Capitulo 24 "Inolvidable" parte 2

Juro que esta semana bajaré diez kilos, nunca en mi vida estuve tan activa, entre salir a correr, andar en bici y  hacer el amor estoy batiendo mi record.
Es jueves y mi pobre amiga está en casa sola con mi hermano, espero no me odie por abandonarla, y a la pobre Les la corrimos de su casa prácticamente, bueno en realidad su primo lo hizo. John y yo solo nos separamos cuando él va al club.
Termino de maquillarme, me miro en el espejo y me gusta como me veo, visto un jeans con rotura en las rodillas, unos tenis blancos, y un top rojo, llevo mi cabello suelto, el maquillaje es natural.  Bajo las escaleras, John me espera sentado en el sillon del living, se ve hermoso, lleva puesto un chupin azul localizado, que le queda espectacular, una remera blanca, y unos tenis blancos. Me acerco - ya estoy lista - digo
-bien vamos. Se pone de pie y me guiña un ojo. Salimos y subimos a su coche, conduce hasta el cine Paz, veremos una pelicula de terror, las que menos me gustan, pero tengo a John a mi lado, lo presionare con todas mis fuerzas si me asusto. Después de hacer una larga fila, ingresamos a la sala, tomamos asiento. John compra palomitas, a los pocos mimutos empieza la pelicula que no recuerdo su nombre. En más de una ocación cierro mis ojos, y abrazo a John, quien se rie de mi. Después de las dos horas más largas de mi vida salimos.
-¿te gusto la pelicula?- pregunta en tono de burla
-si me encanto- respondo ironica. John se rie. -si solo querias que te abrace tenias que pedirmelo y ya.
-si amor, queria que me abraces- dice divertido. Me abraza por la cintura y caminamos hasta su coche.
-Emma el sabado organizamos un encuentro de fans con los chicos, sera en la plaza, van a ir Les y Sarah seguramente. ¿me vas a acompañar?- cuestiona 
-claro, ahi estare- replico 
-que bueno- Se acerca y me da un beso. Enciende el vehiculo y nos dirigimos a su casa. Me gusta dormir en su casa, solo que no quiero acostumbrarme demasiado. Subimos a su cuarto, empieza a besarme con tanta pasion, que deseo tanto tenerlo dentro de mi, acaricia mi cuerpo mientras nos empezamos a quitar la ropa que sobra en estos momentos, llevo mis manos hasta su cuello, profundizando el beso. Me acuesta en la cama y se sube encima de mi, besa mi cuello con delicadeza, en tan poco tiempo John conoce mis debilidades, cierro los ojos y me dejo llevar por el placer.
-Emma- susurra él - abre los ojos, mirame-
Yo lo hago me encuentro con sus hermosos ojos verdes mirandome con deseo.
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-Por ser viernes tengo el plan perfecto- dice John.
-¿se trata de pasar el día acostados? Si ese es el plan acepto.
-no, no es ese, vamos Emma, mañana no podemos estar todo el día juntos.
-ya lo se, esta bien- Me levanto y me dirijo al baño a darme una relajada ducha. Debo empezar a tomar pastillas anticonceptivas, así podremos hacer el amor sin condon; dejo esos pensamientos para más tarde, salgo del baño y me alisto, me pongo un leggins negro, un top negro, encima una sudadera color salmon, me hago una coleta alta.
-deja el misterio para otra ocación John y dime ¿que haremos hoy?
-escalaremos.
-¡¿que?! - abro los ojos como plato
-será divertido.
-cuando me caiga y me quiebre será divertido para ti.
-no seas exagerada, además estarás amarrada, si caes no pasará nada-dice seguro. Entecierro mis ojos.
-¿crees que me voy a caer cierto?- 
-tu lo dijiste no yo-  Dice entre risas. Lo fulmino con la mirada.
Tras conducir unos extensos minutos llegamos a nuestro destino.
-bienvenida a la pedriza- dice John
Yo observo el lugar, la Pedriza es un gran batolito graníticosituado, está formado por numerosos riscos, paredes rocosas, canchales, arroyos y praderas.
Me siento nerviosa, en mi vida escale algo así, lo único que escale fue mi ventana, cuando me escapaba con Sarah. John me mira divertido; se acerca y comienza a colocarme un casco,  luego sigue con un arnes con cuerda y mosquetones, John me explica que cada tanto debo ir enganchando la cuerda, yo solo asiento.
-ire a tu lado, tranquila, no caeras estas segura con la cuerda, solo avisame si quieres parar. Me da un suave beso en los labios.
En el lugar hay dos hombres más que nos ayudan y explican como hacerlo. Mi corazón late rápidisimo, es momento, nos acercamos a esa enorme montaña de roca me coloco en posición para empezar, miro a mi lado John esta concentrado, creo que esta un poco nervioso tambien, con toda la fuerza del mundo empiezo a levantar las piernas buscando donde pisar, es raro no me resulta tan dificil, no debo mirar para abajo, abrocho el primer mosqueton, sigo subiendo, los nervios desaparecen magicamente, siento ansiedad por subir más y más alto, miro a mi lado a John, quien me sonrie. Miro abajo no puedo creer todo lo que escale, estoy a varios metros de altura. De pronto me mareo, no no ahora no, levanto la cabeza y cierro los ojos el casco se desliza hacia atras, intento no perder el equilibrio. John va más arriba, llevo una mano hasta mi frente, intento ajustarne el casco y es ahi cuando lo estropeo caigo fuerte, aunque la cuerda amortigua mi caida, me golpeo la cabeza con una roca. Los hombres que estan abajo gritan si estoy bien, yo levanto mi dedo pulgar en aprobación ellos me ayudan a bajar, me desabrochan el cinturon, y miran el golpe en mi coronilla.
-¿esta bien señorita?- pregunta uno de ellos. Yo asiento medio anonada, levanto la mirada y veo a John bajando, el otro señor lo ayuda, al desabrocharle su arnes corre hasta mi.
-¿estas bien? ¿por que no me dijiste que no podias subir más? - habla rápido y preocupado.
-estoy bien, me maree por mirar hacia abajo. Él respira con pesadez.
Emma ¿que voy a hacer contigo? - me abraza. - es mejor que nos vayamos a casa. Esta vez decido no negarme, supongo el casco quedó mal abrochado y por esa razón se movió. Yo subo al auto, él continúa hablando con los hombres, yo me siento y cierro los ojos, estoy cansada.
Escucho que la puerta se abre pero no intento abrir mis ojos.
-¿Emma? ¿Emma? - John me mueve.
Lo miro extrañada. -¿que pasa?- él da un suspiro de alivio. - estoy bien, solo fue un golpe sin importancia. Me acerco y dejo un casto beso en sus labios.
-me asuste es todo- responde al separarnos.
-necesitas más que un golpe en la cabeza para deshacerte de mi- susurro. Él sonrie, arranca el vehiculo y salimos de alli.
-perdoname no fue como esperaba, no debi traerte ...
-estuvo genial, me gusto- lo interrumpo.
-si te pasaba algo yo ...
-no me paso nada, gracias por hacerme vivir experiencias únicas.- digo sincera
El resto del camino lo hacemos en silencio, por mi parte admirando la bella naturaleza.