Capítulo 10

¿Lex? Ni siquiera sabía que era el apodo de Alex. Pero de verdad, ¿todo esto es por una simple foto?

Tuve que lavarme el pelo tres veces para que saliera todo ese líquido pegajoso y darme una ducha con el agua hirviendo para dejar de sentirme asquerosa y de llorar.

Ahora estaba abrazada a Max. 

Tenía cientos de notificaciones, y una me rodeó el pecho y apretó con fuerza.

Contuve la respiración cuando leí unos cuantos.

 ¡¡¡Pedazo de cerda!!!

Eres nefasta 🤢

¡Das asco, pedazo de escoria!

¿De verdad te crees mejor que Soph?

!!Zorra!!

JAJAJA ya arréglate la nariz florista de cuarta

¡Solo eres una cazafortunas!

Me habían etiquetado en infinidad de vídeos y fotos.

Cuando seguí bajando, vi que se me etiquetaba especialmente a menudo en un vídeo. Hice clic y… Me quedé sin respiración. En la pantalla se me veía con la vieja y usada sudadera, volviéndome hacia las chicas que me habían seguido. Una de ellas me gritaba y después me lanzaba el café a la cara.

Otra notificación llegó.

Sabía quién era, de tanto ver ese numero me lo he aprendido.

No quiero hablar con él.

—Emma —dijo una voz desde la puerta, y levanté la cabeza.

 Sarah entró  en mi habitación con aire vacilante.

 Me incorporé y clavé la vista cubierta de lágrimas en ella, mientras sostenía en alto el móvil. 

—Me odian —afirmé con la voz rota.

—Oh cariño, ven aquí– se acercó de brazos abiertos. 

Claramente no pude rechazar la oferta. De verdad lo necesitaba, quizás más que nada.

—Tranquila linda. - Sarah dejó un beso en mi coronilla– Esas malditas envidiosas solo quieren llamar la atención, creen que saben que es lo mejor para Lex solo por ser sus estúpidas fans.

— Tú formas parte de sus fans.– se alejó para mirarme indignada

— ¿Me estás llamando estúpida, loca y envidiosa?– la mire con una ceja enarcada– bueno, puede que esté algo loca y estúpida. Pero no soy envidiosa, por lo menos no te envidiaría por besar semejante bombón.

– No me bese a nadie– le recuerdo y ella solo rueda sus ojos

– Y por ese tipo de cosas es que pienso que eres algo tonta– golpeé su hombro mientras apenas sonreía.

– Anda ya. Levanta y vamos a cenar antes que Max suba nuevamente a la mesa y nos robe la comida- estaba por ponerme de pie cuando mi teléfono volvió a sonar, y al verme dudar decidió contestar por mí.

– Hola. Habla Sarah, la mejor amiga de Emma. Si necesitas dejar un mensaje con gusto se lo daré, pero en este momento no se encuentra disponible.– yo solo la observó mientras juega con un mechón de cabello– Ahora sí eres una de esas malditas locas desquiciadas que llaman para acosar y seguir insultando a mi amiga, juro que voy a igualar tu nivel de demencia y haré lo necesario para encontrarte y ponerte en tú maldito lugar pedazo de basura mal desechada.

La veo soltar un suspiro para luego cambiar su rostro de enfado a uno de total vergüenza y arrepentimiento.

 Yo solo quiero reír a carcajadas al ver que por fin se dió cuenta de quién estaba al otro lado de la línea.

– Oh, entonces sí que se encuentra disponible. Emma, atiende la llamada de una vez por todas y me ahorraré más penas.

– Debiste preguntar antes de atender la llamada - digo burlándome a lo que responde mostrándome su dedo medio.

– Solo atiende la llamada y luego ven a cenar – y la ví desaparecer por la puerta 

–¿Emma?– parecía algo aliviado 

— Sisi, soy yo. Por cierto, siento lo de hace un momento

– ¿Siempre que te llame seré atendido de igual forma?

– No, jamás atiende de esa manera. Solo si se lo pido

–Ah.

Esa fue su respuesta y para no quedarnos en absoluto silencio tenía que decir algo pero no sabía muy bien qué decir, así que dije lo primero que se me vino a la cabeza.

– No hay razones.

–¿Razones?

– Para llamarme– suelto un suspiro al notar que sigue sin entender – preguntaste si siempre que llames serás atendido de esa forma.

– No me di cuenta.

Silencio nuevamente, esto ya se estaba volviendo un poco incómodo. Carraspee para llamar su atención.

— Entonces, por qué tanta insistencia en contactarme? 

— Quería disculparme por lo de las fotos en la biblioteca y  también por el problema que te causa..

—No tiene sentido- dije interrumpiendolo 

Antes de que pudiera agregar algo más, decidí aclararle las cosas.

—Alexandro no tiene sentido que te disculpes por algo que tú no hiciste- lo escuché soltar un suspiro– sí, tus fans son locas e inmaduras pero no por eso no significa que debas atribuirse la culpa de lo que me hicieron.