capitulo 4 - las cascadas arco iris

––– ¿en dónde estoy...?

––– ¡...!

Qué lugar más bonito pero era muy brillante para los ojos de una persona, pero los míos se acostumbraron un poco, había varios animales de colores. Perros blancos, cisnes rosas, peces verdes y un unicornio blanco con una melena arcoíris. Salí del agua y me recosté un momento en el césped.

Que era este lugar. No me había dado cuenta de la gran catarata que caía desde las nubes, esto parecía un lugar muy bonito y tranquilo, de pronto escuche un sonido que se acercaba entre los arbustos.

––– ¡aquí está la comida...! ––– dijo una silueta con una bandeja con tazas.

Cuando me vio.

––– hola... ¿quién eres?

La silueta dejaba las tazas en el suelo y los animales venían a comer, lentamente.

––– por fin quien eres... no pareces de aquí...

––– ah... yo soy... bueno eso no importa...

––– "bueno eso no importa" ven aquí.

––– no eso no es mi nombre, llamame chico.

––– bien... sígueme.

––– ¿a dónde?

––– solo ven.

La silueta me llevo entre los arbusto a un establo, es donde se encontraba ese unicornio tan hermoso.

––– hola... y este bonito unicornio ¿qué hace aquí? ––– dije como si se lo estuviese hablando a un recién nacido. Mientras intente acariciarlo.

––– ¡a quien le hablas así, no tengo tres años! ¿Sabes?

––– hay lo siento, pensé que no hablabas.

––– psss... que insulto. No ves que soy especial.

––– ¿en qué sentido de especial...?

––– bueno no ves mi gran cuer... hay mi hermosa melena...

––– okey... triste.

––– pero si estoy feliz...

––– olvidalo, como puedo salir de aquí. ––– le dije a la silueta.

––– ¿Porque te quieres ir?

––– necesito encontrar algo...

––– mmm...

––– bueno ven conmigo.

Seguí a la silueta por un escalonado al lado de la catarata, que nos llevó por encima de las nubes en donde nos encontramos con seres hechos de nubes, arcoíris, ovejas, osos, música pop a todo volumen, luces led. Parecía una fiesta.

––– ¡oye! ¡-¿Qué es este lugar?-!

––– ¡es la cascada arcoíris...!

––– ¡la que!

––– ¡LA CASCADA ARCOIRIS!

––– ¡ah ya!

Había un espectáculo de estríper unicornios, que lucían sus melenas de un lado al otro. Era algo muy extraño, las ovejas tomaban y se ponían a bailar con los reflectores.

––– una bulla, para ¡míster unicornio arcoíris de las cascadas arcoíris sol de luna escarlata! ––– se escuchó y de pronto salió el unicornio que vi en el establo, cubierto de ropas.

––– ¡se ve que es muy importante!

Este lugar me dejaba muy mareado con tantas cosas, por el lugar. Pero de pronto los unicornios se transformaron en chicas con cabello arcoíris y un cuerno con una vestimenta muy linda.

––– ¡Oye guapo, porque no te acercas...!

––– ¡no gracias ya estaba por irme!

––– ¡no quedate conmigo! ––– dijo la chica unicornio. Mientras me extendía su mano

––– gracias pero, no gracias... ––– dije, en cuanto me extendió su mano. ––– mejor me voy.

Voltee y me fui caminando, pero los unicornios se atravesaron en mi camino. Y la única salida que vi era saltar hacia el lago. Caí precipitadamente y me zambullí en el agua, nade sin parar hacia el fondo de este, y luego el agua se empezó a tornar verde agua. Y cuando me di cuenta Salí de un pequeño charco de agua en un bosque.