7- Esto es una gran coincidencia de problemas

La noche fue muy larga en el sitio 187 ya que muchos estaban apuntando a la misma puerta y otros estaban nada mas de reserva, los mayores problemas que tuvieron en la noche fue que se acabo el café, mucho sueño por parte de los guardias y no saber donde estaba el subdirector.

Carl se quedo dormido en unas bancas cerca de la celda de contención de SCP-3519 (un lote botella de cristal de refresco de Coca-Cola con sabor a jugo de naranja) pero el se despertó al oír que alguien le hablaba.

-O Carl, gracias al señor que ya estas despierto- Dijo Leonard bastante emocionado

-A hola, ¿qué necesitas?- dijo Carl muy adormilado tratando de despertarse

-Yo nada, pero necesito que te vayas a tu casa a dormir, ya que todos estamos muy cansados y seria muy peligroso entrevistar a la anomalía en este estado ya que podría escapar en cualquier momento- contesto Leonard un poco apresurado

Carl al inicio no entendió mucho ya que estaba bastante adormilado y no muy activo, hasta que por fin pudo medio comprender la situación.

-A, muchas gracias, yo pensaba que iba a morir- dijo Carl muy contento mientras se levanto de las bancas y con una sonrisa en su rostro cubierto por el cubre bocas y sus gafas

-No tan rápido Carl, este es tu día libre pero mañana a las 6 te necesitamos en el sitio para entrevistar a la hija de satanás, no lo olvides- exclamo Leonard antes de que Carl fuera a su casa a descansar mas tranquilo.

Carl no lo escucho muy bien por los ronquidos de otros guardias que estaban dormidos mientras los otros vigilaban la celda de contención mas importante en ese momento, pero la celda de la segunda "SCP-953" pero nadie le daba atención a esto, quizás por el otro asunto "mas importante".

Carl paso por varios lugares del sitio 187 antes de irse del lugar, varios guardias se retiraron para descansar y/o hacer sus tareas regulares, Carl solo continuo con su recorrido despidiéndose de algunos compañeros.

Carl llego al estacionamiento tomando su auto y proceder con lo regular de su vida.

-Hey, mañana temprano nos vemos amigo- Dijo bastante amigable Thomas mientras abría el portón para dejar salir a Carl

-¿Cómo?- pregunto Carl confundido

-Pues, te toca mañana ir mañana muy temprano para entrevistar a la SCP esta- dijo Thomas mas confundido que Carl

-Blyat- dijo Carl ya mas angustiado

-Bueno, que descanses Carl- se despidió Thomas amable y confundido por el "Blyat" ya que jamás lo había escuchado hasta ayer y prefirió solo dejarlo asi

Carl trato de conducir lo mejor posible su auto casi chatarra todavía con sueño pero ya mas "relajado", en vez de ir a su casa el decidió ir a una cafetería que lleva abierta desde 1894 que el conocía desde que llego a esta ciudad o pueblo.

Carl se estaciono muy cerca de ahí y se percató de que habían varios policías recorriendo las calles y entrevistando a la gente que encontraran incluso uno se acerco al auto de Carl por lo que este se quito su casco, lentes y pasamontañas al igual que su pechera en tiempo record dejando ver su cabello café y desacomodado al igual que una piel casi pálida.

Uno de los policías cercanos toco la ventana tres veces -Señor nos permite un momento por favor- dijo el policía con una voz estruendosa mientras Carl echaba esa parte de su uniforme en los asientos traseros.

-¿Que necesita oficial?- pregunto Carl mientras bajaba el cristal del auto

-Muy buenos días- respondió el oficial -Resulta que ayer un grupo armado vestidos con, armaduras negras, cascos, visores o unos lentes negros, armas Thompson y unos trajes blancos como el que... espere un segundo- agrego el policía con sospechas

Carl se volteo a ver y se dio cuenta de que aún tenían su traje blanco por lo que el estaba muy angustiado.

-No importa, solo me distraje, el punto es que estos sujetos estaban buscando algo en la noche o trataban de atacar a alguien, tal vez hasta son alemanes... por lo menos sabemos de la existencia de como 43 de esas personas y estamos muy preocupados ya que ahorita estamos lidiando con "Los olvidados de Berlín" y no queremos tener muchos mas problemas con mafias de los que ya tenemos, asi que si tiene información sobre ellos informe de inmediato a nosotros- Dijo muy tranquilo el policía

-Okey, muchas gracias oficial- respondió Carl con una sonrisa un poco incomoda

Terminando ese extraño momento Carl tomo una tasa de su café favorito y una dona, no es que sea le guste mucho la comida dulce pero si es capaz de comer lo que sea cuando tiene hambre, tras eso solo fue a su casa a descansar y hacer sus tallados de madera, ya sea de tanques o de chozas de la URSS lo cual le recordaba a su antiguo hogar aunque claro que se equivocó en varias ocasiones y hasta se corto un poco la mano pero no paso a mayores.

-Que horrible- Expreso Carl a si mismo al ver la cocina con muchos trastes sucios y algunas cucarachas

-Como pude ser tan inútil, se que me voy a las 7 de la mañana y regreso a las 10:30 con un salario ridículo pero justo y aun asi no puedo mantener esta casa limpia- siguió diciéndose a si mismo (Le suele pasar a Carl cuando tiene un mayor problema en su vida o esta enojado)

La limpieza de la cocina fue tardada pero porque Carl trataba de evadir a diestra o siniestra el pensamiento de huir de la ciudad aunque en algún momento del día considero muy seriamente la opción pero sabia que le ira mucho peor si se escapa a si se queda.

Paso unas horas, ya eran las 3 de la tarde y Carl fue a ver a un amigo a su casa para distraerse, un periodista apasionado por su vocación, este era un periodista de espectáculos y vivía lo suficientemente cerca de la casa de como para que se conocieran lo suficiente, su nombre: Walter K. Storm.

Carl y el platicaron bastante bien en la pequeña pero cómoda casa de Walter, pasaron un agradable rato platicando sobre el trabajo del señor Storm, en su mayoría buenos reportajes de el, hasta un determinado momento.