongo que Melisa aún no se ha podido acostumbrar a esta nueva vida – dije – pero es de esperar, ha pasado muy poco tiempo
463 ¿Y tú te has acostumbrado? – preguntó Julia – 
464 En realidad, no – respondí – pero creo que con el paso del tiempo pueda llegar a hacerlo – 
465 Yo también lo creo – dijo José, entonces hubo un breve silencio en la sala y comenzó a sonar una pieza clásica, me sentía como si me hubiera tele transportado a los años cincuenta, vi como Jack se dirigió hacia mí – 
466 ¿Te gustaría bailar? – preguntó – 
467 No, gracias – respondí, entonces Jack me quitó la copa de vino de la mano y la puso sobre la mesita que había al lado del sofá - ¿Qué haces? – pregunté confundida y él sin responder tomó mi mano y me haló haciendo que me levantara – 
468 Bailar contigo – respondió – 
Sentí su mano fría en mi espalda y me pegó a su cuerpo firmemente, yo puse mi mano en su hombro, con la otra sujeté la de él y comenzamos a balancearnos al ritmo lento de la música, su mirada estaba puesta en mí - ¿Por qué no me miras a los ojos? – preguntó, yo tenía que actuar natural, así que con dificultad alcé la mirada, esto me hizo recordar todo lo que pasó aquel día, estaba tan asustada que mi corazón se aceleró y creo que él lo sabía, entonces puso su rostro en mi cuello, pude sentir su respiración y temía por mi vida, así que me separé de él bruscamente – tengo que ir al baño – Dije como excusa y subí las escaleras casi corriendo. Entré a mi habitación y me encerré con llave. Me miré al espejo y comencé a inhalar tratando de calmarme, abrí la gaveta de la cómoda y tomé la estaca en mis manos, solo tengo que esperar a que todos vallan a dormir.
No volví a bajar, me quedé en mi habitación hasta la medianoche, me asomé y ya no había nadie en la sala, bajé, pero mis tacones hacían mucho ruido, así que los dejé tirados en los últimos escalones. Seguí mi camino hasta el corredor donde estaba la puerta que daba al sótano, bajé las escaleras de madera y me puse justo en frente del ataúd, ya no estaba atornillado, supongo que Anastasia me ayudó con eso, lo abrí con facilidad y vi el cuerpo de Frank, aunque estaba muerto, se veía muy bien, sujeté la estaca con las dos manos y la alcé mientras miraba al cadáver. 
De repente sentí que alguien haló mi cabello e inclinó mi cuerpo hacia atrás, miré hacia arriba y vi el rostro de Julia muy cerca de mí que todavía me sujetaba – ¿Creíste que podías engañarnos? – dijo con una sonrisa, José tomó la estaca que por la sorpresa dejé caer al suelo, traté de defenderme, pero no tenía la fuerza suficiente, entonces Julia me arrastró por el suelo hasta la sala de estar, ahí estaba Jack y Michael. Ana se paró en la punta de la escalera y cuando nos vio comenzó a llorar, cuando Julia se percató de esto me lanzó hacia José y este me sujetó – no llores pequeña, todo va a estar bien – Dije tratando de calmarla, aunque yo también lloraba - ¡Cállate! – me gritó Julia – ¡No te atrevas a dirigirle la palabra otra vez, mañana tú y tu hermana van a morir y no serán nada para ella! – Dijo y subió para tomar a Ana en sus brazos – enciérrala en su habitación – indicó Julia a José y este hizo lo que le pidió. José me llevaba sujeta por un brazo mientras íbamos por los corredores hacia mi habitación y Michael venía con nosotros
469 Jack va a pagar por lo que les hizo a mis padres y ustedes también – dije con rabia – Una vez intentó matarme y no lo logró, veremos si ahora puede hacerlo – José comenzó a reír – 
470 Querida aquel día solo te dimos un susto, si te quisiéramos matar ya estarías muerta – entonces Melisa salió de su habitación – 
471 ¡Megan! – Melisa vino corriendo hacia nosotros, pero José la golpeó en el rostro y la dejó inconsciente en el suelo, pude sentir como la sangre me hervía – 
472 ¡Maldito! – grité – 
Lo golpeé con todas mis fuerzas, pero no le causaba ningún daño, entonces me tiró adentro de mi habitación, caí sobre mis manos y luego tiró a Melisa a mi lado, seguía desmayada. Corrí hacia la puerta antes de que la cerraran por fuera, pero no llegué a tiempo, entonces comencé a gritar - ¡Por favor déjenme salir, no me dejen aquí! – giré el picaporte, pero estaba trabado, escuché a José decirle a Michael que se quedara vigilando afuera y yo me dejé caer de rodillas, tenía que hacer algo tan sencillo y fracasé, ahora como se supone que mis hermanas y yo escapemos de cuatro vampiros.
