LUZ DE LUNA

Los siglos pasaron y la población de brujos y brujas aumentaba, así como también lo hacían los peligros. La muerte del ángel había ocasionado la corrupción de muchos seres que lo seguían fielmente. Un incidente en Salem causó que quedaran al descubierto y ahora fueran cazados y quemados en las hogueras.

Bajo las temibles sombras del bosque, un desesperado brujo admiraba la belleza de la luna. La anhelaba tanto que incluso se había cambiado el apellido a Moonlight. Cada noche, bajo su cálida luz, se preguntaba lo mismo: ¿cómo podría proteger a su familia y a su aquelarre? La impotencia lo llevó a cometer la peor de las injurias. Utilizó un encantamiento prohibido para hacerse más fuerte cuando la noche cayera y la luz de su amada luna brillara con más intensidad.

Su cometido se cumplió, pero la magia oscura siempre pide algo a cambio. En este caso, su humanidad. Así que, cuando el sol caía y la luna tomaba su lugar, él se transformaba en una bestia sedienta de sangre. Al principio, mordió a los cazadores, convirtiéndolos también a ellos en bestias como castigo. Algunos no soportaron su nuevo ser y se quitaron la vida, mientras que los que quedaron se convirtieron en parte de su manada.

Después de un tiempo, dejó a sus hijos y a su aquelarre para protegerlos de su maldición, un alto precio que tuvo que aceptar a cambio de su bienestar.

Más tarde, los de su especie fueron conocidos como hombres lobo o licántropos. Fueron dotados de un collar que les ayudaba a controlarse, a cambio de estar del lado de las brujas en su interminable guerra contra los seres de la oscuridad. Pero esa ya es otra historia.

Recuerden: si un día una de estas criaturas has de cruzar, un poco de brillo grisáceo te ha de ayudar

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