CAPÍTULO XXXIII VERDADES OCULTAS (Parte 4)

Mientras tanto, Lucy estaba en su casa, sentada en su sillón. Se percata que Caroline está escribiendo de una forma muy extraña, se levanta y se acerca lentamente y se da cuenta que está preparando un hechizo para poner el poder de Ángela en un recipiente, pero nota que este hechizo necesita sacrificio humano. Se asusta, le agarra la mano a su hija y dice:

-Caroline, no voy a permitir que realices ese hechizo no somos asesinas-

-Mamá, eehh espera…- Caroline responde tartamudeando y asustada.

-Hija, no podré dejar que mates a Ángela, es tu sangre también…- le dice Lucy a su hija tratando de convencerla.

-Lo siento mamá, pero tengo que hacerlo-. En ese momento Caroline le arroja un polvo a su madre y la duerme. El nuevo poder que había adquirido junto a sus hermanas la estaba corrompiendo, no sólo a ella sino a todas tres juntas. En ese momento llegan Celina y Cristal, ven a su madre tirada en el suelo y corren a auxiliarla. Caroline estaba parada y dice:

-Ya es hora de comenzar la batalla-. Sus hermanas la ven y le pregunta qué le pasó a su madre. Ella les dice que la puso a dormir porque iba a ser impedimento para derrotar a Ángela. Las chicas se paran y se quedan viendo con un poco de miedo. Caroline les agarra las manos y hace un hechizo de protección.

-Phasmatos spirita protectum no seos egos- todas comenzaron a repetir el hechizo una y otra vez hasta que un viento comenzó a tirar las cosas del lugar. Después de hacer el hechizo, salieron de la casa y se treparon al auto y fueron en busca de Ángela, quien se encontraba en su cuarto durmiendo. De pronto sintió una energía que se acercaba donde ella y se levantó asustada. Coge su teléfono y llama a Josh.

-Josh, algo malo va a pasar, lo presiento- un poco asustada.

-Tranquila Ángela, ya voy en camino. Estamos cerca- . Josh se levanta de su cama y se viste. Se dirige al cuarto de Ángela y cuando iba entrando a la universidad, ve de lejos un automóvil que venía a toda velocidad. Casi lo atropella, pero lo esquiva rápidamente lanzándose al suelo. El vehículo se estaciona, se abren las puertas y de poco en poco va saliendo Caroline, con una mirada centrada en su objetivo, extiende su mano hacia Josh y un viento lo arroja contra la puerta, destruyéndola y dejando al pobre e indefenso muchacho inconsciente. Celina y Cristal también se bajan del auto van donde Josh lo cogen y arrastran su cuerpo hasta el auto y lo meten a la cajuela.