8

8

- ¿Qué? -grite un poco asustado.

-como oíste ya estamos cerca del planeta-dijo Leo tratando de sonar un poco valiente.

-ve a buscar a los demás-dijo Leo con un poco de miedo en su voz.

Yo Salí del cuarto para salir a buscar a mis amigos, pero al salir corriendo por toda la nave no encontré a nadie, hasta que se me ocurrió que tendría que ir a buscarlos en sus cuartos y ahí me los encontré a todos en sus respectivos cuartos, así que empecé a decirles que vayan a la sala principal junto a Leo, yo ya iba a ir con ellos, pero de repente veo que la puerta de mi cuarto está rota, al entrar a mi cuarto solo vi a Carla llorando en mi cama.

-hey ¿por qué lloras? -pregunte tranquilamente.

-no puedo creer que no me hayas defendido cuando el estúpido de Leo me ofendió-dijo tristemente.

Yo no sabía cómo mismo reaccionar ante aquellas palabras, pero después me puse a repasar lentamente sus palabras hasta darme cuenta de que era lo que me quería decir de verdad.

-que te crees que soy tu maldito guardaespaldas o que, tú ya tienes edad para defenderte sola-grite enojado.

-solo tengo 19 años todavía necesito de alguien que me ayude-dijo tristemente.

Yo me quedé observándola con una mirada perdida hasta que decidí responderle.

-y eso que, Carla, yo tengo 17 años y me defiendo por mí mismo-dije molesto.

-sí, pero porque tú ya tienes experiencia en eso-me grito enojada.

-si yo ya tengo experiencia, pero de qué manera crees que la conseguí, que, siendo débil, molestando a los demás, siendo un entrometido-dije enojado.

Mi enojo ya estaba llegando a sus límites, pero a pesar de la ignorancia de Carla, decidí intentar calmarme e intentar de resolver esto de la manera más pacífica de todas.

-mira lo que tú dices es razón, tú no has tenido ninguna oportunidad para defenderte por ti misma y tampoco tienes experiencia en eso, pero recuerda que yo no pude tener las mismas oportunidades que tú, mira la mitad de mi vida ha sido muy mala, como crees que yo me sentí cuando perdí a mis padres cuando tenía 6 años, Carla yo solo era un niño cuando ellos murieron-dije sin expresión alguna.

Al parecer la hice sentir mal a Carla por todo lo que había dicho porque salió corriendo de la habitación sin decir nada, yo al ver esto lo único que hice fue encaminarme al salón donde ya todos estaban agrupados incluyendo a Carla, yo me acerqué a Leo para preguntarle algo.

- ¿Cuánto falta para aterrizar? -pregunte sin ninguna expresión.

-aproximadamente 15 minutos-dijo Leo entusiasmado.

Yo al escuchar que solo faltaban 15 minutos decidí sentarme en el suelo y detenerme a pensar en cualquier cosa, pero al intentar perderme entre mis pensamientos, vi que todos estaban posando sus miradas en mí, al parecer estaban algo extrañados, quería preguntar porque me veían así, pero al voltear a ver a Mauro me di cuenta de que estaba intentando consolar a Carla mientras ella lloraba, en eso Leo se me acerca y se sienta al lado mío.

-hey ¿qué le pasa a esa entrometida? -pregunto sin mucha importancia.  

-eso no importa-dije sin expresión alguna.

Yo me quedé pensando unos minutos, hasta que me di cuenta de que Leo me había preguntado algo de Carla.

-oye como así me preguntaste que le paso a Carla-dije intrigado.

-es que como casi siempre es alegre y además siempre quiere estar al lado tuyo-dijo inquietamente.

-que acaso eso te molesta-dije burlonamente.

-no, no me importa solo es que si eso sigue así ella será una distracción y no dejara que la misión fluya-dijo rápidamente intentando ocultar varias de sus emociones.

Yo era bueno para descifrar las emociones de las personas, así que no tarde en encontrar un poco de cariño en sus palabras, así que decidí poner a prueba esas emociones (en mi mente pasaban muchas cosas y cuando eso pasa pierdo el control total de mi cuerpo) decidí acercarme más a Leo en ese momento el empezaba a sentirse nervioso, después de eso intente hacer que se sintiera más nervioso, pero justo en el momento en el que le iba a hacer algo uno de los guardias de Leo entra al cuarto.

-señor ya llegamos al planeta-dijo con una expresión seria.

-en serio-dijo Leo alegremente.

Leo se paró de donde estaba sentado y empezó a decirles a los demás que salieran de la nave.

-bueno bienvenidos al planeta 3DC4 o la tierra alternativa-dijo Leo intentando lucirse.

Yo me quedé sorprendido por la división que había en ese mundo ya que la gran parte estaba repleto de oscuridad y en la otra parte estaba lleno de colores gracias a la iluminación del lugar, al fin pude ver del todo bien a Leo él tenía el pelo castaño con cicatrices por el cuello y en vez de parecer un niño de 14 años ahora parecía un chico de 16 años.

-esperen guardias donde estamos-dijo intrigado.

-al parecer hemos caído en la mitad del planeta y si intentamos volar otra vez la nave explotara-dijo uno de sus guardias.

Yo me quedé sorprendido al oír que solo estábamos en la mitad del planeta.

-bueno si es así tenemos que darnos prisa y tenemos que ir con cuidado no vaya a ser que uno de los monstruos que están de parte de Jasón este explorando la zona-dijo con un tono de autoridad.

-si capturan a alguien de seguro que se lo llevan ante Jasón-dijo Leo seriamente.

Yo me quedé sorprendido por los cambios de actitud de Leo, pero sabía que en el fondo el solo quería impresionar a todos y también logré notar que más que todo quería impresionarme solo a mí.

-bueno empecemos la marcha, mi padre de seguro querrá hablar con todos ustedes-dijo Leo seriamente.

Después de lo que dijo Leo nos pusimos en marcha al reino todo iba bien hasta que nos encontramos con unos dos monstruos: uno parecía ser un conejo pero con la forma de un humano, el otro era una combinación entre un gato y un perro humanoide que parecía estar sufriendo y ambos tenían espadas, eran menos que nosotros pero según Leo ellos eran tres veces más fuerte que los humanos de ese mundo así que intentamos pelear contra ellos pero casi salimos perdiendo, el gato/perro le dio un golpe con el mango de la espada a Carla en la espalda y el otro le inserto toda la espada a uno de los guardias de Leo, ellos fueron los más afectados, Carla estaba desmayada y el guardia estaba convirtiéndose en polvo a los demás solo nos dejaron con varias cortaduras después de eso los guardias huyeron.