Superviviente Z

DÍA 2.

DIA 2

 

Mi alarma suena indicándome que ya empezó un nuevo día, el cual pienso disfrutar al máximo.

Luego de tener una relajante sesión de hidromasajes en mi bañera decido que ya es tiempo de salir a explorar. Hecho un vistazo al itinerario repasando lo que hare en el día de hoy.

Hoy es día de ir al Marienplatz, la emoción que siento es inmensa. Antes de irme del hotel tomo un maravilloso desayuno que consiste en huevos estrellados, tocineta, pan integral y un delicioso y espumoso cappuccino.

Llamo a un taxista y le indico el nombre del lugar al que quiero ir, de repente la el recuerdo de las horribles imágenes de las muertes de los niños azota mi cabeza, pobre madre, debe estar destrozada. No sé porque no puede dejar de pensar en ello. Tanto así que me regaño mentalmente y me obligo a dejar de darle vueltas al asunto.

Llego a la hermosa plaza, la sensación de plenitud que me arropa en estos momentos es cautivadora y avasallante. Se por lo que leí que este lugar es uno de los más concurridos por los turistas y  ¡vaya que ya sé porque! ¡Es un lugar precioso! Veo a un grupo de mujeres hermosas vestidas con trajes vaporosos que me doy cuenta son los vestidos bávaros típicos. ¡Me gusta!

Mientras camino, siento la adrenalina de saberme libre por primera vez en mi vida, respiro el aire con los ojos acuosos. Lo logre, aquí estoy.

Decido tomarme mi tiempo para ver con curiosidad todo lo que allí se encuentra, no pierdo tiempo y decido entras a probarme unas cuantas piezas de ropa en unas tiendas llamadas Only y en Tezenis.

Recuerdo aquella publicación de Facebook que compartió mi amiga Carla sobre la cerveza alemana.

Sé que la mejor cerveza es la de Alemania por lo tanto decido comprarme un vasito para ver que tal su sabor, cuando estoy en el restaurant me atiende una hermosa rubia que por mi buena suerte habla inglés.

Entro a un establecimiento que a simple vista me parece hernoso, cuenta con 3 plantas y el diseño es realmente cálido y acogedor a pesar de sus grandes dimensiones.

—Hola señorita, mi nombre es Katrina. Bienvenida al  Hofbrauhaus am Platz. Lugar con la mejor cerveza artesanal del mundo entero, ¿en qué puedo servirte? —Me pregunta con un raro pero entendible acento.

— ¡Hola!  —Respondo con una evidente emoción que hace sonreír a la chica. —Quiero probar la cerveza de su restaurant, por ahí leí que es una de las mejores

—Es cierto, tenemos la mejor y no lo digo por trabajar en este lugar. Te explico, tenemos diferentes tipos de cervezas. Esta la Munich Helles o cerveza clara, tenemos la Munich Dunkel o cerveza oscura, estas que te mencione son las más comunes. Pero también tenemos la Pilsner, Weussbier, Altbier y la riquísima Schwarzbier que también es una especie de cerveza oscura. ¿Cuál te apetece probar?

—Oh, vaya. Son muchas y sinceramente no se cual elegir, ¿cuál me recomiendas? —le digo soltando una risilla

—No te preocupes, por ser la primera vez y por permitirnos ser tu primera opción te traeré una bandeja con los diferentes tipos de cervezas para que puedas catar y decidir cuál te gusta más  —me dice la chica sonriente—.

— ¡Maravilloso! Aunque temo salir borracha de aquí —le digo a Katrina y ella solo hace un gesto con la mano—. Enseguida traigo sus cervezas señorita y no se preocupe, tenemos servicio de taxi.

Cuando se está alejando recuerdo que beber y comer puede ayudar a disminuir la velocidad para embriagarse, sin perder tiempo le grito;

— ¡HEY! Olvide pedir mi comida. ¿Qué de bueno puedes ofrecerme?

—Definitivamente no te puedes ir de este lugar sin probar nuestro delicioso Schweinshaxe —enseguida miro a la chica ¿shuaque? Ella parece entenderlo y entre risas me explica que es codillo asado, acompañado de puré de patatas y chucrut.

—Oh que bien suena. Definitivamente quiero el shuanshocso. —Ella se va riéndose de mi pronunciación —carajos, no serviste de nada librito, pienso.

Luego de tener la panza llena de cerveza y comida me despido de mi amiga la mesera que no me había dado cuenta que tenía una gemela. Joder, estoy ebria, muy ebria, tanto así que veo doble.

Estando en el hotel decido darme una ducha para tratar de devolverle la lucidez a mi mente.

Sintiéndome algo mejor me tiro en la gran y acolchada cama mientras reviso mis redes sociales. Hay bastante movimiento en ella, no entiendo porque tanto alboroto

Miro un reportaje del mismo canal que transmitió la noticia del terrible asesinato de los niños. Leo el titular:

¿APOCALIPSIS ZOMBIE?

Luego de reportar el terrible accidente ocurrido en la localidad de Vladivostok Rusia, nuestro camarógrafo noto algo raro en el cadáver del niño más pequeño. En las siguientes imágenes notamos como el pequeño cuerpo ya en condición de descomposición se mueve, dejando así atónito a nuestro camarógrafo. En una entrevista que pudimos tomarle le preguntamos su experiencia la cual califica como aterradora y terriblemente asquerosa, es evide….




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