"Estia, ven aquí" dije en un susurro, frente a mi, apareció mi hija más joven
"¿Me llamo madre?", pregunto mientras se arrodillaba ante mi
"¿Qué ocurrió?", le pregunté, lo ocurrido aquí salía de mi entendimiento, solo yo podía llamar almas a este lugar
"Perdone madre, pero no sé responderle, esa alma no llego por casualidad al umbral, fue llamada aquí"
"Puedes irte" en cuanto dije eso ella desapareció, al hacer un movimiento, una bandeja con un juego de té apareció frente a mi, tomé la taza y bebí "Esto es muy interesante, tendré que investigar esto" en cuanto termine de beber el té, me dispuse a ponerme de pie, cuando el reloj comenzó a girar, la mitad de la arena, permaneció en la parte baja, en ese momento otra alma apareció, su cuerpo mortal parecía resistente y se aferraba a la vida, por esa razón, le dije que cruzara el umbral y volvería a su cuerpo, pasaron algunos minutos sin que ningún alma apareciera, por lo que decidí bajar al abyss, en cuanto aparecí en el palacio negro, mi hermana mayor me observo
"¿Qué ocurrió? Hace tiempo que no bajas aquí, pensé que todo estaba marchando según tu plan"
"Hermana, podemos hablar luego, tengo algo que revisar, Eldoris, ven aquí" en cuanto di la orden, un espíritu de agua apareció frente a mi
"Mi señora ¿me llamo?"
"Así es, quiero que busques a un alma recién llegada, debe ser una mujer de unos veintiséis años, quiero que se reúna conmigo"
"Ahora mismo"
"Querida ¿qué ocurre?", pregunto mi hermana mayor
"Ocurrió algo inesperado, necesito encontrar el origen de todo esto antes de nuestra guerra"
"Veo que es importante, no te molestaré, iré a ver a mis nietos, ellos están listos para la batalla" comentó mi hermana mientras caminaba hasta la puerta del palacio
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"Lady Léa, nos tenía preocupados ¿en dónde estaba?", pregunto el jefe del pueblo, junto a él se encontraba una mujer y una niña
"Mi señora me ocultó en Delsgate, los dioses me estaban siguiendo y ella me llevó hasta la ciudad"
"Si la dejo venir aquí, significa que los dioses la volvieron a perder"
"Así es y quienes son ellas"
"Mire mis modales, Lady Léa, permítame presentarle a mi hija y a mi nieta, se mudaron aquí recientemente"
"Es un gusto conocerlas"
"El gusto es nuestro" dijo la hija del jefe
"Estoy aburrida ¿quieres jugar?", pregunto la niña mientras tiraba de mi vestido
"Me encantaría" al decirle que si, su sonrisa fue tan grande, que daba ternura, la niña corrió fuera de la casa
"Disculpe a mi hija"
"No se preocupe" después de despedirme del jefe y de su hija, salí de la casa y varias niñas me esperaban
"Ahí un río por aquí" la niña tomó mi mano y comenzó a caminar hacia la empalizada, dos guardias vieron a las niñas y estaban por detenerlas, pero se detuvieron al verme
"Mi Lady" dijo uno de los guardias, yo solo pude asentir y segui a las niñas sin mirarlos, las niñas me llevaron a un pequeño claro donde se podía observar un hermoso río de aguas cristalinas
Las niñas comenzaron a correr dejándome atrás y se metieron al agua, por mi parte decidí recostarme junto a uno de los árboles, las niñas jugaban lanzándose agua y reían cada vez que podían, la escena ante mi era tan hermosa que me daba paz
"El jefe dijo que la encontraría aquí" dijo una voz junto a mi, en cuanto me volteé me encontré con Ivailo, el me observaba, mi primera reacción fue la de alejarme, el simplemente se quedó observando y luego se sentó junto al árbol "No debe temer, al menos no a mi, usted es preciada para mi señora y no pienso decepcionaria causándoles daño" su forma de hablar causó que mi corazón dejara de estar acelerado, no le temía al hombre frente a mi
"¿Como conoció a Proserpina?"
"Como sabe soy un criador de cerdos, antes vivía en otro pueblo, pero los saqueadores nos atacaron, los dioses los enviaron, los saqueadores asesinaron a todos y se robaron mis cerdos, a mi me apuñalaron" comentó Ivailo mientras me mostraba una cicatriz "Ese día estaba seguro que moriría, pero ella apareció, ella me curó y junto a otros supervivientes nos trajo a este pueblo escondido de los dioses, nos ordenó que talasemos muchos árboles que esperaramos a su protegida, fue así como todos comenzamos a trabajar, el último criador de cerdos murió por una enfermedad, por lo que el jefe me pidió que me encargara de ellos ¿Usted mi Lady? ¿cuál es su historia?"
"¿La mía?, realmente no tengo mucho que contar, pis padres son nobles, pero no los veo desde que pequeña, la iglesia me descubrió y me entrenó hasta hace poco, durante la ceremonia los dioses me traicionaron a mi y a mis amigas, no las he visto desde entonces"
"Mi señora ha comentado que ellas están a salvo en otros pueblos, se reunirán con usted en el momento preciso, dígame ¿como ha sido vivir aquí en este pueblo?"
"Es complicado, llevo muy pocos días aquí, todos han sido amables, pero aún no puedo hablarle a los hombres" después de darme cuenta de lo que había dicho, observe el rostro de Ivailo y no pude evitar reírme "Perdona no fue mi intención" comente sin poder dejar de reír
"Que tenga una buena tarde señorita" comentó Ivailo después de ponerse de pie, aunque lo llame él siguió caminando de regreso al pueblo
"Señorita ¿qué pasó con ese señor?", pregunto la nieta del jefe
"Él... No se encontraba bien" conseguí responderle, permanecimos junto al río hasta que el sol comenzó a caer "Niñas, es mejor que regresemos" después de tomar las manos de dos niñas, caminamos de regreso al pueblo
"Mi Lady ¿cómo estuvo el paseo?", pregunto Aria
"Aria, cometí un error"
"¿Qué error mi señora?", en cuanto supe que nadie podía escucharnos, comencé a contarle todo lo ocurrido "¿Eso fue todo lo que ocurrió?"
"Si, eso fue todo"