Capítulo 2

Dos meses después

Desde qué vivo con Lila mi vida ha sido más interesante, hemos creado un vínculo muy grande, sé que es poco el tiempo, pero para crear una relación de amistad no es necesario 5 años de conocerse, lo necesario es la intención y las dos nos queremos mucho.

Lila trabaja en la empresa como mi secretaria y me encanta el tiempo que pasamos juntas, hoy no la vi antes de venir a la empresa ya que salí muy temprano para arreglar algunas cosas con mi padre.

-Hola -respondo el teléfono que suena sin control.

-Hola Zoe, solo llamaba para saludarte, ¿cómo estás? -escuché a Lila del otro lado de la línea.

-yo estoy bien mi amor ¿y tú?

-terminando tu agenda para el día de mañana, tienes muchas reuniones, y personas que quieren que sea la mismísima Zoe Lewis quien organice su fiesta.

-Sabes que no puedo organizar la fiesta de todos, aquí tenemos muchos organizadores, que son mucho mejores que yo.

-No te hagas la buena tu sabes que aquí no hay nadie mejor que tú.

-Ay ya no empieces, y ven a mi oficina y hablamos sobre eso.

-Ok jefa, a su orden.

- cuantas veces te tengo que decir que no me digas je... -oh no lo puedo creer que corto la llamada, vi cuando entró a mi oficina muy despreocupada y con unas carpetas en brazos.

-Me cortaste la llamada y me dejaste hablando sola -dije ofendida.

-No te preocupes, no creo que tu ego sea tan fácil de herir. -Dijo burlona.

-Te odio.

-Yo te amo, pero no estamos aquí para eso, a veces creo que la jefa aquí soy yo  -dijo agarrando su barbilla.

-Pero luego te acuerdas que no es así, y la jefa es tu mejor amiga, y se te pasa.

-Cierto, ok a trabajar, aquí tengo 15 solicitud de diferentes fiestas, y como sabemos solo puedes elegir 2, ya que no tenemos mucho tiempo y todas son para las fiestas de Navidad.

-Ok ¿cuáles son más conveniente?

-aquí hay una de Jennifer López que quiere celebrar la fiesta de Navidad con su familia y con la familia de su esposo Alex Rodríguez, también tenemos a la Sra. Cooper con el compromiso de su hijo mayor y la ultima es de la Academia Juilliard celebra el recital de invierno.

-Ok muy difícil, tres opciones muy tentativas, pero creo que me quedare con las dos últimas, ya he trabajado con Jennifer López y es encantadora, pero escribe un mensaje diciendo 
que le recomiendo, a Ámbar Hudson, y que cualquier cosa me llame y puedo darle el visto bueno.

-Ok le escribiré a los aceptados para agregar una cita con usted.

-Sip muchas gracias Lila.

-No hay de que, es mi trabajo.

-Ok nos vemos en la tarde que tengo algo que hacer.

Lila salió de mi oficina, y yo empecé a ver los nuevos diseños para la época navideña.

*****
Ya estoy muy cansada, y estos tacones me traen muerta, ¿quieren saber el por qué de mi desdicha? bueno pues se los diré, mi hermosa amiga Lila me convenció de venir al centro comercial, a comprar un libro que salió nuevo de su escritor favorito, nada más y nada menos que Carlos Cuauhtémoc Sánchez, y bueno vio unos vestidos en una tienda y no pude evitar entrar con ella, la cosa es que no se quedó y hubo un cambio de planes, y la tarde de películas se convirtió en tarde de compras ¡heeeee, que emoción!. (Nótese el sarcasmo).

-¿Ya nos podemos ir? No aguanto mis pies y mañana tenemos mucho trabajo. -Dije sentándome en una banca.

-No seas aburrida, vamos por un helado -dijo Lila con una sonrisa.

-Solo si es de chocolate, sabes que odio el helado de Ron -Hice una mueca de asco.

-Tienes un mal gusto porque ese es mejor helado.

-Si tú lo dices alcohólica, pero quiero chocolate.

-Ok tendrás tu helado de chocolate, caprichosa. -Le mostré la lengua en gesto infantil, no me culpen es inevitable.

Llegamos a la heladería y compramos los helados, nos sentamos en una mesa para 4 ya que no había desocupadas para dos, hablamos mientras comemos, es lindo estar con Lila así, hace un tiempo solo salía de casa para trabajar y comprar la despensa, con Lila todo es diferente.

Sentí la presencia de alguien a mi lado y levante la cabeza para encontrarme con dos hombres altos y de buen ver, uno con ojos cafés y el otro con ojos grises.

-Hola señoritas, ¿les molestaría que nos sentemos con ustedes? -Pregunto el de ojos cafés.

-Hay muchas mesas vacías -dije sin ánimo.

-Zoe ¿qué te pasa? Disculpen, si siéntense por favor -dijo Lila enojada conmigo, cuando estuvieron sentados el primero en hablar fue el de ojos cafés.

-Mi nombre es Leonardo, pero me pueden decir Leo y él es mi primo Arturo -dijo señalando al de ojos grises.

-Mucho gusto -dijo Arturo muy tímido.

-El gusto es mío, mi nombre es Lila, y ella es mi mejor amiga Zoe  -dijo Lila sonrojándose, ¿enserio?

-¿y que hacen ustedes por estos lados? -Pregunto leo.

-Vivimos cerca de aquí, y andamos en una tarde de compras.

-¿A que se dedican? -Pregunto Arturo.

-Yo soy secretaria y ella es mi jefa ¿y ustedes? -dijo Lila señalándome.

-yo soy Arquitecto -dijo leo, buena profesión.

-Y yo soy ingeniero industrial recién graduado -dijo Arturo

-me alegra mucho sus profesiones, pero ya es hora de irnos -dije poniéndome de pie.

-Pero si apenas llegamos -dijo Lila haciendo un berrinche.

-Si quieres te quedas pero yo me voy, adiós caballeros -dije con una sonrisa fingida y saliendo de la heladería con mis bolsas en mano.

-Espérame, -dijo lila corriendo para alcanzarme cuando llegó a mi lado me miró enojada -ya sé porque no tienes novio.

-¿A sí, porque? -Dije burlona.

-Porque eres una aburrida y antisocial.

-No quiero novio, contigo me vasta.

-Pues a mí no, yo quiero tener hijos y contigo no serán.

-¿Por qué no?, hacemos bonita pareja -no aguante la riza, y todos los que estaban en el estacionamiento me miraron mal.