Capítulo 14: por ti

Capítulo 14: por ti

Blanca—Eso ya lo veremos, me pregunto si Lósif podrá comerse a sí mismo—al terminar de decir estas palabras, dejó al descubierto la ropa interior que llevaba puesta, dejando los ojos del chico de piel oscura mirándola. Blanca sintió un escalofrío al ver al chico acercarse rápidamente y ya estaba a su lado. Ella sostenía ambas manos.

El chico mayor sometió a la chica y se acercó para besarla en los labios, sintiendo la respiración del otro, un beso iniciado por la lujuria.
En este punto, el chico intentaba no convertirse en un animal que actúa por instinto cuando vio que la chica puso una de sus manos sobre su pierna y se desplomó. Lósif supo que debía detenerse en ese momento o no habría vuelta atrás.

Lósif—Basta, prepárate esta noche para ir a curarte.
El chico se retiró como si la chica fuera a quemarse al tacto y rápidamente dijo esto para salir por la puerta.

La niña quedó con las mejillas enrojecidas y una respiración dificultosa y algo sudorosa.

Blanca observó el lugar donde estaba Lósif.

Lósif estaba preparado y listo para partir; ahora la noche había caído sobre sus cabezas. La luna llena estaba en lo alto mirándonos como hormigas.

Lósif estaba un poco preocupado por cómo iban a salir. Estaba vestido con una capa negra, botas de cuero, pantalón negro, un suéter verde suelto y una capucha negra para rematarlo y cubrir su identidad. Llevaba una sencilla máscara hecha de tela negra con solo dos agujeros en los ojos.

Él estaba abajo en la cocina esperando a Blanca. Observó a la muchacha que se acercaba cubierta de pies a cabeza con un largo velo. Se asustó un poco al verla llegar de repente desde arriba de la habitación. Me imagino que era la susodicha llorona que salió en México.

Lósif—Blanca, me asustaste un poco. Tu disfraz se ve aterrador, realmente todo en blanco y, aparte del vestido con tu cabello, te veo aterradora.

Blanca estaba un poco dudosa si lo que decía el chico moreno era bueno o malo. Le dice que le parece aterrador. Además, yo estaba confundida con lo del llorón.

Blanca—Lósif, ¿qué es una mujer llorona?
preguntó muy confundida por aquella extraña frase. A veces escuchaba al chico decir palabras raras, aunque ella no le decía nada al chico para no parecer una niña tonta.

Lósif—La llorona es el alma perdida de una mujer mexicana, que asesinó a sus hijos por una traición amorosa de su pareja, un hombre español. La mujer perdió un tornillo debido a la rabia al enterarse de la traición y aparece en algunos ríos o lagos donde mató a sus hijos.

Blanca—Lósif, entiendo bien, ¿qué es un mexicano y un español?—volvió.
A preguntar a la hermosa muchacha de cabello blanco como la nieve y piel de porcelana con vergüenza en todo su rostro. Sus mejillas estaban sonrojadas, aunque no se podían ver por el velo.

Lósif—no te preocupes, un mexicano es una especie, como te explico. ¡Lo tengo! Blanca, ya sabes cómo nos dividimos, humanos, semihumanos, magos, etc. Es lo mismo, son razas diferentes, pero son lo mismo, solo se diferencian en costumbres, entre otras cosas, y recuerda que el peor enemigo de un mexicano es otro mexicano o algo así.

Blanca —Entendido, pero esas criaturas son peligrosas y tendrán algún poder como los magos, ya que mencionaste que también pueden ser iguales que los magos. Los semihumanos tienen partes de animales.

Lósif —Bueno, puedes decir que sí y que no, pero depende de cómo los veas; en su mayoría los mexicanos somos muy ingeniosos y el poder, como tú lo llamas, depende de quién sea mexicano; si es uno que viene de la pobreza y sabe lo que es soportar el hambre, esa persona ve el mundo como realmente es y "el poder" es ser un trabajador por sus objetivos, sean buenos o malos, no se rinde hasta lograrlos o morir.
Lósif se quedó en silencio y observó a la muchacha que digería la información; luego decidió continuar y agregar algo más.

Lósif—pero, recuerda, todos son humanos de la misma especie y aún así hay muchas desigualdades, discriminación, asesinatos, traiciones, pobreza, entre otras cosas. Algunas personas no recuerdan que vamos a la tierra, tarde o temprano.

Blanca—Entonces, por eso quieres ayudar a la gente enferma que no tiene dinero; eres bueno, Lósif.

La niña se acercó a donde estaba el niño de piel oscura y de inmediato quitó el velo que cubría el hermoso rostro de la niña y se acercó a donde el niño tenía el rostro cubierto con una tela. Un beso de la niña fue colocado suavemente donde estaría lo que está en la mejilla del niño.

Lósif estaba feliz de recibir esas muestras de apoyo por parte de la muchacha, sabía que eso era algo grande, en su primera vida no tuvo la suerte de tener una novia, lo más cerca que llego a tener fue la amiga que murió por suicidio, y Lósif se arrepiente hasta ahora está muy triste, siempre le recuerda esos momentos tan bonitos que vivió, Lósif sabe que si seguía viviendo podría convertirse en un parásito de la sociedad o convertirse en un soldado común, él solía ser de piel blanca y algo guapo, con ojos medio cerrados y cara redonda, además de orejas algo puntiagudas, pero por cosas del destino su vida sufrió un fuerte golpe donde quedó huérfano y tendría que vivir solo en un mundo de mierda y luego murió a los 19 años por culpa de algún pendejo y ahora antes de morir su aspecto era deprimente, con una cara delgada y muchas bolsas bajo los ojos, se veía muy demacrado y en ocasiones lo confundían con un criminal.

Blanca estaba viendo las diferentes emociones de Lósif. Bueno, ella está tratando de ver las emociones a través de los ojos del niño.

Lósif—perdón, me volví loco, gracias por el beso que me diste, te lo agradezco mucho—.

Blanca—ejem, ejem, je, je, gracias Lósif—

Lósif—parece que estamos listos, ahora Blanca tendremos cuidado con la oscuridad como único testigo—

Blanca —Lósif, eso fue genial, sí, vamos entonces, hace mucho tiempo cuando un nigromante errante atacó el reino y mató a muchas personas inocentes, incluidos vagabundos en el callejón Boko, y varios caballeros heroicos murieron en el cumplimiento del deber. Por esa razón, el Capitán José estaba enojado y actuó de esa manera.