CAPÍTULO 6, PARTE 2: "DEM, CACHITO Y EL PANAL DE ABEJAS"

_ ¡De acuerdo! _ murmuró su amigo. Y acto seguido le asestó un feroz palazo a la jugosa y amarillenta luna llena. Acto seguido un arsenal de abejas salieron despavoridas del panal, y se lanzaron como saeta en busca del malhechor. En ese preciso instante, el autor se subió a la bicicleta, y despegó de allí, a gran  velocidad, a tal punto que creyó que había perdido por completo a las amenazantes guardianas meleras. Pero se equivocó. Entretanto, la velocidad aumentaba, y la adrenalina también. A todo esto, Dem, había desaparecido del mapa, y su amigo se encontraba a millones de años luz de encontrarlo.

En ese preciso instante, Cachito, se llevó puesto un cuatriciclo abandonado sobre el césped . Como no llevaba puestos los anteojos para ver de lejos, era incapaz de distinguir un hipopótamo en la ducha.

Sorpresivamente, el jovencito voló por los aires .

Consiguió prenderse de un pequeño colchoncito de nieve, que lo salvó de una feroz caída. Entretanto, las abejitas habían diseñado un ingenioso plan, que, de   surtir efecto, le daría el pequeñito su soberbio merecido.