Nos volvemos a encontrar.

Las tragedias del pasado arrasan con la inocencia y la infancia de Andrea, los continuos maltratos y desprecios de su madre dejan marcas tanto en su piel como en su mente, aunque su dulce abuela trate de remendarla, el daño ya está hecho.

Con la muerte de su única amiga; su abuela, y la desaparición de su madre. Andrea queda vagando y tratando de salir adelante en ese mundo en que si no tienes poder no eres nadie.

Cuando al fin logra algo de lo que estar orgullosa, el destino en conjunto con el amor quiere llevarla por un camino que ella no quiere caminar, pero tanto el destino como el amor son dos cosas a las que no se le puede negar, y así estos dos harán, que todos se vuelvan a encontrar.