Capítulo 9

LUCIA

¿Para que habrá llamado mi madre a Felipe? La curiosidad me está matando. ¿Cuándo vendrá para preguntarle?

—¡Oigan! —todos miramos a Leonardo—acabo de tener una visión...que envidia...

Cuando estaba a punto de decirlo, entra Felipe con una sonrisa de oreja a oreja en el rostro.

—¡Mi tía Aura me invitó a un caso con ellos!

—¿Qué? —me levanto con enojo.

—Alguien esta furiosa—se burla Fátima.

—Y envidiosa—agrega riendo Andrea.

"Cállense"—les digo mentalmente a la vez de que le lanzo una mirada amenazadora.

No tengo envidia, es más estoy muy feliz por él, pero ¿por qué no yo? Quiero decir, hace mucho he querido ir a un caso con ellos, ver cómo trabajan y siempre me dicen que no, que no estoy lista para ir a un caso tan fuerte como a los que ellos van.

Si les reclamo, pensarán que estoy haciendo berrinche de niña caprichosa, pero es algo que deseo hace mucho.

—Lucia—se acerca tomándome por los hombros—sé que tu querías ir y me siento mal por ser yo el que vaya...

—No, si te escogieron es por algo, estoy muy feliz por ti—sonrío con genuinidad y lo abrazo.

De verdad estoy feliz por él.

Es algo que todos deseamos, trabajar con los fundadores de Caza Fantasmas que, aunque nuestros tíos también han sido fundadores, no han vuelto a trabajar en la agencia y el afortunado es Felipe, que podrá ir con mis padres.

Vuelvo a la cama junto a Andrea que lee una revista de moda que claramente no es mía, es de Grace. Prácticamente la mitad de la habitación de Grace está en la mía, cada vez que viene a dormir, trae algo nuevo y no se lleva nada.

Un mensaje en el celular me saca de mis pensamientos, lo tomo y salgo de la habitación bajo la mirada de todos. Se que es sospechoso lo que hago porque nunca suelo salir por un mensaje, pero si lo leía ahí me iban a descubrir leyendo mi mente e incluso viendo mi rostro.

Abro el mensaje y sonrió instantáneamente.

"Pequeña, tengamos una cita mañana"

Me muevo locamente de la emoción, nunca había tenido novio por obvias razones y tenerlo ahora me emociona. Pero... ¿Cómo respondo?

"Sí"

No, muy insípido.

"Lo esperaré con ansias"

Never, demasiado desesperada.

"Me gusta la idea"

Si ese es, lo envié y esperé una respuesta que llegó segundos después.

"¿Dónde estás? ¿puedo ir a verte?"

Mi sonrisa no se ha borrado de la felicidad que siento de solo imaginar como él debe estar escribiéndome ese mensaje con una sonrisa.

"Estoy encerrada en el baño, mis primos están en la habitación y mis tíos siguen abajo

Tendrás que esperar a mañana"

Lo envió y espero nuevamente una respuesta.

"¡Rayos! ni siquiera pude besarte hoy"

Rio leyendo ese mensaje.

Mentalmente me preparo para volver a la habitación, pero antes de eso le mando un mensaje a Grace diciéndole que me cubra mañana, en caso de que mis primos o mis padres la llamen.

Obtuve un corto interrogatorio y solté todo como lora cantando, pero en fin ella lo intuyó y tuvo razón.

Vuelvo a mi habitación y todos me miran fijamente.

—¿Por qué? —frunzo el ceño.

—Porque ¿Qué?

Me siento en la silla de mi escritorio, miro a las chicas que me miran diciéndome mentalmente que porque salí a contestar cuando nunca lo hago.

—Ah, es que Grace me llamó diciéndome algo de un chico...

—¿Yo? —pregunta Felipe.

—Quisieras...no quería que nadie escuchara, ya saben cosas de chicas—miro a mis primas—"ustedes saben"—asintieron.

///

Hoy ayudé a mi madre a preparar el desayuno, mientras que mi padre salió a correr con mis tíos. Se han dedicado a hablar de que quieren estar en forma nuevamente y me parece super bien ya que mi tío Jason es el más guapo y está apagando con su belleza al resto de mis tíos.

Una vez listo el desayuno mi padre aparece como si lo hubiéramos invocado.

Mi madre y yo lo miramos con asco, esta todo sudoroso. Se sienta en su silla y devora el plato como si no hubiera probado bocado en dos semanas. Levanta la mirada y se encoge de hombros volviendo a comer como animal.

—Cariño, tu padre y yo lo hemos pensado muy bien y decidimos que nos acompañes a un caso, sé que sabes que Felipe irá y no sabíamos si llevarte, pero creo que será un buen momento para saber en que nivel estas con tus habilidades—debería estar feliz, pero estoy enojada porque no confían en mí.