Cap 26: La supuesta competencia.

Hoseok

 La luz del día me golpeaba la cara ¿Por qué la ventana estaba abierta? Me levanté para cerrarla y arrimar la cortina, luego me percato que no llevo nada puesto, busco como loco mi ropa y me la pongo apresurado. Un momento ¿Por qué hago esto si estoy en mi cuarto? No, no estoy en mi cuarto, me acerco a la cama al ver como las sabanas respiraban ¿Tomé o algo así? En el instante que subo levemente a la cama para ver de quien se trataba, T/N saca su pequeña cabecita para respirar. ¡¿Nada fue un sueño como siempre?! Bueno, no todo el tiempo, pero si soñaba las 50 sombras de Jung.

— Buenos días, T/N —dije y me acosté con ella para darle un beso, ésta sonreía y me abrazaba.

— ¿Ya te vas? —preguntó un poco adormilada.

— Ah, no. La luz me estaba molestando y por eso me levanté —sonreí acariciando su espalda descubierta—, ¿Cómo dormiste?

— Bien —me miró coqueta—, muy bien —sonrió— ¿Y tú?

— Mejor.

 Se levantó al baño y yo solo veía como se daba un baño, la acompañe e inclusive la ayudé un poco, pero solo con su cabello. Escogí su ropa del día y salimos juntos después que yo me arreglara un poco, caminábamos tomados de las manos por la calle, ignorando nuestro alrededor, mi celular tenía más de 60 llamadas perdidas de los chicos, les dejé un mensaje diciendo "Estoy con T/N" y mágicamente dejaron de molestar.

 El día era esplendido, todo estaba lleno de colores, T/N se sostenía de mí porque no podía caminar muy bien, excelente pero triste, le hacía bromas con "¿Lo hacemos otra vez?" "Podemos volver al hotel" o cosas así, uno que otro golpe de su parte; sin embargo, nos reíamos. Tenerla conmigo es lo mejor, la medicina que necesitaba, creo que por eso me dejaron el día con ella. Fuimos a una tienda para poder cambiar mi ropa e ir a una cita decente, como los viejos tiempos, cine, pizza y por ultimo un carrusel. En serio que las horas pasan volando, y yo no quiero que eso pase cuando estoy con ella. 

— Hobi ¿Por qué no te sientas conmigo? —decía como una niña pequeña, solo reía por ver sus lindos ojos exigiéndome ir con ella.

— Porque estoy arriba de un unicornio, y me gustan los unicornios —dije fingiendo ignorarla, ésta me gritaba cosas sin sentido en su idioma—. ¡Deja lo cobarde y dímelo en coreano! 

Iba a decir algo pero, su celular sonaba por decimonovena vez en todo el paseo. Contestó y puso la cara que alguien pondría al decirle una mala noticia, ella no hablaba, solo miraba a la nada y luego colgó para así, apagarlo.

— ¿Pasa algo? —pregunto levantándome para ir como quería, me senté detrás de ella y la abracé, besaba su cuello y le decía cuanto la quería. 

— Nada, no entendí lo que me decían —dijo sin más y tocó mis manos, temblando. 

Algo andaba mal y no me lo quería decir ¿Tiene que volver a T/P? Pero si apenas nos vimos ayer y hoy, la gira no ha terminado ¿O si? Bajamos del carrusel en el que nos subíamos de chicos, yo necesitaba verla sonreír sinceramente, lo que hacía ahora era solo forzar sus labios.

— ¿Por qué apagaste tu teléfono? —pregunta Lukas llegando. 

— ¿Cómo supiste que estaría aquí? —dice ella caminando hacia él.

— Google —mostró su móvil con un mapa—, J-Hope dijo que amaba los carruseles, así que vine aquí ¿Nos vamos? El vuelo es en una hora, sabes que en Asia son muy puntuales —tomó su mano y yo también.

— ¿Vuelo? ¿No terminaste la gira? —dije.

— ¿No le dijiste que hoy volvíamos? —miró el rubio a la chica un poco confundido. Ésta negó.

— Perdón, Hoseok. La gira finalizó aquí en Corea del Sur, no lo sabía hasta que Willow me llamó hace un rato —nos soltó a los dos. 

— Dijiste que si te soltaba nunca iba a volver a irte para desaparecer —repetí y tomé su mano otra vez, ella sonreía y el chico rodaba sus ojos.

— No lo haré —rió y me besó—, tienes mi número, llámame todos los días como antes, por favor —nos abrazamos, las lagrimas amenazaban con salir—. Quizá, tal vez, bueno, pueda venir.

— ¿Qué? T/N, sabes que no puedes hacer viajes improvisados —contestó Lukas, apreté mi mandíbula al oír su horrible voz. 

— Ay, sabes que Willow me dejará, de todas formas no sería improvisado, si tengo tiempo, puedo tomarme la molestia de viajar casi un día para ver a Hoseok —se enganchó a mi brazo.

— ¡T/N, sube al auto! —gritaba Jen desde una camioneta.

— Hoseok —me miró—, te amo. Te llamaré todo el tiempo ¿Ok? —se soltó— Sé que esta no es una despedida muy agradable, bueno, las despedidas no son agradables pero, sé con certeza que te volveré a ver. 

Nos besamos y salió corriendo al auto, el chico me dio una ultima mirada y se fue también, tomé un taxi de vuelta a casa, un mensaje de T/N llegó:

"La pasé de maravilla contigo, siempre serás el chico que amo, recuerda llamarme o si no te bloqueo".

Sonreí como un imbécil, y digo imbécil porque a todas estas, no le pedido que sea mi novia.

— Deberías hacerlo cuando ambos estén estables —dijo Nam, sentándose conmigo en el sofá.

— ¿De qué hablas? 

— Se nota desde China que quieres ser su novio, pero si ambos no se ven, no pueden —le dio un mordisco a su helado.

— Eso cierto ¿Qué haría sin ti, RM? —dije alegre. Él alzó su helado con su típica sonrisa, Jimin cruzó a la cocina ignorándonos.

— Oh, Jimin-ah —rió— ¿Quieres un helado?

— Sabes que no como helado de noche —dijo sin mirarnos. 

— ¿En serio? Antes de debutar lo hacías con T/N —lo último lo dijo bajando su voz, obvio que la regó. 

— Exactamente, por eso no lo hago —cerró la nevera con fuerza y subió las escaleras para desaparecer. 

Meses después...

— ¡Luego de años esperando este momento, podemos ver al grandioso grupo mixto...SAVAGE! Oh, se ven tan atractivos, más que en la pantalla, ese estilo atrevido de los nueve llama mucho la atención, vamos a entrevistarlos, tengo entendido que T/N habla Coreano.