La búsqueda de la traidora

Ya había pasado 1 semana de la batalla con Exiel, los Silver Warriors se encontraban en el templo Ekoin aún resintiendo sus heridas de batalla, cuando de pronto, Yuno los convocó a una junta en la sala de meditación del monje Takasuna.
- Muchachos se que aún estamos lastimados pero necesitamos terminar esto de una vez por todas — exclamó Yuno pero el ambiente se sentía pesado.
- Somos solo nosotros, se siente un tanto vacío este lugar sin los demás — respondió Rul desmotivado al ver el lugar un poco vacío.
- Es cierto que ya sólo somos nosotros 7, pero no podemos rendirnos ahora, debemos hacerlo por Edi y “Einstein” ellos habrían querido eso — exclamó Mery intentando levantar los ánimos de los demás.
- Es verdad, yo no me pienso rendir ante esa traidora — gritó Lorem extasiado, al ver la motivación de todos, Amer solo dio un gran suspiro y acto seguido se autoproclamó una cachetada con ambas manos a su rostro y con una gran determinación respondió.
- Cuenta conmigo.
- Y con nosotras — gritaron Liz y Nan después de ver la determinación de Amer.
-  Somos 7 y no creo que tengamos oportunidad — respondió Rul atemorizado pero antes de que alguien pudiera decir algo más gritó. — Pero quiero vengar a Editar y a “Einstein” — al oír a Rul, Yuno mostró una pequeña sonrisa y exclamó.
- Veo que empiezas a crecer, antes eras temeroso y tenías poca autoestima pero ahora eres todo un guerrero.
- Exactamente Yuno, todos ustedes son guerreros valientes, sin embargo, luchar por venganza no es precisamente un acto heroico, es cierto que debemos de detener a Gabriel pero no por esos motivos — exclamó el arcángel Miguel mientras se aproximaba con Takasuna.
- De acuerdo, mantendremos nuestros sentimientos fríos en este combate, entonces viajaremos a la islas místicas y la detendremos de una vez por todas, juntos como una familia  — respondió Mery demostrando ser la más madura de todos.
- No será una tarea fácil — exclamó Takasuna.
- Lo sabemos el poder de Gabriel está fuera de nuestro alcance.
- No sé refiere a eso Yuno — exclamó Miguel y luego prosiguió.
- En las islas místicas como lo dice su nombre, viven las criaturas místicas como lo son Hadas, Magos, Elfos entre otros seres...
- Espera, esos seres habían dicho el equipo Trinity que se habían extinguido hace cientos de años — interrumpió Yuno drásticamente.
- No realmente, fueron expulsados a esa dimensión y por años crearon sus pueblos, pero cabe recalcar que realmente le tienen un rencor enorme a los humanos, de echo hace unos 30 años atrás hubo un enfrentamiento tan sangriento entre humanos y los místicos que hubo un descenso increíble en sus especies, lo que obligó a un pacto de paz entre ambos mundos — exclamó Miguel.
- Se me hace algo extraño, por qué ahora que lo pienso en mi viaje a la dimensión Astral no vi ningún ser mítico — exclamó Yuno desconcertado.
- Eso es por qué te encontrabas en el lado Oeste de la dimensión, como sabes, la dimensión Astral es tan grande como el planeta tierra y está confirmada por Islas. En las islas del lado Oeste viven los semidioses ya fallecidos y en el Este los seres mitológicos los cuales están conformados por aproximadamente 6 islas que juntas hacen las islas místicas — respondió el arcángel Miguel pero fue interrumpido por Amer.
- Entonces si odian a los humanos como nos acercaremos a ese lugar.
- Con un hechizo que los hará ver cómo Magos, así pasarán desapercibidos — respondió Takasuna.
- Además no tienen de que preocuparse yo iré con ustedes y juntos detendremos a Gabriel, ya que Gabriel a intervenido en el mundo de los mortales y rompió una de las reglas del creador, es mi deber detenerla ahora, nos reuniremos mañana en el comedor principal del templo y seguiremos con los preparativos de la misión — respondió el arcángel Miguel dando tranquilidad a los Silver Warriors.
