Sombras de Fuego

Miro hacia el cielo deseando poder encontrarla…
La lluvia que ahora pinta de cristales las montañas tristes del reino de las sombras, me recuerda su rostro presente en los milenios de soledad, que el destino sello en nuestras vidas. Sentir su calor, sus labios, su abrazo delicado y a la misma vez fuerte es lo único que mi tenue y despiadado corazón de guerrero desea. Su dulce aroma impregnado en mis huesos, desgarra lo profundo de mis entrañas deseando que esta vez todo sea diferente.

Quisiera salvarte, así como tú te sacrificáste por mí. El frio no era gentil con nuestros cuerpos, pero tus hermosos ojos ámbar seguían mirándome como el primer día en que nuestras vidas se juntaron. El tiempo se detuvo completamente permitiéndome entender que mi única misión en esta vida era encontrarte...