Capitulo-2... Deseo de cumpleaños.
Mi piel era como impermeable al agua, estaba demasiado espantada y solté un pequeño chillido, salí de la ducha y me envolví en una toalla. De repente sonó la puerta.
- quien es- pregunte extrañada
- Emily mi amor baja a cenar- me dijo mi padre a través de la puerta. Le abrí y lo deje pasar.
- no papi no quiero, además mamá sigue muy enfadada- musite con cara de perrito.
- o vamos amor sabes cómo es tu madre, además este día no termina aun, es tu cumpleaños y te tengo una sorpresa-
- ENSERIO!! DIME QUE ES PAPÁ, DIME!!!- gritaba y saltaba en la cama.
- baja y lo veras- dijo papá con una gran sonrisa y salió cerrando la puerta.
Corrí al armario y me puse un vestido azul y unas zapatillas y me sujete el cabello en una pequeña cola a un lado y corrí hacia la sala, al llegar había un enorme pastel en la mesa y unos cuantos regalos, todos estaban de pie esperando a que bajara. Mientras me cantaban el cumpleaños yo tenía una sonrisa de oreja a oreja. Me dijeron que pidiera un deseo, cerré mis ojos y hable tan bajito que nadie escucho.- deseo que mi vida nunca cambie y siempre tenga a mi familia- sople las velas rodeada de aplausos. En el momento que comíamos recordé lo sucedido en el baño, me prometí no contárselo a nadie, estaba segura que sería algo pasajero, que se me quitaría al día siguiente, y así paso.
Ya que estábamos de vacaciones, disfrutamos unos cuantos días más, pero mi padre recibió una pésima noticia, ya que el plazo de la hipoteca de nuestra casa había vencido, y por esto había sido también despedido. Así que los abuelos nos ofrecieron su casa por un tiempo. Mis padres viajaron a chicago por nuestras pertenencias y mi hermano y yo nos quedamos con nuestros abuelos.
Mi hermano y yo estábamos muy aburridos, así que Jeremy me invito a jugar en el lago. Yo accedí, tenía algo de miedo por lo que me había pasado allí, pero de igual forma jugué con él. Nos divertimos bastante, pero llego un momento en el que mi hermano me arrojo agua, y eso me molesto bastante, el me miro con cara de chiste y se echó a correr, yo corrí tras él, pero antes recargue mis manos con agua y se la arroje, y para mi sorpresa no solo le arroje el agua de mis manos; el agua del lago hizo una enorme ola, empapando por completo a mi hermano, ambos nos asustamos muchísimo y el salió corriendo hacia la casa, yo hice lo mismo. Al entrar nos quedamos pasmados en la sala, la abuela estaba llorando, y el abuelo estaba arrojado en el suelo. Jeremy y yo acudimos inmediatamente para tratar de ayudar en algo. Luego de un rato llego la ambulancia y mi abuela se fue con él, le dijo a Jeremy que cuidara de mí y que no saliéramos de la casa.
Jeremy me abrazo y yo comencé a llorar, nos sentamos en el sofá, más tranquilos, le pedí que no le contara a nadie lo que paso en el lago, y también le conté lo que me sucedió el otro día. Quedo impactado, solo me miraba y abría y cerraba la boca para tratar de decir algo, pero solo se limitó a asegurar con la cabeza.
En un completo silencio, mi hermano encendió la televisión y comenzamos a ver caricaturas, me acomode bien en el sillón y me quede dormida. Me desperté gracias al sonido proveniente del teléfono, mi hermano contesto, eran mis padres estaban muy angustiados; dijeron que llegaban en la mañana, mire el reloj y apenas eran las 2:00 de la mañana, así que subí a mi habitación y me tire en la cama a dormir.
– Vamos cariño levántate, ya amaneció, es un nuevo día- dijo mi padre. Me acomode y me senté para abrazarlo.
-Ve a ducharte y luego baja- comento papá.
Hice un leve movimiento con la cabeza y mi padre salió de la habitación cerrando la puerta tras él. Era extraño, pues mi padre lucia muy preocupado, triste y se notaba que no había dormido nada, además había llorado.
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Editado: 19.09.2018