Damiano Westbrook

Algunos amigos me invitaron a una hoguera junto al lago. Acabo de llegar hoy y solo quería relajarme.

"¿vas a la hoguera o qué?", me preguntó Mia.

"Si voy. Pero solo por una hora y luego voy me regreso. Estoy cansado", respondí.

"Por supuesto, abuelo". Ella puso los ojos en blanco.

Me reí entre dientes. "Veintiocho, no es viejo, Mia. Además, tuve que hacer una gran cirugía hoy, y todo lo que quería hacer era dormir. O al menos descansar hasta la fiesta".

"Está bien, Dr. Westbrook. Me iré para que pueda descansar".

"Gracias.".

Ella se fue de mi habitación después de eso. Mi hermana quiere que yo conozca a alguien. Que siente cabeza y le dé muchos sobrinos y sobrinas. Está loca. Ser médico me da poco tiempo para tener una relación romántica. Ni siquiera estoy seguro si quiero hijos. No quiero ataduras.

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"Bueno, bueno, finalmente lo lograste". Mi amigo, Roman, me saludó.

"Agradece que mi hermana me despertó. Casi cometí un asesinato". Me queje. "Un whisky, por favor".

"Déjame adivinar, Mia te despertó de la única manera loca que ella sabe.".

"Así es". Le dije mientras el bartender me pasaba el whisky.

A mi hermana le gusta despertar a la gente agarrando una olla y una cuchara de madera, y luego comienza a hacer ruido. Ella solo hace esto cuando alguien se le pega las colchas. Gracias a Dios, ya no vivimos en la misma casa. Le deseo a quien quiera que se case con mi hermana, toda la suerte del Mundo.

"Lo siento". Una chica dijo mientras se topaba conmigo. "No estoy borracha, solo necesito el baño con urgencia, y tú estabas en mi camino".

Me reí entre dientes. "No te preocupes, pero es mejor que te apresures porque la línea se está haciendo larga".

"Mierda, tengo que irme. Nos vemos luego extraño". Se despidió y luego se fue a toda prisa.

"Bueno, carajo".

"Estoy de acuerdo, tan hermosa y joven", dijo Roman.

"Sí, y ella va a ser mía". Sonreí.

"Como siempre.". Él puso los ojos en blanco.

Me reí

"Han pasado seis meses desde que tuve sexo... Estoy en el hospital 24/7".

"Muy bien, las cosas que hacemos por un amigo necesitado". Él suspiró. "Ya que te vas a quedar con esa chica, voy a buscarme a otra."

Se fue y solo éramos yo y mi whisky. Exactamente lo que necesito ahora mismo. Me encanta mi trabajo, pero necesitaba unas vacaciones. Terminé mi bebida y fui al baño de hombres.

"¡Déjame ir!" Esa es la misma chica que se topó conmigo.

"Entras en el baño de hombres, eso es pedir problemas". El hombre estaba muy borracho.

"La fila para el baño de las chicas es larga. Este baño estaba vacío, así que vine aquí a orinar". Ella resopló.

"Cariño, no puedes desaparecerte así". La llevé hacia mí. "Mi esposa está embarazada, cuando necesita ir, no le importa si es un baño de hombres o mujeres".

"Lo que él dijo". Ella apoyó su mano sobre mis abdominales. Las cosas que quiero hacerle a esta chica.

"Bueno, acepto un trío".

"Eso nunca va a suceder, no comparto lo que es mio. Y ella es mía". Le dije entre dientes.

Salimos del baño y le dijimos a la seguridad que sacara a ese imbécil del baño.

"Muchas gracias por eso, esposo". Se rió.

Me reí. "De nada. Necesito mantener a mi esposa y a mi bebé a salvo".

Ella se rió. "Me tomastes por sorpresa con todo lo de esposa y el embarazo allí. Pero gracias, otro minuto y él se habría aprovechado de mí".

"Gracias a Dios, eso no sucedió". Sonreí. "Damiano".

"Aurora". Ella sonrió mientras nos dábamos la mano.

"Bueno, esta fiesta no es mi escena, si estás dispuesta, podemos tener una fiesta propia. Privado y sin pendejos".

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Le dije a mi amigo que me iba con Aurora. Me aseguré de informar a mi hermana que me iba. Me envió el emoji del dedo medio.

"Buena casa", dijo mientras cerraba la puerta.

"Gracias, eres bienvenida en cualquier momento".

"La mía está a dos cuadras de distancia", dijo mientras chocaba contra el sofá. "Estoy bien".

"Creo que esos cócteles te están afectando", dije mientras me acercaba a ella.

"No eran fuertes, en realidad eran muy dulces". Ella tenía una sonrisa tonta.

Me reí. "Sabes que esos suelen ser los más fuertes".

"Pues ahora ya lo sé".

"¿Quieres algo de beber o comer?", Pregunté mientras me sentaba a su lado.

"Nunca he probado el whisky. ¿Es bueno?"

"A mi me gusta. Algunas personas lo encuentran asqueroso y otros dicen que huele a queso podrido". Le respondí. "Advertencia, mezclar bebidas te causará una resaca masiva".

"Fueron solo 5 cócteles".

Sacudí la cabeza. En la mañana va a tener una resaca terrible.

"Salud". Sonaron las copas.

"Oh wow". Ella hizo una cara amarga. "Definitivamente es fuerte, pero me gusta".

"¿Qué te hizo confiar en mí lo suficiente?"

"Me distes buena vibra. Y tengo alcohol en mi sistema".

Agarré su barbilla y la hice mirar hacia mí. "Por favor, dime que no haces esto en todas las fiestas".

"No lo hago. Esta es la primera vez que bebo alcohol".

Sus labios gruesos me están volviendo loco. Quiero besarlos y luego morderlos.

"Tengo una confesión". Se sentó en mi regazo y luego  envolvió los brazos alrededor de mi cuello.

Aurora ¿estás tratando de matarme? Se movía demasiado, me pongo duro.

"Ni siquiera tengo 21 años", se rió. "Tengo dieciocho. Aunque mi cumpleaños es en cinco meses, asi que me estoy acercando a los 21".

Suspiré con alivio. "Bueno, al menos tienes dieciocho años. Lo cual es algo bueno porque de lo contrario estaría en camino a la cárcel".

"No podemos permitir eso". Se cubrio la boca

Me reí. "¿Siempre eres así, o es el alcohol?"

"Un poco de ambos".

"Bueno, ya que estamos confesando, nada me gustaría más que desnudarte y follarte toda la noche. Pero estás un poco borracha y no me voy aprovechar de eso". Le besé el cuello. Eso es lo más lejos que llegare hoy.