UN GESTO DICE MÁS QUE MIL PALABRAS

De la palabra “Gesto” procede una variada lista de sinónimos, entre ellos se pueden encontrar:

- Mueca, Guiño, Mímica…

- Rasgos, Actitud, Detalle, Acción.

- Expresión, Rostro, Semblante, Apariencia y Aire.

Analizando todas estas palabras, me atrevo a decir que un gesto es aquella acción que no necesita intervención verbal para ser entendida. Aunque a veces necesitaras más que un gesto para no enviar o recibir información equivocada, si lo empleamos de manera correcta este sería más que suficiente para nosotros y para quien lo recibe, todo está en el equilibrio.

Por otra parte, las palabras bien pueden ser sagradas y benditas o vacías y destructivas, todo depende del uso que le demos. Yo en lo personal me he vuelto muy amante de las acciones, aunque lo correcto debería ser un 50% palabras y un 50% acciones, ambas trabajando  conjuntamente y de esta manera encaminarnos hacia una comunicación más sólida.

Muchos personas manejan la teoría de 20% palabras y 80% acciones, la realidad de estas cifras es que no son equitativas y aunque nos guste mucho más la acción que el habla, no debemos menos preciar el poder que tiene una buena comunicación verbal.

Cada individuo trae consigo una educación diferente, una cultura, un idioma, un lenguaje distinto, allí se adicionan sus pensamientos, y para muchos sus sueños e aspiraciones. No todos podrán ver el mundo bajo la misma perspectiva que tú.

Sin embargo todos han experimentad al menos una vez en su vida cada una de las seis emociones básicas

 No importa si un individuo habla un idioma distinto al tuyo, si este se encuentra molesto, asustado, triste o feliz, posiblemente su lenguaje corporal se te haga muy familiar, por ende reconocerás una alteración en su conducta y es allí donde entenderás que aunque las palabras vengan vacías hay un cuerpo que tiene mucho que decir, en este caso no estaban vacías solo distintas a las tuyas.

Ahora, ¿Por qué hablo de un equilibrio? Si el lenguaje corporal fuese más que suficiente para entendernos, no se hubiera creado el lenguaje de señas para las personas con discapacidad auditiva, este método fue diseñado para poder entender las necesidades, los pensamientos y criterios propios de estas personas.

Por esto señalo que el lenguaje verbal, también puede ser un arte, como dicta el dicho “Hablando se entiende la gente”, si aprendemos a hablar de un manera del cual las personas puedan seguirnos y entender claramente nuestros puntos a tratar, podemos decir que hemos captado la importancia del lenguaje verbal.