- ¿Por qué en el comedor? — preguntó Rul confundido.
- Todo buen guerrero debe alimentarse bien — exclamó Miguel con una sonrisa. A la mañana siguiente Yuno y sus amigos se reunieron en el comedor del templo ahí se encontraban Takasuna y Miguel, al lado se encontraba un sujeto encapuchado con la boina de su sudadera que impedía ver su rostro, además de un monje viendo televisión, al acercarse Yuno observó gran preocupación en Takasuna así que no dudó en preguntar qué pasaba.
- Mira las noticias Yuno — exclamó Takasuna y al acercarse miró con asombro que hablaban sobre la destrucción de NY, entre el caos que había provocado la llegada de Exiel.
- Te digo no es normal, como los estados Unidos de América dejaron que una planta nuclear destruyera toda la cuidad y alrededores — gritó el reportero que discutía con un sujeto de traje muy galante.
- ¿Planta nuclear? — preguntó Mery confundida.
- La ONU así como la OSADA escondieron la verdad sobre la destrucción de Nueva York — exclamó Takasuna mientras seguía mirando el televisor.
- Entiendo, una planta destruida accidentalmente al estilo de Chernóbil sería la forma más fácil de esconder todo — respondió Lorem.
- Un trágico y lamentable accidente, sería menos escándalo que decir que un Arcángel desterrado destruyó una ciudad completa, el humano aún no está listo para saber sobre la existencia de nosotros — exclamó Miguel seriamente.
- Ok, si fue una explosión nuclear como lo que pasó hace años en Chernóbil como explicas el eclipse solar, las ranas e insectos, te lo reitero nuevamente esto es una conspiración del gobierno para escondernos que el fin del mundo está cerca — respondió el reportero que seguía discutiendo con el sujeto de traje.
- Y el otro sujeto es… — exclamó Yuno siendo rápidamente interrumpido por Takasuna.
- El Ministro de defensa de USA sólo el ministro y el presidente actual de cada país donde OSADA tiene sus cuarteles saben sobre nosotros, una vez terminado su mandato se le borran la memoria con una máquina especial si es que se les considera peligrosos, normalmente sólo a los ex-soldados se les permite mantener la memoria por su lealtad.
- Y si tienen ese tipo de tecnología que no es más fácil borra los recuerdos de todos si se llegasen a enterar.
- No creo que funcione así Rul — respondió Amer a la pregunta que Rul había realizado.
- El eclipse es un fenómeno natural todos lo saben y las ranas e insectos son sólo coincidencia — exclamó el ministro con una compostura apta para su cargo.
- Yo no lo creo y un día se sabrá la verdad ya lo verás — gritó el reportero furioso y acto seguido el reportaje término.
- Ahora por esta vez nos hemos salvado, la mayoría de gente alrededor del mundo cree que fue una explosión quién destruyó NY pero dudo que se vuelvan a caer con otra mentira como esa, así que no podemos cometer otro error como éste — exclamó el Arcángel Miguel pero fue interrumpido por una voz femenina.
- Y todo gracias a que no haces tu trabajo como se debe — al voltear a ver de quien se trataba, Yuno y los demás se quedaron realmente sorprendidos pues el sujeto de la boina era una chica bastante linda de no más de 16 años, de piel caucásica, bastante alta para su edad pues medía lo mismo que Mery, su pelo era largo y lacio con un flequillo del lado derecho de su frente, realmente el color de su pelo era lo que mas llamaba la atención puesto que era de color rosa, además llevaba consigo unos audífonos en su cuello, la cuál nos miraba con indiferencia.
- Emmm… y tú eres — preguntó Lorem.
- Desaparece perdedor — exclamó aquélla chica volteándole la cara con indiferencia a Lorem, lo cuál lo saco de quicio.
- Niña insolente, respeta a tus mayores — exclamó Lorem mientras Yuno lo detenía.
- ¡suéltame Yuno le daré una lección!
