Capítulo 39 "Aún"

Narrador

Legancy Emanuel Medical Center

Ahí me encontraba se encontraba Angie junto a Lena, que estaba desesperada por saber cómo estaba Louis, había tenido un fuerte accidente y las chicas no tenían ni una noticia de él, ambas estaban muy asustada, los ojos de Angie ardían por la falta de sueño, Lena se paseaba de un lado a otro haciendo que Angie perdiera mi paciencia

– ¡Lena! –Exclamó la castaña

– ¡¿Qué?! –Le gritó Lena en respuesta

–Siéntate ya, me desesperas–Ella a regañadientes me hizo caso

–Angie...–Empezó la rubia

– ¿Si?

–Hay algo que debo decirte...–Dijo pero fue interrumpida por una voz de un hombre que Angie reconocería en cualquier lado, mariposas invadieron el estomago de la chica provocando nauseas, su corazón martilleaba fuertemente contra su caja torácica, juraba que podía desmayarse en cualquier momento

– ¡Lena! ¿Cómo está Louis? ¿Qué te han dicho? Es muy...–Tyler se calló en cuánto en cuanto vio a la chica que hace años anhelaba ver, el corazón del chico se detuvo en seco antes de empezar a latir con fuerza, sus manos empezaron a temblar y su estomago se sintió comprimido, Tyler se había quedado mudo ante la presencia de Angie, Alison salió de atrás de Tyler, llamando la atención de Angie, Alison al ver que su hermano se había quedado mudo le propino un golpe para que reaccionará, pero esté aún así no reacciono, Lena pensó que no podía ser más incomodo aquel momento, carraspeo

–Sé que esto es un mal momento...–Empezó Lena–. Pero ustedes tienen cosas de las cuales hablar y... Deben hacerlo

Angie miro a su mejor amiga con ganas de matarla, después de tanto tiempo ¿Qué le diría a Tyler? ¿Qué tendrá él que decirle a ella? ¿Tenía novia? ¿Ya la olvido? Le dolería si era así, porque a Tyler aún le pertenecía el corazón de la chica.

–Es cierto–Dijo la chica rubia que se encontraba al lado de Tyler, Tyler abrió la boca para hablar, pero fue interrumpido por un doctor

– ¿Ustedes son los amigos de Louis Green?

–Si–Dijimos todos al unísono

–Él ahora se encuentra en Cuidados intensivos, debido a que perdió mucha sangre, tiene cuatro costillas rotas, el brazo izquierdo fracturado, su pierna izquierda por suerte no necesita clavos pero esta enyesada, tiene un profundo corte en su pierna derecha que fue la causa de su pérdida de sangre, no se preocupen, en aproximadamente dos días habrá despertado, está muy estable–Todos se encontraban en silencio procesando todo lo que el doctor había dicho, Lena se echo a llorar, Angie le dio un abrazo diciéndole que Louis estaría bien. Tyler no podía creer que Angie estaba ahí, a pocos metros de él, quería ir hasta ella y tocarla para saber si no era un espejismo, contuvo las ganas, Alison quien estaba a su lado susurro:

–Deja de ser tan cobarde Jacobs, así no es como te conozco. Ve y habla con ella–Él miro a la chico sorprendido, pero él en el fondo sabía que tenía razón, estaba siendo todo un cobarde, ¿Cómo una chica pudo cambiarlo tanto? Tantas preguntas que se hacía el chico, como... ¿Aún ella lo ama? ¿Está con alguien? Él no lo sabía y la única manera de saberlo era hablando con ella, Tyler se armo de valor y camino hasta la silla donde la chica estaba sentada

–Hola...–Murmuro él entrecortadamente, ella levanto la vista

–Hola–Dijo Angie con nerviosismo, ella sentía que en cualquier momento despertaría y Tyler no estaría justo frente a ella

– ¿Ti-tienes un momento? –Preguntó el chico nervioso, ella asintió, Angie había cambiado mucho desde la última vez que él la había visto, su cabello ya no era largo, caía sobre sus hombros, la chica se veía más madura, más decidida, más mujer.

Angie pensó que había superado a Tyler, pero... ¿Era normal que sintiera todas esas cosas? Tyler lucía diferente, sus músculos estaban más trabajados, su cabello estaba más largo, se veía más hombre y eso a ella le encantaba. Ambos caminaron hasta las afueras del hospital, Tyler saco una cajetilla de cigarros, saco uno colocándolo entre sus labios, toco sus bolsillos en busca de un encendedor, Angie saco uno de su bolsillo y se lo tendió, Tyler la miro perplejo y sorprendido a la vez

– ¿Fumas? –Fue lo único que le dijo, aún sin tomar el encendedor de sus manos

–Sí...–Respondió ella sin sentirse orgullosa de ello, él tomo el encendedor y prendió su cigarrillo, le tendió su cajetilla para que ella tomará uno, con todos los nervios del mundo Angie extendió la mano hasta la cajetilla e intento no tocar su mano, lo cual no salió muy bien, sus manos se rozaron y electricidad recorrió sus cuerpos, ambos se miraron incómodos y ella con un movimiento rápido tomo el cigarro, colocándolo entre sus labios lo encendió y expulso el humo, él la miraba atento sin creer que ella fumaba.

–Así que...–Empezó ella–. ¿Cómo has estado? –Le pregunto ella, él la miro obvio ¿Cómo se supone que debería haber estado?

–Bueno... Pude haber estado mejor–Le respondió el chico, ella le dio una calada a su cigarrillo–. ¿Y tú? –Le preguntó él, dándole una calada a su cigarrillo

– ¿Yo? Pues igual que tu

–Esto es incomodo ¿verdad? –Murmuro el tatuado, ella asintió

–Después de tanto tiempo...–Dijo ella sin creerlo–. Estás aquí a pocos metros de mí, que lastima que la causa de nuestro reencuentro haya sido una tragedia–Él sonrió melancólico. A pesar de que Angie llevaba chaqueta, el frio la hacía titiritar, Tyler la observo atentamente, lanzo el resto del cigarrillo al suelo pisándolo y se acerco a ella arrebatándole el suyo y repitiendo el proceso, ella frunció el ceño, él miro su reloj que marcaba las 3:45am

– ¿Aún tienes el Jeep? –Cuestionó mirando a la castaña, ella asintió desconcertada–. ¿Dónde está? –Ella le hizo una seña para que la siguiera, él lo hizo, a lo lejos pudo ver el Jeep, Tyler sin pensar tomo su mano, su corazón dio un vuelco y a Angie todo su mundo se paralizó, ella le miro y pudo sentir como sus mejillas ardían, él empezó a caminar apresuradamente en dirección al jeep, ambos entraron a este, en cuanto estuvo dentro el chico sonrió recordando muchas cosas