Terra y Él Guardián de las Galaxias.

♣︎ Capítulo 2. Terra enamorada. ♣︎

 

💘❤ Terra enamorada. 💘❤

 

Antes que se escondiese Solis di mi último recorrido, solo me tomaba un minuto recorrer el planeta entero, con el paso de los siglos aprendí a trasladarme de un lugar a otro.

 

Hoy estuve trabajando en la descontaminación, de uno de mis caudales como le conocen ríos, descontaminar un caudal me consume plasma, pero por mi planeta hago lo que sea.

 

El plasma lo recupero en dos días, pero a veces tardo más de lo usual ya que en los últimos siglos los humanus han contaminado demasiado debido a sus fábricas y desechos.

 

Aun así no me arrepiento de haber pedido a los humanus, pues necesitaba compañía, pero luego de siglos preferí dejarlos hacer su vida, también está el hecho de que ellos destruían lo que tanto amo, en algunos pocos casos que se dio y el motivo de mi desaparición fue que ellos querían mis conocimientos, pude haberlos compartido con ellos pero sabía que eso me llevaría a la destrucción, y eso no lo permitiría jamás.

 

Llegó al río donde conocí a mi primer y último amor. Pues si los intergalácticos, interestelares como somos conocidos por los científicos que aseguran vernos alguna vez así nos nombraron.

 

En fin nosotros también tenemos sentimientos, si no lo estuviéramos como protegeríamos a nuestros planetas, galaxias, universo, constelaciones y demás.

 

Yo me enamoré de un humanus, él era un chico guapo no lo voy a negar, sus ojos chocolate como la tierra, aún lo recuerdo como si fuese ayer, ese chico puso todos mis sentidos de cabeza.

 

Un día me di cuenta que el envejecía como todos los humanus y yo seguía igual, eso no era justo yo lo amaba y estuve que dejarlo ir, él no era para mi, él y yo jamás podríamos estar juntos, le pedí al Supremo creador que le concediera inmortalidad, él se opuso ya que era un humanus y su ley de vida es nacer, crecer, reproducirse y morir.

 

No me quedo de otra que dejarlo ser feliz con otra persona, aspiro el aire fresco, aún conservo todo sus regalos y el lugar donde nos conocimos sigue igual.

 

Rememoró esos recuerdos con él, un día tras otro. Recuerdo que estaba purificando el agua cuando sentí alguien acercarse, como soy un ser transparente no necesito usar ropa de la que utilizan los humanus, estuve que verme como una para no asustar al intruso.

 

Flashback.

 

—Hola ¿que haces ahí? -. Me pregunto un chico de piel canela.

 

-Hola-. Me giré hacia él intruso. -¿Que haces tú aquí? -. Le pregunte.

 

-Estaba por aquí cerca y te vi.. ¿Jugando con el agua? -. Mi cara ardió del enojo.

 

-No estoy jugando con el agua-. Estaba purificando el agua para que ustedes puedan beberla, pensé para mi. -Estas muy lejos de los demás no lo crees-.

 

-Si es que estamos acampando por aquí cerca y ¿cual es tu excusa? -. Lo miré.

 

-Yo vivo cerca-. Él me miro confundido.

 

-Si no sabía que habían casas por aquí cerca-. Su semblante era de confusión.

 

-Solo esta la mía-. Dije.

 

-Podrías invitarme-. Lo volví a mirar y el sonrió.

 

-Para que quieres ir a mi casa-. La verdad no había una casa como ellos conocen.

 

-Quiero ver como son las cabañas del bosque-.

 

-¿De donde eres? -.

 

-De lo que conocen ahora como ciudad-. Como olvidar que por esa edificaciones miles de árboles murieron.

 

-Así que eres un destructor de la naturaleza-. Sus ojos se abrieron más de lo normal.

 

-Yo no he hecho nada de eso-.

 

-Pueda que no pero eres de los que compran-.

 

-Tienes razón pero yo no fui el que compro fueron mis padres-. Negué.

 

-Es lo mismo-. Me giré para marcharme, estuve que caminar como una humana.

 

Pensé que al estar lejos me volvería una con mi planeta pero él me seguía.

 

-Si me sigues te vas a perder y te puede comer algún animal salvaje-. Dije para asustarlo y que se marchara, los animales no atacan si no le haces daño.

 

-No me importa perderme-. Me giré hacia él, en eso choco contra mi, y sus manos tomaron mi cintura.

 

 -¿Que haces? -.

 

-Lo.. lo siento no fue mi intención-.

 

-Sera mejor que regreses con tu familia o amigos, el ocaso ya se aproxima y no es bueno que alguien ande por ahí solo-.

 

-Y tu si puedes andar por ahí sola-. Me estaba reprochando. -¿Que clase de padres tienes? -.

 

-No tengo padres- Me giré y seguí mi camino, él tomo mi mano, se posó frente a mí.

 

-¿No tienes padres y con quién vives? –.

 

-Sola-. Proseguí mi caminata.

 

–So.. sola–. Moví mi cabeza en afirmación.

 

Sus facciones cambiaban, tenia que buscar una excusa, hasta que recordé que los humanus tienen más familiares como tíos.

 

–Bueno no precisamente, vivo con un tío, pero él muy poco biene, solo lo hace cuando tiene que dejarme alimentos y se va–.

 

–Pero la mayoría del tiempo estas sola–.

 

–Ya es demasiada información, ¿para que quieres saber? –.

 

–Es que una chica tan hermosa no debería estar sola–.

 

–Y eso por que, los osos no me harían nada, es más son mis amigos–. Su cara de espanto lo decía todo.

 

–Hay o.. osos–.

 




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