- Creo que no se habían visto, los presento ella es Hikaru Hoshi, tiene 15 años está entrenando para convertirse en una gran guerrera Shaolin del templo.
- ¿Guerrero Shaolin? — preguntó Amer confundida.
- Recuerden que aquí se custodia la entrada a la dimensión Astral — exclamó Miguel.
- Creo que si lo recuerdo, está muy cerca de aquí, fue por es medio que pude entrar por primera vez a la dimensión Astral cuando entrene con los dioses elementales, y sabía que Takasuna era el guardián de esa entrada pero no se me paso por la mente que era un guerrero, pero ahora que lo dices es más que obvio — respondió Yuno.
<< Estoy más que seguro que tu tampoco sabías, sí ahora me siento menos tonto >>. (Yuno)
- Así es, los monjes que aquí se encuentran son guerreros bien entrenados — exclamó Takasuna amablemente.
- De echo tienen un gran nivel, cuando me levanto a las 5am a entrenar, los e visto practicar — respondió Lorem.
- ¿Y por qué no habías mencionado? ¡Es genial! — preguntó Yuno emocionado por la idea que existían grandes peleadores en ese sitio.
- Con todo esto que había sucedido se me había olvidado — respondió Lorem agarrándose su pelo con su mano derecha con algo de pena.
- Cada monje controla el Ki a nivel mortal, eso quiere decir que a diferencia de ustedes no pueden materializar el Ki y lanzar grandes ataques de energía o controlar los elementos pero pueden controlar su Ki interior y que su energía fluya dentro de ellos para pelear tranquilamente y eso les permite controlar su cuerpo a voluntad lo cual les da una gran ventaja en las batallas. Cabe resaltar que Takasuna están fuerte que podría derrotar incluso al equipo Trinity el sólo — respondió el Arcángel Miguel orgulloso del poder de Takasuna.
- Creo que exagera Arcángel Miguel — exclamó Takasuna modestamente.
- Eres increíble Takasuna por qué no habías mencionado que eres un gran guerrero — exclamó Mery extasiada al saber que Takasuna era realmente fuerte.
- Quizás en el pasado, pero ahora no puedo luchar a la par con ustedes, ya estoy viejo, pero Hikaru es una prodigio y sé que un día incluso me reemplazará — respondió Takasuna mirando con orgullo a Hikaru.
- Bueno, pues mucho gusto Hikaru — respondió Yuno a lo cuál inmediatamente Hikaru se sonrojó.
- Quién te dio permiso de llamarme por mi primer nombre.
- Perdón — exclamó Yuno confundido.
- Jajaja lo siento Yuno pero usualmente los ciudadanos de Japón se nombran por su apellido y sólo se nombran por su primer nombre cuando son amigos, pareja o familiares — respondió Mery con una voz burlona.
- Pero Akashi no le importaba — respondió Rul
- Claro, Akashi nos veía como familia es por eso que no le daba pena que lo llamáramos por su primer nombre — volvió a responder Mery con una sonrisa.
- De acuerdo, te llamaremos Hoshi hasta que nos veas como amigos — exclamó Yuno con una sonrisa.
- Son buenas personas Hikaru, deberías hacerte amiga de ellos — exclamó Takasuna, pero rápidamente Hoshi volteó su rostro y se colocó sus audífonos, ignorando las palabras de Takasuna con indiferencia hacia los Silver Warriors.
- Como decía es una peleadora prodigio pero aún es joven y no tiene respeto por nadie que considere inferior a ella, lo se puede ser arrogante pero créame que es una grandiosa chica — respondió el monje Takasuna mirando a Hoshi que tomaba una actitud pesimista.
- De acuerdo, ahora que ya se conocen, Yuno necesitamos ir lo más pronto posible a las Islas Místicas y detener a Gabriel antes que logré otro caos en el mundo — exclamó Miguel cambiando radicalmente el tema.
- Estoy de acuerdo, partiremos mañana por la mañana — respondió Yuno con actitud y se marcharon del lugar listos para partir a las Islas Místicas.