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Pov. Reina…

-Creo que he sido algo fuerte con mi hija- digo organizando mi vestido, Ji-Woo que se encuentra a mi lado niega con la cabeza -no es así madre, ella algunas veces actúa sin pensar ¿recuerdas lo que pasó hace años?- lanzo un suspiro, aún pienso en que sí fui algo dura con ella, lo mejor será disculparme por cómo le hablé, ella no es así, ha de haber algún motivo, la última vez que se comportó así fue cuando Ji-Woo se vino a vivir con nosotros.

Creo que lo mejor es que vaya a hablar con mi hija, debo aclarar esto de una vez por todas, antes de que esto se haga más grande, así como una bola de nieve al descender por una montaña, comienza pequeña pero al llegar al final, hace un completo desastre… Me coloco en pie y en silencio camino a la habitación de mi hija, antes de abrir la puerta, doy unos toquecitos a esta –T/N… ¿estás ahí? siento mucho lo que sucedió y… creo que debemos hablar de esto, fui demasiado dura contigo, lo mejor es  hablar- aunque toco la puerta, la respuesta es la misma, ninguna, después de pensarlo decido abrirla, quizá ella está tan molesta que no quiere hablar conmigo. Me acerco a su cama y no está, busco por su habitación y no hay rastro de ella, camino por palacio y pregunto a cada uno de los criados y nadie la ha visto, a lo lejos logro observar a Yoongi junto a Ji-Woo no dudo en acercarme para preguntarle, creo que estoy comenzando a desesperarme.

-Príncipe Min- me acerco a él con una leve sonrisa, intento ocultar mi preocupación -¿sí su majestad?- lo noto algo extraño, además, ha estado demasiado cerca de Ji-Woo, quizá eso ha molestado a T/N –sígueme por favor- me alejo de ellos y soy seguida por Yoongi, en mi mente organizo las cosas que quiero preguntarle, cada vez las preguntas son más y más numerosas, no sé cómo podría comenzar -¿qué sucede su majestad? Parece que está preocupada por algo- pregunta sacándome de mis pensamientos –usted… ¿ha visto a mi hija?- él desvió la mirada levemente, pero de igual manera puedo notarlo, hay algo que me está ocultando, estoy segura de eso -¿se refiere a T/N? no, desde ayer no la veo, siento que ella me ha estado evitando últimamente- ¿lo está evitando? Así que no estoy tan equivocada -¿desde cuándo lo hace?- pregunto ganando la mirada confusa de Yoongi –Desde que… no lo recuerdo muy bien, desde hace un par de semanas ¿hay algo mal con ella?- niego repetidas veces con la cabeza –no, solo… discutimos y hoy no la vi en su habitación, quizá salió temprano al orfanato, ella está trabajando demasiado duro estos últimos días, solo espero que eso no afecte su salud- él lanza un profundo suspiro –sí, ha de ser por eso que se mantiene lejos, ha de estar lidiando con mucho estrés-

Pov. Yoongi…

La reina no vio a T/N salir esta mañana, pero ella es una de las primeras en salir a dar su caminata matutina, pobre T/N, ha de estar cansada y yo… no he hecho nada para ayudarla, ¿será que está agotada? ¿O querrá su propio espacio? Pero ayer… la vi irse casi abrazada a ese medico ¿qué es lo que está pasando aquí? No puedo evitar sentirme incómodo con esa idea, ella, lentamente se está alejando de mí y yo lo estoy permitiendo, yo mismo estoy soltando su mano.

Ji-Woo me dijo lo que había sucedido con su vestido ¿T/N realmente habrá sido capaz de hacer eso? sé que ella es de un carácter bastante fuerte, pero no sería capaz de hacerlo, estoy seguro de que no… ¿o sí?

Pov. T/N…

-Hey… T/N, buenos días- escucho la dulce voz de Stephan tratando de despertarme –quiero seguir durmiendo un poco más- digo dándole la espalda, una leve risa sale de sus labios –sé que te dije que debes descansar, pero creo que estás exagerando un poco- me mece con suavidad –si te levantas, prepararé tu desayuno favorito ¿qué dices?- me siento con una enorme sonrisa en los labios –veo  que llegamos a un acuerdo- dice riendo y colocándose de pie -¿cómo te has sentido en un hibernación?- asiento con delicadeza, la verdad es que me he sentido demasiado aliviada estando aquí con Stephan, no es porque sea médico, pero siempre me ha transmitido una cantidad increíble de tranquilidad, creo que sería un gran esposo.

-Ya estoy de vuelta- entra con una bandeja de mediano tamaño, ver tanta comida me quita el apetito –es demasiado- digo viendo fijamente la bandeja –es para los dos, así no será aburrido desayunar- una sonrisa se formó en sus labios, se sienta al frente y comenzamos a comer -¡está delicioso!- exclamo con la boca llena – ¡oye! ¡Recuerda que eres una princesa!- tapa mi boca en medio de la risa, él es una de las pocas personas con las que puedo ser sólo T/N, no la princesa T/N, es un gran amigo.

Stephan y yo caminamos de regreso al palacio, mi tiempo de descanso había terminado, aunque de igual manera los cuidados y comida seguían igualmente estrictos, él es un médico muy dedicado -¿recuerdas lo que te dije?- pregunta mirando a mis ojos fijamente, asiento con mi cabeza y me indica sin palabras, que recite nuevamente lo que me había dicho numerosas veces ya –Número uno: alejarme de las emociones fuertes; Número dos: nunca saltar las comidas; Número tres: alejarme de la cara de moca; Número cuatro: evitar a mi madre; Número cinco: no trabajar ni estresarme en exceso; Número seis: llamarte si sucede algo; Número siete: mantenerme lejos de la cara de mosca; Número ocho… número ocho…- “no hay número ocho” dice despeinándome –sólo mantente lejos de Ji-Woo- asiento levemente.

Después de despedirme de Stephan, entro al castillo por una de las puertas secundarias, así no llamaría demasiado la atención, cerca de mi habitación puedo observar a Yoongi asomándose por la ventana, algo me impide acercarme a él, segundos después se acerca corriendo Ji-Woo y entre lágrimas lo abraza en un descuido, une sus labios con los de Yoon, continúo mi camino, no puedo permitir que esto me afecte, paso frente a Yoongi –por favor, vayan a algún lugar privado, todos no tenemos por qué presenciar estas escenas- termino de hablar y continúo caminando, dejando las palabras en la boca de Yoongi.