A veces lo sueños solo son eso. Sueños. 

Aquellos que solo puedes tocar con la punta de los dedos antes de que se desvanescan frente a ti.

Pero a veces esa fantasia es lo unico que tenemos, lo unico que nos sostiene. Y es por eso que escribo y leo sin parar. Adentrandome en los sueños de papel. Puras fantasias.

Me aferro a lo que me mantiene cuerda y me vuelve quien soy.
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