Cambio de planes

Era el inicio de las vacaciones de verano y con su llegada también estaba el cumpleaños de mi hija, sofia y yo habíamos decidido buscar hoteles cerca de la playa ya que nuestra pequeña quería celebrar su cumpleaños número 6 en el mar junto a nosotros; pedimos nuestras vacaciones y al tener todo listo nos dirigimos al aeropuerto.

Al ver a Liliana de nuestra mano saltando de felicidad me hizo sonreír ver a mi hija tan contenta era el mejor regalo que podía tener como padre.

Al llegar al aeropuerto con todo en mano recibi una llamada de Virginia se escuchaba asustada y su llanto era notorio atravez del altavoz.

-cristobal perdón por molestarte es que ivana esta en el hospital se rompio una pierna y no quiere que nadie la atienda; dice que si no estas no aceptara nada de los médicos y cada vez se lastima más.

Mientras Virginia hablaba podía escuchar como un eco el llanto desesperado de ivana a través del teléfono, levemente escuche la voz del médico diciendo que si la niña no dejaba de moverse su pierna recibieria más daño, Virginia colgó sin despedirse supuse qué estaba tratando de calmar a su hija, al colgar observe a mi familia que estaba tomando sus maletas con una sonrisa llena de alegría.

Al verlas no pude evitar sentir culpa pensando en la pequeña que estaba en este momento en el hospital con la pierna rota; me quedé tomando mis cosas sin mover un solo musculo pensando en lo que debería de hacer.

-cristobal que pasa ya debemos abordar_ sofia me veía con una sonrisa mientras tomaba las maletas.

Aunque deseaba estar con mi familia en el cumpleaños de mi hija y su primera vez en el mar algo en mi interior también me detenía en el aeropuerto al conocer la vida de Virginia sabía que para ella trabajar y cuidar de su hija sería un problema y algo en mi cabeza me decía que no podía dejarla sola.

-sofia tengo que quedarme, ivana se lastimo una pierna y quiere verme; escucha vallan ustedes si, les prometo que las alcanzaré_ tome los hombros de sofia quien me veía con confusión.

-pero que hay de el cumpleaños de Liliana_ me decía sin soltar a nuestra hija.

Acaricie la cabeza de mi hija que me veía con ternura_ no te preocupes llegare tan pronto termine de visitar a ivana, te prometo que no me perderé el cumpleaños de mi princesa por nada.

Le di un beso de despedida a sofia y a mi hija tomando un taxi desde donde llame a Virginia para saber en que hospital estaban, al llegar y verla llorando le pedí que me llevara a ver a su hija, en cuanto me vio su carita cambio calmando sus movimientos qué solo hacían que se lastimara más.

-señor usted es el padre de la menor_ me decía un doctor que se acercaba a mi con el rostro cansado.

Antes de contestar ivana le respondió con una voz inocente_ yo lo veo como uno

Gire mi cabeza hacia la cama desde donde aquella pequeña lastimada me sonreía_ no no soy el padre pero me haré cargo de todo lo que haga falta.

Los médicos atendieron a ivana que había dejado de llorar, querían llevarla para hacerle un ultrasonido y debían de operarla ya que tenia la pierna rota antes de salir la pequeña me veía con la mirada triste_ me prometes qué no te vas a ir.

Me decía estirando su mano hacia mi para tomarla, al verla pensaba en mi familia; pero al notar la perspectiva sabía que no podía elegir, sofia y Liliana estaban en un avión dirigiéndose en este momento hacia un clima tropical mientras una pequeña de la misma edad que mi princesa tenía que pasar por un dolor que ni siquiera un adulto soporta, sabía que era el cumpleaños de mi hija pero no podía dejar a ivana al verla pensé que quedarme solo esa noche no seria un problema; podría celebrar con ellas en cuanto volara al hotel_ te lo prometo.

Llame a mi esposa que no respondió a mi primera llamada lo cual me altero ya que sofia nunca apagaba el teléfono y siempre me respondia; cuando volví a llamar algo nervioso la voz de Virginia me interrumpió al separar el teléfono de mi oído no me di cuanta de que sofia ya me había respondido.

Virginia me hablaba con dulzura mientras me agradecía por haber llegado al hospital_ gracias por venir a ver a mi hija no quería dejarse revisar hasta que llegaras y los médicos no sabían como controlarla, me disculpo por molestarte espero no haber importunado en nada.

Baje mi teléfono sin haber colgado la llamada lo cual fue mi primer error_ no hay problema, no habia nada importante; sabes que si me necesitas te ayúdare.

Al otro lado de la línea sofia escucho las palabras de cristobal haciendo que su corazón comenzará a doler( no había nada importante, el cumpleaños de su hija no era importante) ella colgó evitando llorar pero sintiendo un ardor en la garganta qué le impedía hablar, volteo a ver a su pequeña que coloreaba un libro de princesas, acariciaba su cabello viéndo lo inocente que era pensó que si para cristobal el día en que ella los convirtió en padres no era importante ella no tenía porque pensar igual.

Cristobal hablaba con Virginia olvidando por completo a su familia que ya había aterrizado en el aeropuerto de acapulco, sofia tomo las maletas pidiendo un taxi qué las llevo al hotel donde en el cuarto ella ayudo a su pequeña a cambiarse y se dirigio a la playa dejando a un lado y sin tocar la maleta de cristobal.

Mientras tanto cristobal esperaba a que ivana regresara al cuarto olvidando la llamada que comenzaría la separación con las personas que más amaba en el mundo su familia, al esperar en la habitación mientras Virginia le invitaba un café vio su teléfono observando en las cuentas de su esposa que estaba feliz con su pequeña Liliana cantándole una canción de cumpleaños, al verla recordó aquella llamada que corto sintiéndose un estúpido al recordar que despues de eso no volvio a contactarlas en todo el dia.

Eran las 8:35 de la noche cuando sofia respondió sin un toque de suavidad o dulzura en su voz_ cristobal.

Al escuchar la manera en la que respondia y el como me llamaba por mi nombre lo sabía estaba molesta y no podía culparla la deje en el aeropuerto en el cumpleaños de nuestra hija_ mi cielo buenas noches espero que hayan llegado bien como esta mi princesa.