Capitulo 4 "Una oportunidad"

Terminamos muy ebrias incluso Aby quien se supone debía conducir, por esa razón mi hermano se encargó de llevarnos a Sarah y a mi. Brandon condujo el carro de Aby y las llevó a ella y a Mari. No recuerdo demasiado, solo que Liam gruñe y repite que soy una inconsciente durante el camino pero en cuanto siento mi cómoda almohada cierro los ojos y reina la paz en mi recamara, ni siquiera nos quitamos el calzado.
-¡Emma!- la voz de mi hermano retumba en todas partes, cubro mi rostro con la sábana -¡Emma levántate! Dijiste que irías al estadio- habla molesto y eso solo quiere decir una cosa ¡no es un buen día!
-¿debo cumplir?- pregunto, no se toma las molestias de responder, abro los ojos de golpe y lo miro su ceño esta fruncido ya lo se, sino cumplo dejara de hablarme. -¿cuánto tiempo tenemos?- inquiero
-media hora- camina hacia la puerta , voltea -espero abajo- dice antes de desaparecer. Miro a Sarah quien sigue durmiendo y aunque quisiera imitarla decido despertarla. Despierta totalmente perdida me pregunta a donde iremos, lo cual es gracioso. Después de arreglarnos muy rápido bajamos las escaleras, a la rubia le queda mi ropa por eso no tenemos inconvenientes cuando se queda aquí, ni siquiera trae suya y yo tampoco llevo cuando me quedo en su casa. El día es caluroso por eso escogimos short de mezclilla y unas remeras mangas cortas, unos tenis blancos. Nos tomamos unos minutos extras para maquillarnos en realidad cubrir las ojeras pero nada que un par de gafas no solucione. Bajamos y vemos a Liam concentrado en su celular, al vernos se pone de pie
Caminamos hacia su coche un Audi RS3 color blanco, al sentarnos me mira y yo rodeo los ojos es muy estricto abrocho el cinturón de seguridad, Sarah y él hacen lo mismo luego enciende el motor. Enciendo el estéreo buscando algo que oir, no me gusta el silencio, solo cuando estudio y ni siquiera así logro concentrarme ¿desde cuándo pienso en los estudios? Encuentro "Toxic de Britney Spears" en una emisora y subo el volumen. Liam eleva una ceja
-¿es en serio?- pregunta. Yo asiento sonriente. Al llegar estaciona y bajamos, Brandon se acerca a saludar; juntos caminamos hasta la entrada. Veo a Sophie a unos metros de distancia, tomo el brazo de Liam
-si vuelves a salir con ella dejas de ser mi hermano favorito- digo
-no tengo competencia ¿o si?- dice irónicamente
-no desvies el tema,  no volveré a hablarte- lo amenazo.
-descuida entre ella y yo no hay nada. Ni lo habra- eso me tranquiliza un poco, pero se me ocurre una grandiosa idea.
-demuestralo- lo desafio, Brandon y Sarah caminan adelante.
-¿cómo? Emma no estoy para juegos- suelta serio
-ella te sigue molestando, tal vez si cree que sales con Sarah ...
-¿cómo lo sabes?- inquiere
-eso no importa, solo besa a Sarah ...
-estas loca- vuelve a interrumpirme
-no más que ella, jamás dejará de molestarte- se me agotan las ideas solo espero que acepte. Lo piensa unos segundos
-no creo que sea bueno involucrar a tu amiga- responde
-por eso no te preocupes. Solo acepta y esa víbora no volverá a molestar-
-solo lo hago porque se que Sarah no querra- habla seguro
-muy bien, ese es mi hermano. El resto me lo dejas a mi- le guiño un ojo, camino hacia Sarah y la tomo del brazo
-¿qué pasa?- inquiere confundida
-Liam va a besarte asique disfruta este momento- hablo rápido ella frunce el entrecejo -lo hará para que Sophie deje de molestarlo pero lo hará- río pero ella no parece captar las palabras. -vamos sonrie-
-¿no crees que es muy evidente?- pregunta.
-¿qué cosa?-
-que hables con él,  luego conmigo y después que me bese- explica lo obvio -ella no es tonta, sabrá que es planeado-
-tu solo deja que te bese y ya- digo. No luce convencida ni feliz pero en cuanto mi hermano se acerque se que ella no podrá rechazarlo.  Ellos hablan de algo que no presto atención
-suerte en el partido- digo
-gracias- responden ambos. Liam deja un beso en mi mejilla y luego se acerca a Sarah apolla sus labios sobre los de ella, supongo es sin lengua y no dura demasiado pero es suficiente para que la loca los vea.  Brandon abre los ojos como plato, luego se elejan, tomo a mi amiga de la manos y nos dirigimos a las tribunas.
Por suerte la perdimos de vista, me agrada ver ese brillo en los ojos de Sarah. Ella cree que Liam es "imposible" pero yo apuesto que no, nos concentramos en el partido.
Mi hermano es el capitán del equipo, juega muy bien y además organiza a los demás allí dentro. No es por presumir pero siempre anota la diferencia y esta vez no es la excepción a solo cinco minutos de comenzar hace un gol el cual gritamos eufóricas.
Durante el descanso nos dirigimos al baño, y luego a comprar algo de comer, en otras personas los nervios cierran el estómago en nuestro caso todo lo contrario. Con las manos llenas de golosinas regresamos a nuestros lugares. A lo lejos vemos a la rubia observarnos con rabia, decidimos ignorarla mientras recordamos la fiesta
-¿piensas hablar con Ethan?- pregunta mi amiga
-no lo sé, no puede cambiar lo que vi. Ademas no me interesan sus excusas- respondo seria
-es cierto- toma mi mano - sabes que estoy para lo que necesitas- la presiona y yo sonrió
-lo sé, eres mi media naranja- ambas reimos. Comienza la segunda parte y miramos atentas, aunque de vez en cuando conversamos, mi hermano convierte otro gol y volvemos a gritar como locas.  Al finalizar encaminamos al coche de mi hermano ¿ por qué no le pedi la maldita llave? Despues de unos veinte minutos los vemos acercarse ¡era hora! Mi hermano sonríe de oreja a oreja eso es raro en él, no suele derrochar simpatía.
-¿estás bien?- pregunto. Él asiente
-tengo una noticia que darles- habla entusiasmado. Nos subimos al auto y conduce en silencio lo cual es una agonía. Soy muy curiosa y me impacienta esperar así sean pocos minutos, aparca frente a un bar. Bajamos de inmediato, al entrar buscamos una mesa vacía y nos sentamos, un mesero de nuestra edad se acerca y nos pregunta qué deseamos yo en particular que mi hermano cuente lo que es muy importante . Ellos piden cerveza, Sarah y yo solo limonada. El chico nos sonrie dulcemente ¿nunca vio dos muchachas sanas? Eso parece. Se aleja y miro ansiosa a mi hermano
-¡ya dilo!- exclamo
-bien, aquí va. Un equipo de Madrid quiere comprarme- suelta de golpeo y no puedo si quiera felicitarlo
-¡felicidades bro!- habla Brandon
-gracias amigo- voltea a verme, salgo de mi estado de shock
-eso es maravilloso- respondo
-si lo es-
-felicidades- dice Sarah.
-gracias- vuelve la vista a mi -nos vamos a España por dos años- agrega. Miro a mi amiga
-¡no!- gritamos a la vez.