Invitación.

El cielo estaba oscuro, el viento seguía resoplando, las ramas crujían como si de un hueso rompiéndose se tratara. Para cualquier persona solo sería una noche normal y corriente, menos para Max y Oliver que iban colina abajo alejándose de aquella cabaña. No se hablaron en todo el camino hasta que llegaron al pueblo. A Max se le ocurrió algo repentinamente.

—Oye, ¿tienes alguna foto de tu hermana?—dijo algo tembloroso.

—Eh, si, pero…

—¿Puedo verla?—se apresuró a decir Max.

Oliver buscó un buen rato en su billetera, sacó varios papeles y algunas fotos de lo que Max pensó era su familia, hasta que encontró la que buscaba.

—Mírala, ella es—le pasó la fotografía a Max.

Linda cara, bien peinada, una imagen pulcra para lo que Max vio en al parque, pero era la misma chica.

—¿Para qué querías verla?—preguntó Oliver algo inquieto.

—Solo quería despejar una duda, gracias por mostrarme la foto—al decir esto Max se dio la vuelta y caminó para irse.

—Oye—gritó Oliver y Max volteó rápidamente—¿la has visto, parásito?

Max se dispuso a decir algo, pero no pronunció ninguna palabra. Estuvo observando el rostro de Oliver por varios segundos o eso creía él. En el rostro de Max creció una gran sonrisa. Se dio la vuelta y se fue, dejando así a Oliver y a su hermana detrás.

Camino a casa se encontró con Claire, una de sus compañeras de clase, cabello castaño, ojos oscuros, piel blanca pero no demasiado y una sonrisa que le gustaba a todos. Max pensó en ir a saludar, pero ya era demasiado tarde, sus padres debían estar preocupados.

Ella, al no ver intenciones de ser saludada, caminó hacía él y lo saludó.

—Hola, Max. ¿Por qué tan solo? Acaso vienes de…

—No, no estaba con una chica, ¿por qué siempre piensas eso?—dijo indiferente.

—No siempre, eh. Solo cuando no estás con Nate o… ¿como se llama el otro?—Claire conocía también a James, pero habían tenido una pelea estúpida hace tiempo y no se hablan desde entonces—Bueno, como sea. Mañana será el cumpleaños de mi hermanita y mi Mamá ha alquilado todo el parque CLIFFTON para celebrar, así que si lo deseas, puedes asistir. Ah, también pueden ir los otros dos.

—Creo que aún sin invitación ellos irían—Max rió—intentaré asistir, Claire. Ahora tengo prisa, voy tarde a casa.

—Esta bien, no olvides el regalo—dijo mientras esbozaba una sonrisa.

Ambos se despidieron y Max camino rápidamente hacia su casa. Al llegar, su padre estaba viendo Tv, pero Carol estaba sentada justo al frente esperándolo.

—¿Donde estabas?—Preguntó con firmeza.

—Fui a la cabaña de James, Mamá—Max soltó un gran suspiro—olvidé unos cuadernos y pasé a buscarlos, es todo.

—Nate ha venido hace diez minutos, quería hablarte sobre algo. No me ha dicho qué.

—Seguro es una tontería, hablaré con él mañana—dijo mientras caminaba hacia su habitación.

—¿Por qué la ventana de tu habitación esta rota, eh?—Carol no sonaba molesta, pero tampoco muy tranquila.

—¿Hasta hoy lo notan? Eso fue hace unos días—Max miró a su padre y luego a su Madre—y la verdad me sorprende que no hayan escuchado nada de lo que pasó—Tras decir esto, Max caminó hasta entrar en su habitación.

Unos veinte minutos después salió a prepararse un Sándwich, Mark estaba viendo una película ochentera y Carol leía una revista de remodelación.

—¿Donde esta Christina?—Preguntó Max.

—Ha ido a quedarse unos días en la ciudad con una amiga—dijo Mark sin voltear a ver a Max.

—Últimamente no se queda mucho aquí—dijo Max soltando una mueca.

Cuando terminó de preparar su cena, caminó hacia el sillón donde se encontraba su padre. Pensó que no había pasado un rato ‘normal’ desde hace mucho tiempo. Se sentó y se dispuso a ver la película.

—¿Crees que ella este bien, Maximilian?—dijo una voz proveniente desde su derecha—No deberías estar tan relajado—sonaba ronco y muy amenazante.

Max miró hacia su derecha y vio al mismo hombre que había observado anteriormente. Esta vez solo pudo ver su maliciosa sonrisa a través del cristal.

—Nadie esta a salvo, Maximilian.