Melisa estaba tirada en el suelo, me acerqué a ella y comencé a sacudirla – Melisa despierta – le decía, a los pocos segundos ella abrió los ojos lentamente
473 ¿Megan, qué sucedió? – dijo sentándose – 
474 Pasa algo terrible, si no encontramos una forma de salir de aquí, vamos a morir mañana a las diez de la noche – dije mirando alrededor de la habitación para encontrar una forma de escapar – 
475 Pero necesito saber qué sucede para poder ayudarte – insistió Melisa – 
476 Sucede que José, Julia, Jack y Michael son vampiros – respondí – 
477 ¿Qué? – mi hermana estaba confundida – 
478 Sé que suena descabellado, pero es la realidad, y tienen a otro vampiro dormido, que cuando despierte estará muy hambriento y nosotras seremos su cena y Julia planea volverse la madre de Ana, y eso me inquieta aún más
479 No… no entiendo nada – Melisa tartamudeó – 
480 Tranquila – dije poniendo mis manos en su rostro – Se me acaba de ocurrir una idea, pero tienes que ayudarme – Melisa asintió – 
Ambas tomamos todas las sábanas y colchas que había en mi cuarto y las atamos con nudos. Amarramos un extremo de la soga improvisada a la pata de la cama y la dejamos caer por la ventana, entonces me agarré de ella y comencé a bajar lentamente, miraba hacia abajo y me moría de miedo por la altura, me aferré más fuerte a las sábanas y seguí bajando. De repente la sábana se soltó de la pata de la cama y comencé a caer, pero Melisa la agarró - ¡Apúrate Megan, no puedo aguantar mucho tiempo! – gritó e hice lo que dijo, caí sentada en el suelo y cuando miré hacia la ventana vi a Michael asomado en ella, dio un salto y calló delante de mí, sin decir una palabra me tomó del brazo 
481 ¡Espera Michael, espera! – dije arrodillada en el suelo – Ahora entiendo todo, tu no querías que esto pasara, por eso me provocabas las pesadillas y te comportabas como un idiota, querías que mis hermanas y yo nos marcháramos
482 Lo entendiste demasiado tarde – Dijo – 
483 No es demasiado tarde, solo déjame ir ahora y salvar a mis hermanas, por favor – le supliqué – ya perdí a mis padres y ellas son lo único que me queda, ayúdame por favor – Michael vaciló y soltó mi brazo – 
484 Solo no mates a mi familia
485 Aunque quisiera, no podría – Dije – 
486 Te daré cinco minutos de ventaja, entonces le informaré a mis padres que escapaste
Me levanté del suelo, aunque me dolían los pies descalzos por las rocas y ramas corrí lo más fuerte que pude, me pegué a las paredes de la casa y avanzaba agachada para evitar ser vista por las ventanas, pero en una vi a la pequeña Anastasia parada, la abrí y Anastasia comenzó a caminar por el corredor, entré por la ventana y seguí a Anastasia hasta la oficina de José – Aquí está la estaca – Dijo señalando la gaveta del escritorio, la abrí y la tomé en mis manos, de repente sentí algo detrás de mí y me giré exaltada, había un hombre muy alto, su estatura era alrededor de dos metros, su cabello era cobrizo, venía vestido de negro y llevaba puesta una capucha, me quedé asombrada
487 Él te acompañará a partir de ahora a todas partes – Dijo Anastasia – 
488 ¿Quién es él? – pregunté – 
489 Su nombre es Lucas, es un demonio y ahora está a tu servicio, incluso cuando salgas de aquí – dijo – 
