Inicio

Llegar al mundo, imagina llegar al mundo y ser una bebé indefensa que no sabe lo que pasa a su alrededor. Y tampoco sabe defenderse a sí misma del mundo que la rodea. Somos dependientes de nuestros padres cuando estamos así, pero muchas veces ocurren cosas que te hacen creer que eres un error, cuando ya eres más o menos una adolescente.

Todo empezó en el año 2008. Una pareja discutía sobre el embarazo de Gloria. Ellos llevaban 5 años casados y Gregorio, su esposo, siempre había querido tener hijos. Por otro lado, Gloria odiaba a los niños. Ella no soportaba ni siquiera los llantos de un bebé, pero Gregorio discutía para que Gloria no abortara. Pero era cada vez más difícil cuando ella estaba decidida a hacerlo.

—¿Por qué eres así? No entiendo. Creí que podíamos tener un bebé y formar una familia. Pero estás siendo muy injusta, amor. ¿Por qué no quieres tenerlo?

Gloria levantó la mirada y miró su barriga con desprecio, como una típica madre que no quería tener hijos. Miró a Gregorio y luego puso sus manos en la cintura.

—No me interesan los niños. No quiero, y tú no puedes decirme nada. Está dentro de mí y voy a hacer lo que yo quiera —dijo ella, como una niña malcriada a la que no le gusta que le reclamen nada.

—Gloria, si entiendo tu punto de vista, pero al menos tenlo. Yo lo cuidaré y tú solo tendrás que amamantarlo. Pero no lo abortes, eso es malo y es un pecado... Al menos, eso creo.

Gloria se rió y luego se sentó en una silla cercana.

—Si fuera un pecado, entonces muchas hemos pecado, porque hay muchas como yo que no quieren tener hijos

Gregorio sonrió débilmente y miró su vientre con cariño antes de hablar y tocar su mano.

—Por favor... —sus ojos le suplicaban prácticamente.

Gloria soltó un suspiro y luego volvió a mirarlo.

—Lo voy a pensar...

Nueva historia, "Mi super papá", una historia para demostrar lo mucho que puede amar un padre a su hijo. ❤️