Capitulo 22 – Su vida sin mi.

Pensaba que seria fácil. Pensé que seria mas fácil sacarla de mis pensamientos, sacarla de mi vida, sacarla de mi corazón. Pero no lo es, sigue siendo difícil, aun lo es. Aun duele, aun me duele pensar que esta con alguien mas, pensar que ya no me quiero en su vida, pensar que debo sacarla de la mía. Aunque no quiera ella lo decidió y ahora debo alejarme aunque sea lo ultimo que quiero hacer.

– Diria que eres el mas grande de los idiotas, pero ese soy yo – Suspiro – Eres solo un jodido idiota Collins – Hablo mirándome serio. Hablábamos por video llamada. Le conte que decidi resignarme y aceptar la decisión de Emma. El me reprocha haberla dejado creyendo en mentiras. Ya no puedo hacer mas, no puedo seguir con esto no voy a ningún lado. Ella piensa que su chico dice la verdad, como dije tendrá sus razones no puedo obligarla a que me crea.

– Ya tome mi decisión Tomás, no voy a presionarla mas – Suspire y me tire en la cama – Ella hará su vida sin mi, y yo debo aceptarlo. Debo aceptar que debo vivir sin ella, por mas que duela– Suspire y cubrí mi rostro. El me miro en desacuerdo negando con la cabeza

– Ya deja el pesimismo hombre – Se quejo – Ni que no la vayas a volver a ver – Ríe. Este idiota –Aun tienes oportunidad pequeño Collins, A veces las mejores palabras son las que no se dicen aun, No se ira a ningún lado, tienes tiempo y dos opciones o seguir con tu idiotez de darte por vencido – Me imito – O jugártela una ultima vez. Uno nunca sabe lo que sucederá – Se encogió de hombros. Este tipo a veces me sorprende con lo que dice.

– No lo se Tom, prefiero que las cosas sucedan como tengan que suceder. Ya no quiero presionarla, ella lo decidió así. No puedo hacerla cambiar de opinión – Suspire– Es mejor que espere, como dicen el tiempo puede con todo y como ya dijiste tengo mucho tiempo – Mi mejor amigo me miro desanimado para luego sonreír un poco.

– Sabes eres un idiota pero te respeto – Asintió – Pocos respetan las decisiones de las chicas y eso esta mal – Se encogió de hombros – Pero sabes que si quisiera podría hacerte cambiar de opinión – Ríe yo asentí burlo – ¿Lo sabes no? – Y ambos estallamos en risas. El sabe subirme el animo cuando lo necesito.

– ¿Vendrás a mi graduación idiota? – Cambie el tema mientras dejaba de reír – Que no estará muy interesante que digamos, pero mi madre quiere que vengas – Me encogí de hombros – Quiere ver a su pequeño después de tantos años.

– No lo se, quien sabe y me aparezco por allá – Se sentó en un sillón – Adoro a tu madre, cocina de maravilla – Sonrió. Cuando eramos niños, mi madre siempre cocinaba para el, lo considera un hijo mas – Igual sabes que tengo que llevar unas cosas de la Abuela Eli, seguro y voy. Pero debo decirte que no me gustan mucho las graduaciones; son largas y aburridas algunas veces – Rodeo los ojos – Bueno así fue cuando me gradué.

– Deja de quejarte hombre – Lo imite – Tampoco es necesario que estés en la ceremonia. Oh y recuerda que debes comprarme algo de comer cuando vengas.

– Rodeo los ojos – No tienes suficiente con mi presencia – Negué burlón – Me siento ofendido hermano – Toco su pecho dramático – Seguro te llevare algo para que dejes de molestarme tragón – Se quejo.

Estuvimos otro rato hablando y diciendo tonterías como es ya costumbre cuando hablo con Tomás. Termine despidiéndome quería dormir, apenas llegue de la preparatoria me di cuenta que Tom me llamaba.

Cuando desperté me di cuenta que tenia varios mensajes y llamadas perdidas. No preste mucha atención, seguro seria Tomás de nuevo. Me di una ducha y baje a cenar, mi madre estaba trabajando como siempre. Prepare algo rápido para mi y deja servido para ella.

Cuando subí aun seguían llegando mensajes. Mire de reojo un poco y pude solo uno de las sientas de notificaciones.

Emily:

¡Responde los benditos mensajes!

Emily y su manía de preocuparme con tonterías. La ultima vez que exploto mi bandeja de mensajes, fue antes de que ocurriera todo. Me envió un montón de mensajes solo para que la ayudara con un proyecto. Y antes de eso fue porque no encontró una sudadera y me tuvo como esclavo una tarde buscando una sudadera que había dejado en la casa de su padre. Pero como yo soy un buen hermano mayor siempre estoy a su disposición, o mejor dicho siempre he sido su esclavo. Pero como no querer a esa pequeña obstinada. Desde que la conocí al igual que Emma, se volvió parte de mi vida y supo ganarse mi cariño rápidamente con su ternura, cosa que utilizo mas adelante para manipularme, es una pequeña lista y manipuladora cuando lo quiere. Pero la quiera como una hermana menor.