490 Cuando salga de aquí quiero olvidarme de todo esto, no quiero estar ligada a este mundo
491 Querida, solo hay una forma de salir de aquí, y cuando lo hagas estarás más ligada a este mundo de lo que crees, necesitarás su ayuda – Anastasia desapareció y el demonio también – 
Salí sigilosamente de la oficina y escuché a Michael en la sala informándoles a todos de que yo había escapado, entonces me apresuré y llegué a la puerta del sótano, la abrí y bajé con pasos silenciosos, me paré justo en frente del ataúd y lo abrí, adentro estaba Frank, levanté mi mano con la estaca y la clavé en su pecho, la piel del cadáver se tornó gris y reseca. Subí las escaleras y salí otra vez por la ventana, la cerré, caminé por el jardín cerca de las ventanas, dejé que me vieran, después de todo no iba a poder estar demasiado tiempo oculta, Julia salió, se puso detrás de mí y me agarró los brazos – Ya deja de tratar de escapar, nunca vas a salir de aquí – Dijo mientras me llevaba a la sala, ahí estaba José, Jack y Michael parados, Julia me lanzó hacia Michael y este me sujetó los brazos por atrás – Solo faltan unas horas para que Melisa y tú vallan a otro mundo ¿Qué intentabas hacer escapándote, planeabas dejar a tus hermanas? – Dijo Julia y yo contuve mi sonrisa, entonces Michael me llevó a mi habitación otra vez y me encerró.
Melisa vino hacia mí corriendo
492 ¿Lo lograste? – preguntó ansiosa por una respuesta – 
493 Sí, pero no sé si será suficiente, no tengo la seguridad de que nos dejen ir, además todavía tengo que enterrarlo al lado de Anastasia, así ella descansará en paz – respondí – 
494 ¿Qué vamos a hacer? – Preguntó mi hermana y la miré – 
495 No tengo ni idea – respondí –
Las dos miramos a la puerta alarmadas cuando la escuchamos abrirse, era Jack, cerró la puerta y caminó hacia nosotras, puse a Melisa detrás de mí
496 ¿Qué haces aquí? – pregunté – 
497 Megan, no puedo soportarlo más – Se iba acercando cada vez más y nosotras dábamos pasos hacia atrás – 
498 ¿De qué estás hablando?
499 De tu olor, desde el día que llegaste aquí, he podido escuchar tu corazón bombear la sangre de tu cuerpo – Quedé atrapada entre la pared y él, Melisa estaba a mi lado asustada, Jack tomó un mechón de mi cabello y lo olió como si estuviera disfrutando del perfume de una rosa, cerré mis ojos – Ahora puedo escuchar tu corazón latir más rápido, puedo oler tu miedo, sé que no debo hacer esto, se supone que eres para Frank, pero cuando te cortaste ayer con el cuchillo, toda mi fuerza de voluntad se desmoronó
La voz de Jack se notaba excitada y de repente le salieron colmillos enormes, di un fuerte grito, pero él encajó sus dientes en mi cuello, lo golpeé, pero fue inútil, pude escuchar el llanto de Melisa, mi visión comenzó a volverse borrosa, mis manos cerradas que alaban la camisa de Jack comenzaron a debilitarse y mi cuerpo ya no podía quedarse de pie por sí solo.
Vi la imagen borrosa de Michael acercarse a nosotros y haló a Jack haciendo que me soltara y yo caí al suelo, Jack trató de volver a mí como si fuera una bestia, pero Michael lo detuvo y comenzó a empujarlo afuera de la habitación, veía las imágenes en cámara lenta, Melisa se arrodilló delante de mí y supe que me gritaba por los movimientos bruscos de su boca, pero no escuché una sola palabra.