P R Ó L O G O

Durante años he cargado con este dolor mental, la sensación de no llevar una vida propia, interiorizar, vidas, secretos. ¡Soy un metiche! Nunca estoy tranquilo, incluso si lo intento. Estos años han sido un tormento, nunca puedo hablar con nadie; ¡Nadie!

Estoy harto y necesito un desahogo, las letras me ayudarán, tengo esperanza de ello. Aún no considero la muerte como una opción; no mentire, en aquellos momentos de mi pasado, me he encontrado a mí mismo en un profundo dolor, desesperación, con pensamientos autodestructivos, simplemente suicidas. Sé que no soy el único, todos cargamos con el sufrimiento de vivir, esta existencia es cruel, despiadada, en el fondo, contemplamos la opción de acabar con todo de una vez; sin embargo, somos tan sentimentales. Recordamos a nuestros seres queridos, los amigos de la infancia, los objetos de valor, el amor, y por supuesto, nos pesa saber que aún no cumplimos ese sueño por el que nos desvelábamos de niños. Y claro, las respuestas a esas preguntas imprudentes, la necesidad de buscar o tener más... Más y más. Somos irremediables. Yo me siento de este modo, no puedo cambiarlo. He sufrido, si. No puedo crearme un drama, hace parte de mi naturaleza, quiero intentar contar, a mí manera, las cosas que he tenido que ver, los secretos que me revelaron, las situaciones por las que pase. Sólo escribiré, contaré, como se me apetezca. Además, lo que más me mantiene con vida, es esta extraña necesidad de saber quién soy. ¿Será tal vez, que alguien ya ha visto dentro de mi? Probablemente, no. Aquí, mostraré mi interior.

Estos son mis relatos, pero más que eso, vidas y tormentas, de gente como tú y como yo.