Capítulo 7

– ¿Cómo se encuentra doctor? –Steven mira al doctor –La señora está bien, solo es un resfriado –Me muevo en la cama y trato de levantarme –Estoy bien, solo es un resfriado, no lo digo yo, lo dice el doctor

–Bueno señora, usted es doctora así que también cuenta su opinión –Le sonrió al doctor y este se sonroja

–Bueno doctor gracias por venir –Steven comienza a moverlo hacia la puerta y sin dejar que me deje las indicaciones

– ¿Por qué no fuiste por mi cuando Salí? –Pregunto mirando a Steven fijamente –Ya iba pero Héctor dijo que sabía lo que se sentía, que lo dejara ir, sabía que era cierto puesto que el casi sufrió lo de tu paciente

–Está bien, ¿Podrías ir a una farmacia a comprar los medicamentos que te pondré?

– ¿Y cómo sabrías cuales medicinas necesitas? –Lo miro enarcando una ceja –Steven por Dios soy doctora, se lo que tengo

–Está bien, entonces dile a uno de los chicos que me manden los medicamentos que debo comprar, descansa –Asiento y sale

Me levanto como puedo y salgo de la habitación, escucho ruido en la sala de abajo y decido no ir, voy a donde está la terraza gracias a Dios no hay nadie, me siento donde anteriormente estaba y enciendo mi ordenador

–No deberías estar aquí, tienes que descansar –Ignoro la voz y checo mis correos –Me alegra que ya te mires mejor ¿Puedo? –Asiento y Héctor se sienta a mi lado

Querida doctora Williams

Solo para informarle que los familiares del pacientes ya se encuentran en su casa, están más que agradecidos, también a los padres ya se les comento sobre la eutanasia y dijeron que lo que dijera su hijo

Hace unas horas despertamos al paciente y le suministramos la solución así como también le platique sobre lo que hablamos y después de pensar tanto el tema dijo que si usted estaba dispuesta ayudarlo que descartaría esa idea pero que solamente usted podría ayudarlo ya que el estaba enterado sobre el paciente al que se le suministro el medicamento por primera vez, es decir, a el señor Montañez

Espero que se encuentre bien y estaré mandándole informes sobre el estado y salud, en cuanto miremos que el paciente este mucho mejor le llamare para ver eso de los tratamientos

Adrien

Suspiro aliviada después de ver el mensaje, Héctor me abraza y sonreímos los dos –Vez te dije que no sería una solución –Me limpio una lagrima y este lo nota

–No llores bonita –Me limpia otra lagrima y niego –Estoy llorando de felicidad, no sabes cuan aliviada estoy, solo a esperar que sea tiempo suficiente como para comenzar con las terapias, necesito también conseguir las prótesis para sus piernas –Héctor asiente y toma su celular

– ¿Mamá? ¿Qué haces afuera? –Miro a Liam y a Adam y les sonrió –El paciente acepto mi ayuda, tendré que viajar a Francia, París para ser exacta pero no importa –Digo y Liam se acerca a mí –Que bueno ma, me alegra muchísimo ¿Pero cuando viajarías? –Alzo los hombros

–No lo sé, primero la solución que le aplicaron para las quemaduras tiene que responder, hacer que la piel nazca y sea fuerte, después tendría que conseguir dos prótesis y llegarlas

–Por las prótesis no te preocupes, yo las mandaría cuando tú digas –Héctor me mira y le sonrió –Gracias, no era necesario pero muchas gracias

–Entonces ¿Se puede decir que pueden pasar años para que comiencen con las terapias? –Pregunta Adam y Héctor niega

–Se puede regenerar la piel en meses –Y ahora yo niego –No, en realidad puede tardar años, tu caso Héctor fue muy distinto al del hombre que está en la clínica, los medicamentos que se le están suministrando para las mutilaciones impiden que la solución sea rápida, a ti solo te cerré y te administre medicamentos muy compatibles con la solución por eso tu regeneración de piel fue más rápida

– ¿Tu regeneración? ¿Usted también sufrió algo parecido? –Pregunta Liam y Héctor asiente – ¿Les parece si traen el sofá para acá y les cuento? –Ellos asienten y lo hacen

– ¿Se los contaras? –Sonríe –Si, ¿Por qué no?

–Bueno viajaba a Canadá, allá yo había empezado con mi sede, allá fue donde comencé con mi empresa así que iba volver abrirla, es decir, iba a trasladarla de nuevo, cuando más o menos íbamos casi saliendo…

– ¿Papá? ¿Qué cuentas? –Ann llega hasta donde estábamos y Héctor le hace seña para que tome asiento por lo que ella hizo caso –Hija ¿Recuerdas lo que paso aquí en la mañana? –Ella asiente –Pues a mí me sucedió algo parecido y es lo que estoy contando –Ella asiente y pone atención

–Bueno, como iba diciendo cuando íbamos saliendo de Francia el avión tuvo un problema lo que hizo que aterrizara de emergencia, pero lo que no contábamos es que el avión nunca debió despegar, le estaban dando mantenimiento y uno de los que autorizan que aviones despegaran era nuevo y se le paso, el caso es que íbamos saliendo de Francia y el avión presento problemas, tuvieron que tratar de aterrizar sin complicaciones pero no se pudo, lo siguiente que recordé cuando nos dijeron que nos pusiéramos el cinturón de seguridad y las máscaras fue que una de las paredes, un lado se despegó asiendo que uno de los fierros atravesó mi costado izquierdo de ahí ya no recordé nada ya que me había desmayado todo se volvió obscuro