Capítulo 9

Lauren se sentía completamente estúpida al hacer aquella acción, era más que claro que no iba a ser correspondía; se trató de alejar de la chica, pero nuevamente la sorprendió tomando su rostro entre sus manos y acercándola a ella dejando un beso en su mejilla, se acercó aún más susurrándole en el oído una simple frase.

—Piensa bien antes de actuar, no sabes si te arrepentirás después— dijo mientras acariciaba su rostro, lentamente se alejaba aun manteniendo el contacto de sus mejillas.

Nuevamente ella tenía razón, ¿qué estaba haciendo? En realidad iba a besar nuevamente a otra chica diferente, ¿estaba ella dispuesta a probar de aquella manzana prohibida? Era un gran riesgo que tenía miedo de correr, siempre había tomado las opciones seguras, nunca había tomado una decisión por instinto, eso conllevaría a los errores y según sus padres "el que se deja llevar por una tentación, es porque quiere fracasar en la vida", ella no estaba dispuesta a fracasar. La miro a los ojos, aun tenia ciertas dudas pero decidió poner fin a aquello sabía que no estaría dispuesta -ni aguataría- algo más, así que solo se alejó de ella de manera lenta y con cuidado; la otra chica solo sonrió de medio lado asintiendo levemente.

Le tendió la pastilla junto con una vaso de agua -lo cual acepto gustosamente-, seguido de eso le explico con sumo detalle lo que tenía planeado para el proyecto; sus planes eran extremadamente detallados, como no ella tenía la mejor experiencia en ese campo, no le sorprendió que sacara un arma con unos clavos y una manguera o un simple globo lleno de cloro con otro material de limpieza. Realmente era brillante y la oji-verde no tardo en estar de acuerdo con la mayoría de sus ideas, termino haciendo la parte escrita mientras su compañera hacía los planos utilizados; no tardaron ni una hora en terminar la parte escrita, ya eran las cuatro y treinta de la tarde cuando recibió el mensaje de su mejor amiga indicando que ya estaba lista, solamente tomo sus cosas mirando a su compañera «y ahora como me despido — pensó mientras la veía —, no somos amigas, pero tampoco somos totalmente desconocidas». Observo como Dan se acercaba a ella y con una ligera sonrisa dijo:

—Bien Jáuregui, como siempre: fue un dolor de culo trabajar contigo — dijo mientras le guiñaba el ojo y sonreía de manera juguetona, haciendo que la oji-verde al igual que ella sonriera—. Te acompaño, no vaya a ser que su majestad se pierda— dijo ganando un leve empujón de Lauren, seguido busco los lentes de sol.

—Tú sí que eres un dolor de culo— respondía mientras sonreía ampliamente.

Ambas chicas salieron del departamento encaminándose hacía la salida del edificio, con paso no tan lentos pero tampoco apresurados fueron recorriendo el camino en medio de bromas y ligeros empujones que hacían reír a ambas, sin querer aquella situación se estaba volviendo más cómoda, la estaba disfrutando más de la cuenta hasta tal punto que cuando llegaron hacia su mejor amiga se sintió un tanto decepcionada de terminar tan rápido.

—Muy bien Kordei te la dejo como me la dejaste, sana y salva— dijo con un tono de burla que hizo que la chica de tez morena riera y la oji-verde se sonrojara levemente—. Espero que el idiota de mi mejor amigo no te haya causado muchos problemas.

—No hubo problemas con él, al contrario fue muy hospitalario— dijo la morena sonriendo de manera sincera, Lauren de inmediato sospecho algo—. Se ofreció a llevarme a la salida pero decline la oferta se veía preocupado por algo, deberías ver que es.

—Gracias por avisar— dijo sonriendo pero la oji-verde noto la preocupación en su rostro—. Jáuregui cuídate, igual tú Kordei— dijo mientras se alejaba de ellas.

—Okay ¿desde cuándo tú y miss simpatía son tan cercanas? — Pregunto la morena mientras levantaba una ceja.

Lauren solo negó con una pequeña sonrisa y se dirigió a su auto, aunque su mejor amiga le insistiera no le contaría la experiencia ni mucho menos lo ocurrido en el departamento de Dan Lee, intuyo también que Normani también ocultaba algo debido al trato que tuvo con su compañera. Para no entrar mucho en detalles digamos que ambas chicas tenían sus cosas y no estaban dispuestas a decir nada.

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El resto del fin de semana paso más rápido de lo que hubiese deseado la oji-verde, ya que estuvo repleta de diversión con el resto de sus amigas -incluyendo a Ally-, digamos que al fin pudieron hacer la pijamada que tanto querían, terminado con Lauren repleta de miel, Ally llena de crema y Camila totalmente rayada con marcador, al parecer el equipo Norminah estuvo muy ocupado por la noche; aunque recibieron su castigo por parte de las tres chicas lanzándolas a la piscina a primera hora de la mañana. Dicen que ojo por ojo ¿cierto?

Nuevamente era lunes por la mañana y Lauren no estaba muy segura de querer ir nuevamente aquel sitio, no por que estuviese cansada de ver clases, sino más bien por ver nuevamente a cierta chica de atípicos ojos, ella había meditado casi todo el fin de semana lo ocurrido y no sabía muy bien cómo iba a enfrentar nuevamente a la chica que ahora era su compañera de trabajo; sabía que ahora su trato iba a ser diferente, pero eso no significaba que iban a tratarse como si fueran las mejores amigas, tal vez solo se tolerarían un poco más la presencia de la otra.

Cuando ya era la hora Lauren se dirigió al instituto con su auto, claro no sin antes pasar buscando a Camila -ya que se lo había prometido-, así que no tardó mucho en llegar a la casa de su mejor amiga tocando la bocina para que se notara su presencia, noto como la morena abría la puerta no sin antes gritarle a alguien para después cerrarla con fuerza. Ella conocía muy bien a sus amigas, además que era buena en detallar el lenguaje corporal, así que se le hizo extraño la actitud que había tomado Camila, era muy pocas las veces que ella gritaba y si lo hacía era porque realmente ya estaba fuera de sus casillas.