Nueva York II.5

Estando en el barco, Leobardo se me acerca y se sienta a lado  mio.

• Sé gustan, se gustan - veo a Emiliano y a Uvaldo con el ceño fruncido y con una mirada de quererlos matar. A mí no me gusta Leobardo es un chico cool, pero no me atrae.
• ¡CALLENSE! - les grito
• Aquí hay amor, amor amor amor- sigue Esteban
• ¡¡Esteban ya cállate!!

Leobardo me ve con cara de perro lastimado. Es que ósea no me gusta, no quiero tener un novio no quiero nada. No quiero que pase lo mismo que con Jorge, aparte yo vine a hacer amigos y punto.

Llegamos al hotel, voy caminando junto con Esmeralda platicando cuando Esteban se mete entre medio de nosotras para correr al elevador. Bueno al parecer los hombres no maduran nunca.

• ¿Quién se baña primero? - digo
• No se como quieras
• Si quieres yo, mientras puedes hablar con tu novio - ella asiente y mientras va sacando las cosas que va a usar.

Salgo del baño con mi vestido negro puesto, este me llega hasta los pies, tiene tirantes los cuales se cruzan en la espalda y llegan hasta mi espalda baja. Salgo descalza y decido maquillarme afuera en el espejo que hay en el pasillo de la habitación.

• Esme - la llamó y ella voltea, me da una sonrisa -. Ya te puedes bañar.
• Okay, ahorita salgo.

Busco peinados en Pinterest en mi celular, observo uno de media cola con unos mechones sueltos al rededor de mi cara. De maquillaje fue algo sutil. Muy natural de echo.

• Montse.
• Mande.
• Ayúdame a subirme el cierre, plis.
• Listo.
• Gracias.
• ¿A qué hora teníamos que estar en el living?
• No tengo la menor idea.
• Déjame marcar al cuarto de Eva para preguntarle.

Me dirijo hacia el cuarto donde hay un teléfono. Marco el numero de habitación. Me contestan al quinto tono y preguntan quién es.

• Soy yo, Montserrat.
• Dime Montse
• Emm, solo para preguntarle ¿A qué hora tenemos que estar en living?
• A las 6
• Gracias
• De nada

Cuelgo el teléfono y le digo la respuesta que me dio Eva. Esme y yo ya estando listas empezamos a platicar, porque falta tiempo para que sean las 6, exactamente falta 1 hora.

• Sabes, creo que las niñas se van a maquillar poquito - dice Esme
• JAJAJAJA, no lo dudo, todas haríamos eso. Romper las reglas.

Así seguimos hasta que se llega la hora. Nos ponemos los zapatos y bajamos al living donde vemos a todos los hombres.

• Que lindas se ven - nos dice Eva y Rosy.
• Gracias - decimos al unísono.

Partimos hacia el muelle donde se encuentra el yate donde pasaremos la velada. Veo a través de la ventana la ciudad de New York.

Bajamos del camion y nos subimos al yate. Nos dicen que nuestra reservación es en el segundo piso. Los chico quieren que me siente con ellos y para no ser descortés lo hago. Así que le digo a Esme para que siga y al parecer se sienta con Esteban.

• Bueno ¿De qué hablamos? - dice Uvaldo.
• Bueno pues no tengo la menor idea - digo penosa.

Al final terminamos con un tema y así hablamos hasta que nos dicen qué nos podemos parar y poder ir salir para ver la ciudad de New York de noche. Al salir me cala el fresco puesto que mi vestido es de tirantes y en la espalda tiene un espacio al descubierto.

• Hay que tomarnos fotos - me dice Esme y me jala del brazo.
• Ey, espera.

No me hace caso y nos paramos a observar la ciudad y cuando pasamos por el Brooklyn Bridge, tomamos unas fotos porque se ve muy hermoso, igual que a la ciudad. Entro porque no aguanto el frio y me siento con las maestras a platicar cosas triviales.

• Chicos ya se pueden servir del buffet - dice Eva.

Espero junto con las maestras a que los demás se sirvan, ya que no me gusta que estén todos juntos. Me levanto cuando se dispersan y agarro lasaña, es lo único bueno que hay de lo que veo, bueno más bien lo único que me gusta. Digamos que si soy medio mañosa, pa que negarlo.  Me siento en la mesa con las maestras y Esmeralda, comemos en silencio y al terminar platicamos de cosas triviales.

Pasamos una velada viendo la ciudad de New York desde el yate. Bailamos y cuando decido subir y después de hablar con Esmeralda me quedo en la barandilla donde se ve la pista de baile. Y Leobardo se acerca.

• Hola - dice apenado.
• Hola
• ¿Qué  haces?
• Nada, viendo cómo bailan las indias, se me hace demasiado cool.
• Si es demasiado cool - dice y se voltea a verme-. Montse, quiero preguntarte algo.
• Dime
• ¿Quieres ser mi novia?

Fuck. ¿Cómo que su novia? ¿Pero qué carajos?

Me quedo ida en mis pensamientos porque la verdad para ser sinceros yo no quiero un novio, pero sí digo que no el viaje se me va arruinar. Puta madre lo único que queda es el sí.

• Sí, me gustaría - digo con una sonrisa falsa.

Leobardo me abraza y yo solo quedo estática en mi lugar. Porque al parecer cometí el peor error de mi vida.